El movimiento y la posición de la cola de un gato revelan mucho más de lo que te imaginas. Si bien los maullidos pueden ser adorables y los bufidos una señal clara de que algo no anda bien, la cola de tu gato es un barómetro emocional que te permite “hablar” su idioma de manera más fluida.
Aprende a decodificar estos 11 secretos de la cola para entender mejor a tu felino. Desde la punta que se mueve hasta una cola erizada, cada movimiento cuenta una historia y te da pistas sobre lo que tu gato necesita o siente.
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Si la cola de tu gato está recta, apuntando hacia el techo, es una señal de felicidad y confianza. Esta posición indica que tu gato se siente cómodo en su entorno y está dispuesto a interactuar. El máximo exponente de felicidad es cuando la punta de la cola tiene un pequeño movimiento, ¡es un gato realmente feliz!
Cuando la cola se mueve rápidamente de un lado a otro, es una clara señal de que algo no anda bien. Este movimiento de látigo indica miedo o irritabilidad. La veterinaria Natalie Marks, DVM, señala que en una situación de extremo miedo, esta señal puede ser el preludio de un comportamiento agresivo.
Si tu gato mira fijamente algo y lo único que se mueve es su cola lentamente, esto no es un signo de aburrimiento. En realidad, indica foco e intención. El gato se está preparando para realizar un movimiento, como abalanzarse sobre un juguete o perseguir a un compañero de casa.
Cuando tu gato está acurrucado y tiene la cola escondida debajo de su cuerpo, está demostrando que se siente muy cómodo y relajado. Esta es una posición común en las siestas, que ocupan una gran parte de su día.
Una cola que se mantiene alta con una pequeña curva o rizo en la punta, como si fuera un signo de interrogación, es una invitación a jugar. Este movimiento significa que tu gato está de buen humor y quiere divertirse. Es el momento perfecto para interactuar y pasar tiempo de calidad juntos.
A diferencia de los perros, la bienvenida de un gato es más sutil. Si tu gato se te acerca y te enrosca la cola alrededor de la pierna o incluso de tu cara, es una genuina demostración de afecto. Este comportamiento, conocido como “afiliativo”, refuerza el vínculo que tienen contigo.
Una cola baja es un mensaje directo para que los demás se mantengan alejados. Esta postura indica irritabilidad o un estado de ánimo agresivo. Sin embargo, en algunas razas como los gatos persas, la cola baja es una característica normal y no debe confundirse con un comportamiento reactivo.
Una cola esponjosa y erizada es una de las señales más claras de miedo y agitación. En una situación amenazante, el gato esponja su cola y su pelaje para parecer más grande e intimidante. Es una señal de que está asustado y nervioso.
Cuando un gato se acurruca con la cola envuelta alrededor de sus patas, es una señal de nerviosismo o sumisión. Si además tiene la cabeza agachada, podría estar experimentando miedo o incluso dolor.
Una cola que cuelga sin fuerza o que no tiene la energía suficiente para moverse podría ser una señal de que tu gato no se siente bien. Otros signos de un problema más serio incluyen: laceraciones, sangrado, mordeduras, abscesos, falta de pelaje o decoloración en la cola. Si notas alguna de estas señales, es vital que lleves a tu gato al veterinario de inmediato.
La cola de tu gato es una herramienta de comunicación esencial. Al aprender a interpretar estos 11 secretos de la cola de tu gato, puedes entender sus emociones, necesidades y señales de advertencia. Este conocimiento no solo te ayudará a responder de manera más adecuada a tu mascota, sino que también fortalecerá el vínculo especial que comparten.
¿Qué otros secretos de tu gato has descubierto? ¡Comparte tus observaciones en los comentarios!
Tomado de rd.com Cat Tail Signs: 11 Secrets You Can Learn from a Cat’s Tail
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