Según datos de la Organización Mundial de la Salud, 422 millones de adultos padecen diabetes en el mundo, es decir una de cada 11 personas.
Esta cifra también representa un incremento en las muertes prematuras y en el riesgo de padecer complicaciones derivadas como amputación de extremidades, insuficiencia renal, ataques cardiacos y hasta accidentes cerebrovasculares.
Si bien existen diferentes factores que favorecen el desarrollo de esta enfermedad crónico degenerativa, lo cierto es que hoy tenemos a la tecnología de nuestro lado para evitar que los pacientes tengan cualquier dificultad médica a largo plazo y que puedan realizar sus actividades diarias sin ningún problema.
En este sentido, la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID) presenta algunos de los dispositivos médicos que pueden ser un apoyo para llevar un mayor control del padecimiento y detectar alteraciones en el organismo que pueden ser tratadas a tiempo:
Glucómetro: Un paciente con diabetes debe obtener sus niveles de glucosa en sangre de manera muy regular para saber si existe algún cambio que requiera atención médica o nutricional. A través de una gota de sangre obtenida con una lanceta intercambiable, el glucómetro proporciona datos que resultan útiles para el tratamiento médico personalizado, por lo que es recomendable que el paciente lleve su propio control de glucosa.
Glucómetro.
Pluma de insulina: Según las necesidades, en infinidad de ocasiones es necesario que el paciente requiera de la administración de insulina en su organismo. La pluma es un dispositivo que inyecta esta hormona de manera rápida y con la medida precisa que requiere la persona. En el mercado existen versiones reutilizables y otras desechables que se adaptan a casi cualquier presupuesto.
Bomba de insulina: Se trata de un dispositivo novedoso que con la ayuda de una micro aguja y un infusor automatizado libera el compuesto químico de manera paulatina durante el día. Resulta una alternativa más cómoda para quienes requieren más de tres aplicaciones diarias y como se trata de un equipo portátil su uso no interfiere con los hábitos.
Baumanómetro: El control de la presión arterial también es clave para el tratamiento de las personas que viven con diabetes. Al igual que el glucómetro, el baumanómetro es otra de las herramientas que facilita el diagnóstico oportuno desde casa y que ayuda mucho a complementar el historial clínico. Por esto es importante tener un control de las tomas de presión y asegurarse de que fueron tomadas debidamente.
Monitor de frecuencia cardiaca: De manera frecuente se le solicita al paciente que adquiera hábitos alimenticios adecuados y que incluya actividad física en su día a día. El monitor de frecuencia cardiaca o pulsómetro es un dispositivo que le permite saber al usuario el número de latidos en tiempo real que genera su corazón durante el ejercicio. Esto aumentará la calidad de vida de la persona y disminuirá sus malestares generales.
Cabe señalar que existen diferentes tipos de diabetes, siendo las principales la tipo 1 (en la que el cuerpo no produce suficiente insulina) y la tipo dos (en la que el cuerpo si produce insulina, pero no la utiliza apropiadamente). Recuerda consultar periódicamente a tu médico para que pueda indicar los dispositivos que más se adapten a tus necesidades.
