Toma en cuenta esto si estás planeando un viaje próximamente
Es importante aprovechar tus vacaciones y salir de la rutina, descansar y divertirte. Para lograrlo es necesario planificar el viaje.
Si bien es cierto que no siempre se pueden hacer planes con mucha antelación —por razones de trabajo o familiares—, lo ideal es reservar tu viaje con al menos dos semanas de anticipación para encontrar opciones competitivas y accesibles, ya que éste es uno de los periodos vacacionales en los que hay mayor saturación.
Para hallar las mejores ofertas en Internet, borra tu historial de búsquedas. Si ya viste una ganga, elimina las cookies antes de visitar la página otra vez. Los sitios de ofertas pueden saber si eres un visitante recurrente y aumentar el último precio que viste.
El mejor hospedaje se consigue llamando al hotel directamente. Las agencias de viajes si acaso igualarán la mejor tarifa que halles en línea. ¿No hay cuartos libres? Averigua a qué hora vencen las reservaciones y marca unos minutos después para tomar una de las habitaciones. No olvides empacar esto para viajar durante la pandemia.
Vale la pena indagar qué día de la semana es más barato volar. En vuelos nacionales, suele ser el miércoles, ya que mucha gente vuela en los fines de semana. Los martes son una buena opción también.
Casi todas las ciudades importantes tienen breves temporadas bajas en las cuales reducen sus precios y hacen ofertas de último minuto. Visita Nueva York después de la Semana de la Moda, o Venecia al terminar el festival de cine. Los hoteles se vacían el último día de un gran evento, y los mejores restaurantes tienen mesas libres.
No todos los cuartos de hotel son iguales; algunos son más grandes o tienen mejores vistas. Al registrarte, pide la mejor opción. Si tienes un poco de dinero extra, pregunta por las habitaciones más cómodas.
¿Te sabes tu número de pasaporte? Lo necesitarás en caso de robo o extravío. Pero no tienes que memorizarlo si se lo dejas anotado a un familiar o un amigo de confianza. Si en tu viaje vas a tener acceso al correo electrónico, escanea los datos y envía una copia a tu buzón para tenerlos a la mano.
Para aprovechar al máximo tus millas de viajero frecuente, llama a tu agente después de la medianoche. No sólo te ayudará a hacer uso de los beneficios, sino que tal vez te ofrezca más opciones, ya que las aerolíneas suelen liberar el nuevo inventario un minuto después de las 12 de la noche.
Pregunta a tus amigos en Facebook o a tus seguidores en Twitter si tienen alguna recomendación sobre el lugar que visitarás. Ir a los sitios que a ellos les gustaron es buena idea. Y asegúrate de hacer clic en “Me gusta” en la página de Facebook de la oficina de turismo de tu destino y de las principales atracciones para enterarte de las ofertas y promociones especiales.
Dinero
Los bancos suelen tener sucursales en el extranjero, así que puedes usar sus cajeros automáticos para sacar divisa local sin tener que pagar comisiones por transacciones internacionales. Consulta a tu banco al respecto antes de viajar.
Nadie quiere regresar de unas vacaciones con un adeudo bancario exorbitante. Verifica qué cobertura de seguro de viaje te ofrece tu tarjeta de crédito o tu seguro médico, y luego toma medidas a fin de afrontar gastos imprevistos.
Evita a las compañías de seguros que obligan a los viajeros a pagar por adelantado las cuentas de hospital. Una póliza de seguro multiviajes con un pago anual suele ser la mejor opción, incluso si sólo haces un par de viajes al año.
Si te quedas varado en un aeropuerto por más de 24 horas, considera comprar un pase de un día para la sala VIP de una aerolínea. Los sillones mullidos, el Internet inalámbrico, los bocadillos y las bebidas te permitirán sobrellevar mejor la espera.
O si necesitas Wi-Fi, siéntate afuera de una sala VIP para aprovechar su servicio gratuito.
12. No tienes que pasar hambre durante el viaje por falta de dinero. Muchos restaurantes —sobre todo en las zonas turísticas— hacen descuentos a los primeros en llegar. Come temprano y te quedará un poco de dinero para un helado o un café después.
O bien, compra verduras y frutas frescas, un queso local y pan hecho en casa, y almuerza o cena al aire libre.
13. Lleva un registro digital de tus viajes. Las fotos son una gran forma de estar atentos a las cosas importantes, como dónde estacionaste el auto, cómo es tu maleta y el lugar del hotel donde te hospedas.
Lleva contigo todo lo que vas a necesitar. Asegúrate de llevar en tus maletas todos los artículos que necesitarás durante las vacaciones (traje de baño, artículos de aseo personal, etc.). Además de darnos sorpresas desagradables, los olvidos de cosas en casa casi siempre implican gastos no planeados.