El agotamiento por calor es un peligro grave durante el verano, y conocer las señales podría salvarle la vida, o evitar que se ponga peor.
Si alguna vez te sentiste mareado en una clase de yoga o buscas sombra porque el calor dew los rayos del sol están haciendo que tu cerebro burbujee, estás familiarizado con el sobrecalentamiento.
Otro riesgo es no conocer los signos de deshidratación. Si bien es posible que clínicamente no sufras de agotamiento por calor, esas son señales de advertencia.
“Sobrecalentarse simplemente significa que tu cuerpo no puede enfriarse por sí mismo o volver a su temperatura óptima normal, que generalmente es de alrededor de 37 grados Celsius para la mayoría de las personas”, explica Roger E. Adams, doctor en nutrición y propietario de EatRightFitness.
“Un estado de sobrecalentamiento generalmente es causado por la exposición al calor extremo durante un período prolongado. Cuando la temperatura de yu cuerpo aumenta, aumenta el flujo de sangre a la superficie del cuerpo. Además, la tasa de sudoración y la frecuencia respiratoria aumentan para refrescar el cuerpo. Todo esto crea una carga de trabajo adicional en el corazón, lo que aumenta su frecuencia cardíaca”.
El sobrecalentamiento es riesgoso porque es el preludio de otros problemas inducidos por el sol. Adams explica que cuando estás sobrecalentado, sudas más, lo que provoca que te deshidrates rápidamente, ya que tu cuerpo pierde grandes cantidades de agua a través de los poros en un esfuerzo por regularse.
“La deshidratación ejerce aún más presión sobre el corazón, y dado que el corazón ya está trabajando duro para empujar el flujo de sangre hacia la piel, esto puede conducir a una situación peligrosa para su corazón”, dice.
“Un estado de sobrecalentamiento pone en riesgo los tejidos más vulnerables y delicados del cuerpo: las células nerviosas del cerebro y de todo el cuerpo. Esto puede provocar confusión, deterioro de la memoria e incluso pérdida del conocimiento”.
Todo el mundo suda a un ritmo diferente, pero presta atención a tus patrones particulares. De hecho, la forma en que sudas puede decir mucho sobre tu salud. Pero debes tener cuidado si comienzas a notar un cambio en la cantidad de sudor que gotea.
“Al principio, el cuerpo intentará refrescarse sudando más”, dice Tania Dempsey, doctora de Armonk Integrative Medicine. “Pero a medida que uno se deshidrata más, la sudoración puede detenerse y esto es muy peligroso. Sin sudor, el cuerpo pierde su capacidad de refrescarse y la temperatura interna comienza a aumentar, lo que provoca un golpe de calor”.
Si no estás sudando en absoluto, la Dra. Dempsey dice que te enfríes lo más que puedas, quitándote la ropa, bebiendo agua y aplicando bolsas de hielo o tomando un baño frío si es necesario.
Una de las primeras pistas de que te estás sobrecalentando son los cambios mentales, dice Adams. “A medida que se calientan los delicados tejidos nerviosos del cerebro, se producen dolores de cabeza, confusión, letargo mental y mareos. Además, los tejidos nerviosos del cuerpo pueden comenzar a funcionar de manera errática, lo que provoca un movimiento deficiente o una incapacidad total para moverse”, explica.
Incluso puedes comenzar a sentir náuseas. Si se presentan sentimientos extraños o dolor de cabeza, toma un descanso a la sombra o dirígete al interior y bebe mucha agua para ayudar a controlar tu temperatura.
No solo los humanos pueden sobrecalentarse. Si tienes un perro, asegúrate de conocer estas señales de advertencia de un golpe de calor.
Un sarpullido por calor es un enrojecimiento no deseado e inusual que podría indicarle a tu cuerpo que necesitas un descanso.
“Las erupciones por calor ocurren cuando los conductos de sudor se bloquean, a menudo con ropa pesada, y el sudor queda atrapado debajo de la piel, lo que provoca que se inflame y se hinche con bultos rojos, también conocido como ‘calor espinoso’”, dice la Dra. Dempsey.
“Vístete con ropa holgada y liviana durante el clima cálido y húmedo y quédate en la sombra fresca para evitar que esto suceda”.
Perseguir un frisbee, jugar al fútbol o simplemente caminar por la playa: si tu pantorrilla se bloquea o tus cuádriceps tienen calambres, una advertencia: la Dra. Dempsey dice que algunos de los primeros signos de agotamiento por calor ocurren en nuestros grandes grupos musculares, a menudo sintiéndose como un espasmo o un calambre doloroso.
“Esto suele ocurrir en personas que son activas en clima cálido y húmedo y que están deshidratadas y/o tienen deficiencia de electrolitos”, dice ella. Para superar esto, deberás enfriarte, sentarte y estirarte suavemente hasta que desaparezca el hormigueo. También puedes comer para vencer los calambres.
Especialmente en vacaciones, puedes terminar duplicando tu tiempo bajo los rayos calientes. Incluso los fines de semana en la casa, como señala Adams, el buen tiempo hace que las personas quieran correr más, nadar por más tiempo o incluso lanzar una pelota durante horas, lo que los pone en mayor riesgo de sobrecalentamiento.
“Hacer ejercicio o realizar varias actividades físicas en el calor del día puede provocar elevaciones en la temperatura corporal; especialmente si el individuo no está bien hidratado, para empezar”, señala.
“Mis atletas que entrenan y juegan en el verano se pesan antes de una práctica o juego e inmediatamente después. Por cada libra que pierden, deben consumir dos tazas de agua lo antes posible”.
“El consumo de alcohol puede acelerar un estado de deshidratación, y esto conduce a un rápido aumento de la temperatura corporal cuando se está al aire libre, especialmente en las carnes asadas y en los conciertos de verano”, advierte Adams.
Señala que muchos de sus pacientes están crónicamente deshidratados porque no duplican su consumo de agua para compensar sudar más y beber, lo que también hace que te seques.
Una buena regla general es alternar un vaso de agua con cada vino o cerveza que tengas.
Si bien envejecer tiene ventajas (más ingresos, sabiduría y satisfacción), tu salud y tus hábitos se vuelven más complicados con cada nueva vela en el pastel de cumpleaños.
Según la Dra. Dempsey, las personas mayores corren un mayor riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el calor, como el sobrecalentamiento, porque el cuerpo que envejece tiene más dificultades para regular la temperatura interna.
Esto ayuda a explicar por qué las visitas a la casa de los abuelos pueden ser como entrar en un congelador o en un alto horno. Es especialmente importante que las personas mayores de 55 años beban muchos líquidos y limiten el tiempo en el calor.
La cantidad de tiempo que puede pasar en el calor puede cambiar drásticamente según el medicamento recetado, dice la Dra. Dempsey. “Las personas que toman ciertos medicamentos, especialmente los diuréticos que pueden deshidratar, son más susceptibles a los problemas de calor”. (Y tomar ciertos antibióticos te hace más susceptible a las quemaduras solares).
Si te estás cansando más rápido que tus amigos, habla con un médico, quien puede ofrecerte una solución alternativa para que dejes de tomar medicamentos durante la estación más cálida del año.
Tomado de rd.com 4 Dangerous Signs That Your Body Is Overheating—and 4 Ways You’re Making It Worse
¿Lo Sabías?
