Mascotas

13 consejos para mejorar los hábitos de tu mascota

Descubrimos que a veces las mascotas entienden nuestros cuidados y preocupaciones de manera diferente a la nuestra.

1. Les damos besos, los abrazamos y queremos cargarlos todo el tiempo

A veces es muy difícil pasar cerca de nuestra mascota y no acariciarla. ¿A quién no le gusta besar y abrazar al pequeño? Pero, en realidad, para él no es lo mismo que para nosotros.

En el mundo animal este tipo de cariños no existen, por eso no entienden muy bien qué es lo que está sucediendo.

Consejo: Enséñale a tu mascota la orden “Arriba” y siempre estará preparado para recibir tus abrazos.

2. Podemos despertarlo sólo porque se nos ocurrió acariciarlo

Cuando algún miembro de la familia se queda dormido en el sillón, muchas veces lo cubrimos con una frazada e intentamos hacer menos ruido para que no se despierte. Pero esta regla no aplica a nuestras mascotas.

No tienes que tapar a tu perrito con una manta, pero recuerda que para un animal es un estrés desagradable que lo despierten.

Consejo: No tienes que cuidar el sueño de tu mascota y andar de puntillas, pero tampoco lo despiertes sólo para acariciarlo.

3. Nos quedamos mirando a nuestra mascota

Sentimos cierta incomodidad cuando alguien se nos queda viendo fijamente. En el mundo animal, mirar directamente a los ojos significa peligro. El que está siendo observado debe prepararse para el ataque.

Consejo: Si simplemente admiras a tu mascota, intenta hacerlo de manera sutil. Sino, la pondrás nerviosa y le generarás un estrés innecesario.

4. Los regañamos por pequeñas travesuras, incluso cuando dejamos la comida a su alcance

Dejamos una chuleta en la mesa y luego nos sorprendemos cuando no la podemos encontrar donde estaba.

Se nos olvida que un animal, si tiene acceso a la comida que le encanta, se la acabará toda. Y la culpa no es de tu mascota, sino tuya.

Algunos creen que las mascotas deben razonar y distinguir lo bueno de lo malo.

Consejo: No provoques a tu mascota, no te olvides de sus instintos. Y si lo regañas, explícale qué fue lo que hizo mal y cómo debe portarse.

5. Usamos frases diferentes para el mismo orden

“¡Pelota! ¡Tráeme la pelota! Cocodrilo, ¡corre por ella! ¿Dónde están tus juguetes?“. Y el pobre Cocodrilo está sentado enfrente de ti con los ojos confundidos, se pone nervioso sin entender que sólo querías jugar con la pelota.

”Empezó a hablar de la pelota, terminó con juguetes. ¿Qué es lo que quiere de mí?”.

Consejo: Una orden, una frase.

6. Les permitimos estar flojos y descansar demasiado

Al igual que las personas, las mascotas necesitan tener actividad física. No pueden estar siempre en casa, incluso si tienen su caja de arena.

La falta de actividad provoca sobrepeso que puede llevar a varios problemas con articulaciones e incluso reducir la vida.

Consejo: Los paseos y juegos activos son igual de recomendables, tanto para la mascota como para el dueño.

7. Calmamos a la mascota diciéndole que “Todo está bien”

Los animales sienten cuando ocurre algo poco placentero. Por ejemplo, a tu mascota no le gusta bañarse. Por lo general, le decimos la frase acostumbrada de “¡Todo está bien!“.

Como resultado, después de 2 o 3 veces de ”todo está bien”, tu perro sabrá que, en realidad, todo estará mal.

Consejo: No uses frases trilladas con tu mascota, compórtate como de costumbre, sobre todo, ante una situación nerviosa para el animal.

8. Los consentimos con golosinas

Sí, es difícil de resistir cuando esos ojos llenos del amor y fidelidad te miran desde abajo de la mesa. ¡Ten cuidado! Nuestros alimentos no siempre son buenos para las mascotas.

Si le deseas el bien a tu animalito, cuida su alimentación y procura que reciba todas las vitaminas que necesita.

Consejo: Si le das la comida de la mesa, que sea algo que sí pueda comer. Dale alimento de calidad a tu mascota.

9. Pensamos que todos pueden usar la misma caja de arena

Hubiera sido perfecto si todos los gatos de la casa usaran la misma caja de arena, pero en realidad, es un poco más difícil. Los gatos son muy caprichosos y quieren tener su caja propia.

Si tienes esta oportunidad, cumple su deseo. Lo ideal sería distribuir varias cajas de arena por la casa.

Consejo: Antes de adoptar a una mascota, piensa si puedes darle todas las condiciones que necesita.

10. Llenamos el plato hasta el tope para que no sienta hambre

A veces cuidamos a nuestras mascotas demasiado: llenamos sus platos hasta el tope. ¿Qué es lo que le queda al animalito? Comer de más: si el alimento siempre está disponible, nuestras mascotas rápidamente suben de peso.

Consejo: Pregúntale al veterinario, lee etiquetas de alimentos: ajusta la cantidad de la comida de tal forma que vaya de acuerdo con el peso y tamaño de tu mascota.

11. Empezamos a educarlos cuando ya es tarde

¿Te da pena educar a esta criatura tan tierna? Recuerda que cada año será más complicado explicarle que está haciendo algo mal. Sé estricto desde el principio.

Enseñarle algo a un animal adulto acostumbrado a hacer travesuras es una tarea complicada.

Consejo: Explícale qué es lo que no debe hacer de inmediato. No pasando 5 minutos. Si regresaste a casa y encontraste un charco en el pasillo, es inútil regañarlo. Mejor alábalo cuando lo haga en el lugar adecuado.

12. Intentamos no dejarlo solo durante mucho tiempo, pero a veces no podemos hacerlo

Nos parece que nuestra mascota simplemente se duerme mientras no estamos, se divierte o descansa de la gente. Pero no es así: se pone triste y se preocupa.

Los perros pueden aguantar 4 o 5 horas en una jaula (si los sacas a pasear antes y después de esto) y los gatos, estar solos durante no más de 1 a 2 días. Claro, siempre y cuando tengan la caja de arena limpia y comida suficiente.

Consejo: Invita a tu amiga(o) o a tu abuela a que duerma en tu casa si sabes que vas a llegar muy tarde o vas a salir fuera de la ciudad durante unos días. O tal vez valga la pena pensar en adoptar otro animalito para que le haga compañía.

13. Nos olvidamos de que para ellos somos el mundo entero

Al igual que los niños, nuestras mascotas necesitan atención, cariño y amor. Les encanta cuando les hacemos caso y jugamos con ellos.

Por aburrimiento, tu querido perro salchicha puede empezar a morder todo alrededor, escarbar, ladrar e incluso aullar. Y tu querida gata, arañar o maullar fuertemente.

Consejo: No olvides lo mucho que te quieren.

Y para ti, ¿cómo es el trato con tu mascota? ¿eres permisiva(o)? Compártenos tu día a día con tu animal favorito.

Fuente: genial.guru

Selecciones

Entradas recientes

El síndrome overfilled: ¿la nueva epidemia de la belleza?

¿Sabías que el exceso de tratamientos estéticos puede llevar al síndrome overfilled, transformando un rostro…

5 horas hace

Razones por las que deberías incluir la sopa de miso en tu dieta

El miso no es sólo delicioso; también es un aliado poderoso para tu bienestar.

6 horas hace

¿Mal aliento en tu perro? Descubre las causas y cómo solucionarlo

Aprende sobre las posibles causas y las mejores soluciones para mantener su boca sana y…

7 horas hace

Así es la vida: ¡Ay no! Volví a comerme los ingredientes primero

Llevo cuatro meses saliendo con un chico y hoy me preguntó por qué no tengo…

8 horas hace

Descubre los 4 alimentos que limpian tu intestino de forma natural

¿Sabías que ciertos alimentos pueden limpiar el intestino? Te mostramos 4 opciones efectivas que mejorarán…

9 horas hace

Algas marinas: un snack sabroso y nutritivo

¿Sabías que las algas son una fuente sorprendente de nutrientes esenciales? Sumérgete en su mundo…

1 día hace

Esta web usa cookies.