A veces, puede parecer más fácil aferrarte a tu enojo en lugar de dejarlo ir. “Solo porque algo parece más fácil al inicio no significa que sea la cosa más útil qué puedes hacer“, dice Ilene S. Cohen, una psicoterapeuta en Miami, Florida, y coautora de It’s Within You. Estar enojado es un instinto natural, dice, pero no siempre te sirve. “Nunca presionaría a alguien a perdonar si no es lo que quieren hacer. De cualquier modo, si encuentran que su enojo no los está ayudando, diría que es hora de ofrecer el perdón, lo cual también se conoce como terminar un conflicto no resuelto“, dice.
La mayoría de las personas tienen alguien que les ha hecho mal de alguna manera u otra, sea un padre negligente al crecer, una pareja que los engañó en una relación tormentosa o incluso una persona que los dejó tirados con planes. No todas estas injusticias terminan en dolor emocional duradero. Pero cuando lo hacen, es importante saber que el perdón es una opción.
“Cuando otros nos han tratado injustamente, debemos tener las herramientas para lidiar con ellos para que los efectos de esta injusticia no perduren de una manera no saludable“, dice Robert Enright, profesor en el departamento de psicología educativa en la Universidad de Wisconsin, Madison, y autor de Forgiveness is a Choice.
Además, no necesitas un profesional de la salud mental para guiarte por este camino hacia el perdón. Es algo que puedes lograr por ti solo, siempre y cuando sepas los pasos que tomar.
El primer paso hacia alcanzar el perdón es decidir que es algo que realmente quieres hacer. De cualquier modo, existe un beneficio para ti: Investigación en Annals of Behavioral Medicine muestra que el acto de perdonar disminuye el nivel de estrés percibido de una persona, lo cual es algo bueno para la salud mental.
“Pienso que es importante que las personas estén atraídas hacia perdonar, y no forzadas hacia ello“, dice Enright. También nota que el perdón no significa escudar u olvidar una injusticia, o volver a una relación que es dañina. “Algunas personas confunden el perdón y dicen, bueno, si perdono no podré buscar justicia“, dice. “Esa es uno de los grandes críticas del perdón que no es verdad”.
Conoce cómo el perdón puede hacerte sentir más saludable, quién lo puede necesitar más y qué ofensas son más difíciles de superar.
Comienza el proceso del perdón con este paso preliminar: haz una lista de todas las personas que te han hecho daño, sin importar que tan grande o pequeña sea la ofensa, volviendo a tu niñez. Después, ordena los nombres desde el nivel más bajo de injusticia y enojo al más alto.
Comenzarás el proceso de perdón con alguien hacia el final de la lista. “Empezar con la persona más arriba en la lista sería pedir a alguien que no está en forma que corra un maratón“, dice Enright.
“Empieza el proceso con alguien que te siga molestando, pero que no te esté destrozando. A medida que repitas el proceso moviéndote más y más alto por la lista, te será más fácil perdonar, y serás mejor afrontando a esas personas que realmente te lastimaron“.
Este es el inicio oficial para la fase uno del modelo de perdón de Enright, y es crucial para reforzar la importancia del perdón. “Es algo así como una lista“, dice Enright. “¿Cómo te está yendo en términos de ira? ¿Cómo lo has estado negando? ¿Estás más enojado de lo que pensabas que ibas a estar? ¿Cuáles son las consecuencias físicas de tu enojo?”
La fatiga es la queja física más común que escucha Enright, que es una visión del mundo pesimista—creyendo que no se puede confiar en nadie o que todos están ahí afuera solo para ellos mismos. “Una vez que veas estos efectos, la pregunta se vuelve, ¿quieres sanar?“ dice Enright.
Hablando de enojo, la culpa suele ir acompañándolo. “Es importante que veamos el papel que jugamos en el conflicto que estamos afrontando”, dice Cohen. Sáltate esa parte, y velo enteramente como que es la culpa de la otra persona, y el efecto será duradero.
“De otra forma, podrías continuar viendo el mismo tipo de conflicto jugando en sus relaciones”, dice. Ver tu parte en todo esto no significa que ahora es tu culpa. Tu papel podría significar que no alzaste la voz cuando algo te molestó, por ejemplo, añade Cohen.
Para moverte hacia sanar, querrás ser justo con quienes no fueron justos contigo. “Una vez que las personas hayan visto como los efectos de su vida los han hecho infelices, hay una tendencia para intentar esto“, dice Enright.
En esta fase, también es importante comprometerte a no dañar a la otra persona que estás tratando de perdonar. “Eso no significa que tienes que ser bueno con ellos“, dice Enright. “Esto sólo significa que no le harás nada negativo”.
La meta es terminar sintiendo compasión por la otra persona. Empieza por pensar en ellos de una manera distinta. ¿Cómo fue lastimada esa persona en la vida? ¿Cómo fueron tratados injustamente? ¿Estaban tan lastimados que te lastimaron a ti?
“Esa persona pudo haber tenido algo pasando en su vida de lo que no sabías o tenía una historia que contribuyó con cómo actuaba“, dice Cohen. Al ver las cosas desde su perspectiva, podrías ser capaz de entender sus acciones, aunque esto no significa que las tienes que escudar.
Ahora que has pensando en el perdón de la otra persona, considera cómo comparten una humanidad común.
“Ambos nacieron, ambos morirán, ambos sangran cuando se cortan, ambos tienen un ADN único, y cuando mueras nunca habrá otra persona como tú“ como dice Enright. “Y dada la humanidad que compartes con esa persona, ¿podría ser posible sean igual de especiales, únicos, y reemplazables que tú?“
El perdón viene desde dentro la mayoría de las veces, dice Cohen. Dado que puedas interactuar con seguridad con la persona, podrías buscar una disculpa que no recibes, o no se siente del modo que querías.
“No siempre recibimos las disculpas que esperamos; muchas personas no toman la responsabilidad de ellos mismos y de sus actos“, dice. Por eso se tiene que tratar sobre hacer el trabajo por tu parte, en lugar de esperar cierta reacción por parte de ellos.
Podrá tomar semanas o incluso meses, pero deberías empezar a sentir un cambio en tu corazón. “Cuando los sentimientos de la persona empiezan a cambiar, eso es el comienzo de la ira no saludable empezando a irse“, dice Enright. “Es un pequeño brillo de compasión“.
Una vez que empieces a sentir que te ablandas, el siguiente paso es aceptar el dolor. “No pedimos a las personas deshacerse del dolor“, dice Enright, “sino pararse junto al dolor“.
Eso significa no pasar tu dolor a otros en muchos casos. “Construye el autoestima porque estás diciendo, ‘si puedo ver la humanidad en la persona que no vio la humanidad en mí, y sí me puedo ablandar el corazón por quien no lo hizo por mí, entonces ¿quién soy como persona? Soy más fuerte de lo que pensé’.
No, no nos referimos a que les compres flores. Pero Enright aconseja hacer algo bueno por la persona que te hizo daño de una manera creativa u otra.
“Si la persona es un peligro para ti, no tienes que hacerle saber que estás haciendo esto“, dice. “Puedes donar dinero a caridad en su nombre, enviar un e-mail que no haya enviado en un año, o si tienes contacto directo, dales una sonrisa o una palabra amable”.
Hacerlo no significa que tienes que interactuar con la persona o reconciliarte, sólo que estás dispuesto a hacer algo bueno a la persona que te lastimó
Durante una “fase de descubrimiento“, encontrarás significado en lo que has sufrido. “Generalmente, las personas están más conscientes de las heridas en el mundo“, dice Enright.
“Se vuelven más pacientes con las personas que podrían estar teniendo un mal día, ven que las personas están caminando por ahí heridas todo el tiempo, y generalmente están más conscientes del dolor de otros y quieren ser un conducto para el bien“.
Y una vez que tengas esa visión del mundo, puedes prosperar en la vida de nuevo.
Si sigues interactuando con esta persona, seguramente vayan hacer algo otra vez. “Muchas personas repiten los mismos errores, y si puedes ganar una perspectiva objetiva y no tomar sus acciones personalmente, entonces sabes que los has perdonado“, dice Cohen.
Por otro lado, si no cometen estos errores de nuevo y tú tampoco vuelves a sacar sus transgresiones pasadas, esa es otra señal de que has superado el problema, añade.
“Muchas personas buscan resolver y seguir adelante de problemas de su infancia“, dice Cohen. “Esto es un proceso. No se arregla de la noche a la mañana“, menciona.
El proceso no está marcado por las palabras “Te perdono“ o “recibir una disculpa de alguien más“, añade Cohen, “El perdón viene cuando realmente puedes ver a alguien en su contexto y entender sus acciones desde su punto de vista, sin importar que tan horribles fueron sus acciones“.
Tomado de rd.com 14 Proven Steps to Truly Forgive Anyone for Anything
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