5 formas de convertirte en una persona madrugadora
Nos guste o no este es un mundo madrugador y todos debemos adaptarnos. Y aquí están las instrucciones de cómo puedes hacerlo.
Muchos de nosotros soñamos con tener trabajos en los cuales decidir exactamente a qué hora empezamos y terminamos nuestras labores. Pero a menos que seas tu propio jefe, probablemente no tienes ese poder ni lo tendrás en un futuro cercano. La mayoría de las compañías, escuelas y oficinas de gobierno en América, continúan bajo el tradicional modelo de 9 a 5, agregando o quitando algunas horas. Así que es de tu mayor interés averiguar cómo convertirte en un madrugador.
Y aunque estés preocupado de simplemente ser incapaz de convertirte en un ave de la mañana, no es verdad. Científicos que estudian gemelos idénticos han encontrado que el 50% de ser una persona madrugadora está determinado por la genética, lo que significa que un mismo porcentaje está bajo tu control.
Hasta hace un año, yo mismo era un Negado a despertar con N mayúscula. Después de probar todos los tips y consejos que pude encontrar sobre los madrugadores, esto es lo que me ha ayudado a dejar la cama del lado positivo cada mañana.
Comúnmente, la razón número uno que detiene a una persona de convertirse en un madrugador es que están demasiado cansados para levantarse temprano. De acuerdo con la más reciente encuesta de dormitorio de la Fundación Nacional del Sueño (Nartional Sleep Foundation), 56% de las personas entre 25 y 55 años no duermen lo suficiente durante la semana. Así que, crea un ambiente adecuado para lograrlo.
Mantén tu recámara silenciosa, oscura y fresca; declara prohibido cualquier aparato electrónico -televisión, celulares, computadoras y Kindles-, al menos una hora antes de que apagues las luces. Y finalmente, metete a la cama a una hora razonable. Si aspiras despertar a las 6:30 de la mañana, tu cabeza debe tocar la almohada a las 11 p.m.
Una razón por la que ya no uso la alarma de mi celular para despertar, es que lo dejaba a un lado de mi en la cama donde la vibración y el tintineo interrumpían mi sueño, haciéndome sentir cansada y, por lo tanto, se me complicaba mucho más dejar la cama.
El otro problema: en mi IPhone, es demasiado sencillo apretar posponer. Incluso si dejaba mi celular del otro lado de la habitación, sólo me toma unos segundos llegar, tocar la pantalla, y regresar a la cama. Ahora uso un radio-reloj sintonizado en la estación de noticias. Cargo mi celular en otra recámara para que no me despierten sus sonidos y sacudidas. Fue también esencial para mi quitar la opción de posponer.
Doctores del sueño dicen que apretar posponer es equivalente a golpearte tu mismo la cabeza con un martillo. Cuando la alarma vuelve a sonar 8 o 10 minutos después, tu estás empezando un nuevo ciclo de sueño, y esa es la peor forma de despertar. Estás en lo que los científicos llaman “inercia del sueño,” un estado de mareo severo que puede tomarte varias horas sacudir.
¿Verdaderamente no lo puedes resistir? Necesitas inhabilitar el botón de posponer en tu reloj-despertador con algunas gotas de pegamento.
Tienes que ser realista en cambiar el switch para ser madrugador. Si te despiertas a las 8:30 de la mañana, y ya presionaste posponer tres veces antes de siquiera sentarte, no esperes transformarte de la noche a la mañana en un madrugador de las 6:30 a.m. Incluso si te obligas a hacer esto por un tiempo, el cambio no va a durar mucho.
En vez de eso, adelanta tu hora de alarma de 15 a 20 minutos, y velo incrementando sin apresurarte. Si despiertas a las 8:30 a.m., intenta 8:15 a.m. por una semana, ya las 8 a.m. para la siguiente, y así poco a poco.
Parte de lo que hace tortuosas las mañanas es tener que completar esas actividades obligatorias que no son divertidas de hacer ya sea periódicamente, o bajo presión del tiempo. Aunque es extraño, aprender cómo ser un madrugador depende también de convertirse en un productivo búho nocturno.
Yo disfruto eligiendo la ropa que voy a usar e intento con diferentes opciones, pero me estresa averiguarlo rápidamente en la mañana. Lo mismo va con guardar mi comida. Cuando comencé a hacer todo esto la noche antes, significó no más carreras antes del trabajo, y comencé a disfrutar mis mañanas.
Recaer es inevitable, así que no seas duro contigo mismo en esos días cuando cedes a tu cálida y acogedora cama. Mientras cada experto del sueño insiste en la importancia de mantener las mismas horas, incluyendo los fines de semana, para lograr marcar el cambio, yo me permito dormir hasta tarde los sábados y domingos – ¡algunas veces hasta cuatro o cinco horas más tarde! – y aun así soy capaz de levantarme temprano los lunes.
Experimenta con estos consejos para encontrar cuales funcionan para ti.
Tomado de rd.com 9 Almost Effortless Ways to Become a Morning Person