Olvida todos los consejos de relaciones que has aprendido de las comedias románticas sobre encontrar a la mujer o al hombre correcto. Cuando se trata de tener una relación exitosa, la persona que eliges para salir podría no ser tan importante como la relación que eliges hacer, según un estudio publicado en agosto en PNAS.
Existen miles de estudios observando las relaciones pero este es único, tanto en cómo fue conducido y en lo que descubrieron. Más de 85 investigadores, guiados por Samantha Joel, PhD, de la Western University en Londres, Canada, utilizaron aprendizaje mecánico para buscar en la información de 43 estudios separados de más de 11,000 parejas de Canadá, los Estados Unidos, países bajos, nueva Zelanda, Israel, y Suiza.
A diferencia de los humanos, la red de la computadora fue capaz de observar millones de puntos de información y encontrar qué factores realmente predecían una relación fructífera. Y lo que encontraron te podría sorprender.
Cuando piensas en todos los factores que hacen una relación romántica feliz, seguramente tengas una lista de cosas que importan—y otras que no.
Pero muchos de esos factores obvios—como la educación, el salario, niveles de estrés, ansiedad, creencias de relación, extroversión/introversión, étnica, autocontrol, y valores de vida—resultaron tener muy poco que ver con una relación exitosa, según el estudio.
Efectivamente, algo tan importante como los valores de vida resultaron tener una conexión muy débil con el ser capaz de formar y sostener una buena relación.
Ok, así que a veces esas cosas no importan por sí solas pero ¿tal vez la clave es encontrar a alguien que combina contigo en esas características?
¿O es que los opuestos se atraen? De nuevo, la respuesta no es el tipo usual romántico. Los investigadores no encontraron evidencia en la información para eso que dice “Dios los cría y ellos se juntan” o “los opuestos se atraen”.
Así que, ¿qué entró en la lista y por qué? El estudio vio cuáles factores estaban correlacionados con relaciones felices y tomados juntos fueron responsables de casi la mitad de si la relaciones eran exitosas o no, (el éxito se definía en como una persona calificaba su propia felicidad en la relación).
Los pensamientos de una persona en cuanto a la relación, incluyendo que tan satisfechos y comprometidos pensaban que estaba su pareja y que tanto la apreciaban, fue responsable de cerca del 45% de su satisfacción actual con la relación.
Aquí, rompemos los cinco factores principales ligados a la satisfacción de una relación con la ayuda de Gary Brown, un psicólogo clínico, que no estuvo involucrado en el estudio, Brown es el fundador y líder del Equipo de Respuesta a Incidentes Críticos en el Centro Médico Cedars-Sinai Medical en Los Angeles.
“Esto se trata de estar seguro de que tu pareja está ahí contigo a la larga”, dice Brown, quién también es un terapeuta de pareja con más de 30 años de experiencia y nombrado el mejor consejero de matrimonio por los premios de Los Ángeles en el 2015.
Esto es seguramente calificado como lo más importante en la lista porque no tiene sentido seguir adelante con nada más hasta que hayas establecido que ambos están comprometidos para hacerlo funcionar. No puedes mejorar una relación si no estás seguro de qué tu pareja siquiera quiere estar en la relación, explica.
“No asumas que tu pareja sabe cómo te sientes al respecto, haz un esfuerzo intencional para decirle y mostrarle que le amas y que valoras tu relación como una pareja”, dice.
“Las personas tienen una necesidad básica de sentirse valorados y saber que importan, y es normal buscar esto de tu pareja”, dice Brown. Demasiadas parejas quedan atrapadas en sentir que “no deberías” mostrar gratitud a tu pareja pero no existe tal cosa como demasiada apreciación, especialmente cuando se trata de aquellos más cercanos a ti, dice.
No tomes a tu pareja por sentado. Aprende el lenguaje de amor de tu pareja y entonces encuentra maneras de mostrarles aprecio que signifique algo para él o ella, dice. Por ejemplo, alguien que muestra amor a través de regalos podría sentirse apreciado con un ramo de flores “sólo porque sí”.
El por qué esto es un factor importante en una relación no es un misterio y aún así muchas personas no hacen que el sexo de buena calidad sea una prioridad, dice Brown.
“El sexo juega un papel de muchas capas en una relación, expresando lujuria, vinculación, conexión emocional, cercanía, y vulnerabilidad”, explica.
Una vida sexual satisfactoria se trata sobre calidad y cantidad, dice. Así que una gran sesión a la semana podría ser mejor que uno rápido todos los días, pero claro que depende en que estén buscando las parejas para su vida sexual.
“Olvida lo que has escuchado que es ‘normal’ y trabájalo con tu pareja para crear tu propia ‘normalidad,’” dice. “Entonces conviértelo en una prioridad en tu vida”.
Las mejores relaciones son en las que cada persona se preocupa por la felicidad del otro más que la suya propia, dice Brown. Esto no se significa convertirse en un mártir y hacer feliz a tu pareja a pesar de tus propias necesidades, sino no tener una actitud egoísta en la relación.
“Pregúntate a ti mismo todos los días, ‘¿qué es algo que puedo hacer hoy para hacer la vida de mi pareja más fácil?’ y luego hazlo”, dice. “Haz que fluya la conversación y pregúntales regularmente para ver si son realmente felices y darles el permiso de ser honestos y auténticos si no lo son”.
La mayoría de las personas pelean de vez en cuando así que las relaciones exitosas no son sobre evitar el conflicto sino desarrollar maneras saludables para resolverlo, dice Brown.
“La meta de la resolución del conflicto debería ser siempre ganar entendimiento, no ‘ganar’”, explica. Pelear sólo por pelear o para probar que estás en lo correcto o para humillar a tu pareja es tóxico y envenenará tu relación más rápido que cualquier otra cosa, añade.
Cada pareja necesita encontrar un estilo saludable de resolución de conflicto que funciona mejor para ellos. Si no estás seguro en cómo “discutir justamente”, trata de leer libros sobre el tema, hablando a personas cuya relación admires, o agenda algunas sesiones con un consejero de relación, dice.
Similarmente, ser la persona correcta importa mucho más que encontrar a la persona correcta. ¿Por qué? “Ultimadamente tú eres la única persona que puedes controlar”, dice Brown.
Pero con tantas cosas distintas en las cuales centrarte, ¿cuáles rasgos de personalidad son los más cruciales para crear una buena relación? El estudio tiene respuestas para eso también.
Los investigadores encontraron que de todas las características individuales estudiadas, las que tenían mayor efecto en relaciones eran la satisfacción de vida, un rasgo personal conocido por afectar negativamente (negatividad corrosiva), depresión, y tener un apego saludable a tu pareja.
Se piensa que hay tres estilos de apego principales en las relaciones, y que las personas con estilos habitantes o ansiosos tienen relaciones menos estables que las personas con un estilo de apego seguro.
Tomado todo junto, estos factores fueron responsables de cerca del 20% del éxito de las relaciones. Nota que ninguno de estos involucra perder 10 kilos o ganar seis dígitos. Trabajar en estos aspectos importantes de ti mismo crea las condiciones ideales para que una relación florezca y crezca, explica.
Las relaciones infelices pueden tener un impacto enorme en tu salud y felicidad, y están ligadas con salud física pobre, nivel sanguíneo más alto, sistema inmunológico más débil, y un riesgo mayor de mortalidad temprana, y problemas de salud mental, notaron los investigadores.
Además, las relaciones malas tienden a sangrar en otros aspectos de tu vida, hiriendo tu carrera, amigos, y niños. Por otra parte, las relaciones felices pueden llevar a resultados mejores en casi todas las áreas de tu vida. “Estamos hechos para la conexión social y la vinculación en par, como seres humanos, lo necesitamos”, dice Brown.
Los descubrimientos de este estudio son un mensaje realmente esperanzador porque muestra que tienes mucho control sobre la satisfacción de tu relación, dice. “La idea de que la serenidad llega cuando encuentras a tu alma gemela, o que simplemente lo sabrás y que las cosas funcionaran mágicamente, es basura”, dice.
”El mito de relación más peligroso es que una buena relación no debería llevar trabajo, que simplemente pasará”. “Cualquier idiota se puede enamorar, pero eso es la parte fácil”, dice. “Construir, sostener, y crecer ese amor, eso lleva intención y trabajo duro. El verdadero mensaje aquí es que tener una visión compartida por la cual está dispuesto a trabajar como equipo puede sobrellevar casi cualquier obstáculo personal o en la relación”.
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