Tal vez sea solamente un ahorro por costumbre, pero recae en nosotros echar un vistazo a las cosas que podríamos haber desechado antaño. Con esto en mente, hemos recopilado algunos usos para esas pilas de botes de basura por todos lados: las cáscaras de huevo.
Mejora el jardín con ayuda de tu desayuno. Enjuaga y quita la membrana transparente interna de las cáscaras. Guárdalas secas en un recipiente grande y seguro. Prometemos que no van a apestar. Tritúralas con una cuchara de metal o madera hasta trozos finos. Entonces podrás poner más cáscaras.
Una vez que las temperaturas de primavera ablanden la tierra, puedes espolvorear y mezclar en tu jardín las cáscaras molidas que has estado guardando para una gran fuente de calcio carbonado para la tierra. Y además: reducen la acidez de la tierra. Conoce cómo revivir una planta muerta o moribunda en 10 pasos simples.
Pon una cáscara en un recipiente de vinagre de manzana y déjalo remojar por un par de días. Presiona la mezcla en irritaciones de piel menores o en piel con comezón.
Prometiste mantenerte libre de materiales en polvo y limpiadores industriales (¡adiós, Ajax!) pero no tienes idea de que usar en lugar de estos poderosos químicos. Encontramos un limpiador no tóxico y bueno para tu nariz en RealFoodRN.com.
Primero, recolecta las cáscaras de unos 12 huevos. Una vez que estés lista para preparar el limpiador, lava las cáscaras y ponlas en una bandeja para hornear. Seca las cáscaras fuera en el sol o en el horno por algunos minutos a temperatura baja.
Utiliza un mortero, triturador de café o licuadora de alta velocidad para mezclado hasta formar una pasta fina. Deberías tener al rededor de 1 taza de polvo. En un tarro, añade 3 tazas de bicarbonato de sodio al polvo de cáscaras.
Para limpiar, solo mezcla el polvo con agua. Utiliza esta fórmula en sartenes y ollas (con comida pegada), puertas de baño (con mugre), tazas de baño y baldosas.
¿Sueñas con cubrir cada centímetro de tu hogar invernal con una plantas de interior felices? Aquí tienes un paso para cumplir ese sueño. Para tu próximo brunch de fin de semana, cocina un delicioso platillo de huevo, y guarda las cáscaras.
Cuando partas cada huevo, corta la parte superior de la cáscara y vacía el huevo fuera de la cáscara para conservar la mayor parte del cascarón del huevo. Enjuaga con cuidado antes de guardar. Recuerda guardar el cartón de huevo—aquí es donde tus primeras plantas crecerán.
Una vez que las cáscaras se hayan secado, utiliza una aguja filosa o punzón para hacer un hoyo en el fondo de cada uno (para el drenaje del agua). Pon una cáscara de huevo en cada espacio del cartón. Pon semillas dentro de la tierra, según las instrucciones de plantado de cada una.
Empaña la tierra con una botella de spray y mantén el cartón bajo sol. Riega regularmente y manténte alerta de los retoños. Una vez que sea hora de transferir a una maceta o jardín, lo puedes transplantar cómo está.
Que no te engañen los aparatos que ves en las tiendas. La mejor manera de separar las claras de huevo de las yemas es usar una buena cáscara de huevo a la vieja usanza.
Parte el huevo a la mitad y vacía la clara lentamente en un recipiente. Una vez que la clara empiece a tirar de la yema, utiliza la parte dentada del cascarón para separar la clara.
Si eres un bebedor de café ávido, has experimentado este problema: una mancha café en el interior de tu recipiente de bebidas favorito. Y no importa que tan fuerte talles, no disminuye.
Aquí tienes una solución… adivinaste: cáscaras de huevo. Añade una combinación de agua tibia o caliente y cáscaras aplastadas a más o menos un tercio de su capacidad. Cierra el termo y agita bien por unos minutos. La mezcla debería ayudar a romper las manchas.
Gánate el premio al mejor padre (por la millonésima ves, ¿verdad?) e intenta estas recetas del Museo de Niño de Indianápolis. Los ingredientes principales son cáscaras, harina, y colorante alimenticio.
Podemos prometer que será divertido—pero no podemos prometer que no será sucio.
Si tu compañero de piso (o pareja) se queja de que el café está muy amargo—pero aún tienes medio kilo de café en la alacena, intenta esto.
Mezcla una cáscara de huevo desmoronada (que haya sido enjuagada a fondo en vinagre y después agua, y secada) al café molido mañana por la mañana. La cáscara, rica en carbonato de calcio alcalino ayudará a neutralizar una parte de la acidez del café.
Descubre los usos que puedes darle a los granos de café después de tomarlo.
También puedes ser un vecino increíble para tus aves locales con este gran consejo de Birds and Blooms. Cuando tengas suficientes cáscaras para cubrir una bandeja para hornear, hornéalas a 120 grados hasta que se sequen. Serán lo suficientemente frágiles para romperse fácilmente.
Esparce la mezcla en un comedero o en el suelo para que los pájaros la puedan comer—especialmente para las hembras durante la primavera, hora estelar para poner huevos.
Los huevos podrían ser el secreto para recuperar el brillo joven de tu piel. Usando un mortero, muele algunas cáscaras hasta que alcancen un estado parecido al polvo. Después, mezcla el polvo con claras de huevo. Con cuidado esparce la mezcla en tu piel y déjala secar. Lava a fondo.
La mayoría de la gente quieren que su fregadero esté reluciente—pero querrás considerar mantener algunas cáscaras sueltas ahí abajo mientras lavas.
Los trozos de cáscaras ayudarán a prevenir que los alimentos sólidos se vayan por el drenaje, y mientras el huevo empieza a romperse actúa como un abrasivo natural que ayuda a limpiar las tuberías.
Las cáscaras aplastadas son una manera excelente de añadir calcio extra a la dieta de tu perro. Intenta esto: Esparce las cáscaras limpias sobre una bandeja para hornear y hornea a 120 grados por 30 minutos.
Transfiere a una bolsa de plástico con cierre, sella y aplasta las cáscaras con un rodillo hasta que sean polvo fino. Espolvorea sobre la comida de tu perro. El aumento extra de calcio puede ayudar a fortalecer los huesos y dientes de tu mascota.
Las cáscaras hacen maravillas para las plantas de tu jardín, pero también pueden repeler pestes. Junta cáscaras aplastadas y espárcelas por tu tierra. Esto funciona como disuadir caracoles, babosas e incluso venados.
¿Qué tan divertido es esto? Si has conseguido mantener tus cáscaras parcialmente intactas, sirven para ser el recipiente perfecto para una vela casera. Simplemente derrite cera de vela en una cáscara limpia y seca y añade una mecha.
Mantén tu vela derecha al ponerla en un vaso para huevo o cuenco poco profundo llevo de arena.
Las cáscaras llenas de pintura pueden ayudar a hacer la pintura Pollockesca de tus sueños. (O, al menos, empieza una actividad divertida para ti y tus hijos.) Junta cáscaras de huevo que estén lo más intactas posibles—las sobras de tus huevos hervidos funcionará bien.
Enjuaga y seca. Con cuidado llena cada uno con pintura de colores, toma un lienzo en blanco grande y ve afuera. Invita a un amigo y túrnense para lanzar los huevos en el lienzo para crear una obra de arte completamente divertida. Créenos, ¡vas a querer poner esto en tu lista de cosas que hacer!
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