Connie Redinger de Indiana, Pennsylvania, dice, “Un gorrión coronirrufo estaba posado en mi árbol de lilas y después dio un corto vuelo a mi cerca. Se veía tan orgulloso sentado ahí como diciendo, ‘Gracias, mamá, puedo volar!’. Era tan pequeño pero tan valiente—un nuevo integrante de los pájaros que disfrutan de la vida”.
“Unos pájaros oropéndola de Baltimore construyeron un nido en una rama del árbol arriba de mi porche”, dice Marybeth Zilnicki de Riverhead, Nueva York.
“Una vez que sus huevos eclosionaron, disfruté ver a ambos padres alimentar y cuidar de sus pequeños. Tenía suerte de verlos asentarse en mi cerca. Me encanta como se ven sus plumas y cómo se refleja mi árbol en su ojo”.
“Encontré este adorable ansarino en el Parque Belmar de Lakewood, hogar de una gran variedad de aves y pájaros, un lugar favorito con senderos para andar, estanques, y una abundancia de vida salvaje”, dice Chuck Danford de Littleton, Colorado.
“Uso fotos como esta para crear pinturas de acuarela”.
“Cuando noté por primera vez a este pequeño mirándome, pensé que era un búho bebé”, dice Dianne Braun de Southport, Carolina del Norte.
“Tras una mayor inspección, me di cuenta de que pertenecía a los pájaros cernícalo americano. Como no estaba volando demasiado, tuve tiempo de tomar mi cámara para esta foto. El cernícalo estaba bajo un arbusto de mariposas en nuestra vieja casa en Woodland, California”.
Robert Broome de Winter Garden, Florida, dice, “Este padre carrao estaba sacando almejas eficientemente del fondo del lago, llevándolas a la orilla y abriéndolas para comerlas. Un ave inmadura estaba detrás, ansioso de aprender e imitando cada movimiento”.
“Estos pájaros petirrojos americanos estaban esperando ser alimentados al principio de la primavera”, dice Daryl Beck de Pleasant Hill, Missouri.
“Su nido estaba en el tractor de una granja junto a la palanca de cambios, así que tuve que esperar a que tuvieran plumas para usar el tractor”.
Raven Ouellette de Sudbury, Ontario, escribe, “Una familia de patos reales tomó residencia en el lago de nuestro vecindario. ¡Un patito que estaba explorando una zona pastosa cercana estaba tan intrigado por un diente de león! Me recordó el dicho ‘Siempre tómate el tiempo de detenerte y oler las flores’”.
“Mi esposo y yo alimentamos un par de pájaros mosqueros negros”, dice Jennifer Meyer de Mission Viejo, California.
“Atrapan lombrices directamente del aire cuando las lanzamos. Las aves trajeron a su nueva cría, y está se posó en una silla del patio. La foto es especial para nosotros por nuestra relación con estos asombrosos voladores”.
Leslie Abram de Codrington, Ontario, escribe, “Finalmente, ¡un joven azulejo del este! Junto con nuestros vecinos, pusimos muchas cajas de nidos y hemos estado plantando jardines de vida salvaje con arbustos y árboles nativos para atraer estas bellezas. Hace falta un pueblo para criar un azulejo”.
Douglas Beall de Camp Sherman, Oregon, dice, “los pájaros avetoros americanos suelen ser difíciles de ver, pero cuando estos jóvenes brincaron al rededor del pantano, me dio una primera oportunidad de capturarlos en su típica pose de ‘Solo soy un junco.’ Los avetoros retroceden y avanzan en sincronía con los pastos del pantano moviéndose con el viento. Es una habilidad de supervivencia fascinante que los hace difíciles de ver”.
“Mi esposo y yo convertimos nuestro jardín en un refugio para aves, abejas, y mariposas al plantar flores y árboles para atraerlas,” dice Deb Forster de Clayton, Carolina del Norte.
“También hemos puesto estaciones de alimento, una pila para pájaros con una fuente de burbujas, y dos casas para aves. Nuestro primer par de azulejos llegó y produjeron muchas crías. El verano pasado fue tan alegre ver otro par construir un nido y cuidar de sus bebés. Después de que su segunda cría se fue, tres de los azulejos más jóvenes eventualmente volvieron a la pila. Justo estaba afuera y tomé una foto de los hermanos”.
Mary-Ann Ingrao de Angola, Nueva York, dice, “cuando estaba en Fort Lauderdale, Florida, era tan refrescante mirar estos dos jóvenes búhos. En sus ojos, veo amor y coraje. Unos momentos antes de esta foto, se estaban besando”.
“Una de mis cosas favoritas del verano es disfrutar del desayuno en el jardín mientras escucho a los pájaros, dice Michele Verbick de McHenry, Illinois.
“Miré estos jóvenes pajarillos pedir comida en una de mis muchas casas para aves. Uno o dos asomaron sus cabezas en la búsqueda de comida. Me puse en posición con mi cámara y no podía creerlo cuando los tres se asomaron para la foto al mismo tiempo”.
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