Para limpiar a fondo las manos llenas de grasa, mugre o pintura de una manera fácil, vierte cantidades iguales de aceite de oliva y azúcar en la palma ahuecada de una mano, y luego frota suavemente ambas manos durante varios minutos. Enjuaga perfectamente y seca.
La arenilla del azúcar actúa como un abrasivo que ayuda al aceite a eliminar la grasa, pintura y mugre. Tus manos lucirán y se sentirán limpias, suaves y humectadas.
Mantén la cocina libre de moscas con una trampa casera sin sustancias químicas tóxicas.
En una olla pequeña, pon a hervir 2 tazas de leche, 115 gramos de azúcar y 60 gramos de pimienta durante unos 10 minutos, moviendo de vez en cuando.
Vierte en platos poco profundos o tazones y colócalos alrededor de la cocina, patio o cualquier lugar donde las moscas sean un problema. ¡Los insectos acudirán en gran número a los tazones y se ahogarán!
Si detestas los insecticidas apestosos y nocivos tanto como a las cucarachas, no llames a un exterminador.
En vez de eso, cuando tengas una invasión de cucarachas esparce una mezcla de partes iguales de azúcar y bórax en polvo en las zonas afectadas.
El azúcar atraerá a las cucarachas y el bórax las matará. Reemplázala frecuentemente con una mezcla nueva para evitar futuras invasiones.
Precaución: Mantén la mezcla lejos de mascotas y niños pequeños, pues es venenosa si se ingiere.
Haz tu propio conservador para mantener las flores cortadas frescas por más tiempo. Disuelve 3 cucharadas de azúcar y 2 cucharadas de vinagre blanco en 1 litro de agua caliente.
Al llenar el florero, cerciórate de que los tallos estén cubiertos entre 7 y 10 cm con el agua preparada.
El azúcar nutre a las plantas y el vinagre inhibe el crecimiento de bacterias. ¡Te sorprenderá el tiempo que dura fresco un arreglo de flores!
Si tus plantas de exterior lucen enfermas, con nudos desagradables en las raíces, ¡lo más probable es que sean víctimas de un ataque de nematodos!
Los gusanos nematodos, némesis de los jardines saludables, son unos parásitos microscópicos que agujerean las raíces de las plantas y provocan nudos.
Evita los ataques de nematodos usando el azúcar para crear un ambiente inhóspito para los diminutos gusanos.
Aplica 2 kilos de azúcar por cada 25 metros cuadrados de jardín. Los microorganismos que se alimenten del azúcar aumentarán la materia orgánica de la tierra, y así eliminarán los desagradables nematodos.
Tomado de Usos extraordinarios para cosas ordinarias, Reader’s Digest EUA
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