Los robots se están apoderando del mundo. Claro, ya has oído eso antes. Incluso hay un episodio de Twilight Zone que nos advirtió al respecto hace 60 años. Pero ahora se está volviendo real. Un androide publicó recientemente una novela. En Café X, en San Francisco, los baristas robóticos preparan y sirven café, y otra cadena de restaurantes de California, Caliburger, está probando un robot que puede voltear 2000 hamburguesas al día.
¿Qué humano puede competir con eso? Especialmente cuando consideras que los androides no se quejan, piden aumentos de sueldo o cocinan pescado en el microondas en la sala de descanso.
Pero antes de que entreguemos las llaves de la sociedad a nuestros señores autómatas, reconozcamos que hay otro lado de los robots, uno que es demasiado humano. Echemos un vistazo a una lista, de ningún modo, completa, de los intentos fallidos de la inteligencia artificial de reemplazarnos en carne y hueso.
Janelle Shane, científica investigadora en óptica, quería saber si la inteligencia artificial podía crear un menú que no supiera, bueno, artificial. Entonces, alimentó una computadora con 30,000 recetas de libros de cocina y luego la programó para crear sus propias recetas.
¿El resultado? Digamos que McDonald’s no tiene nada de qué preocuparse. Una receta que creó la computadora fue algo llamado “Beothurtreed Tuna Pie”. ¿Quieres hacerlo? Necesitarás los siguientes ingredientes:
Por supuesto, así es como la abuela de todos cocinaba el pastel de atún Beothurtreed. La otra especialidad de la computadora es el “Tart Cover Shrimp Butter Wol”, que requiere algo que todos tenemos sentado en nuestra despensa: “1 lata de fruta pálida frita para cubrir el desagüe”.
Por el desagüe es probablemente donde terminará la comida después de un bocado. También lo hará otro plato, que requería “1 taza de arroz blanco rallado”. Hay mucho más de donde vino esto, pero entiendes la idea.
Rechaza cualquier invitación para cenar que esta computadora pueda enviarte.
Hace unos años, el hotel Henn-Na en Nagasaki, Japón, contrató a 243 robots para cubrir tareas que iban desde conserjería hasta botones. Pero no mucho después de que comenzara el experimento, terminó con los gerentes “despidiendo” a la mitad de los robots porque seguían funcionando mal.
Los robots de registro tuvieron problemas para responder las preguntas de los huéspedes y fotocopiar los pasaportes, mientras que los botones seguían golpeando las paredes y tropezando con las aceras. Si un invitado quería dormir hasta tarde, muy mal.
Un asistente en la habitación despertaba a un huésped cada vez que roncaba y decía: “Lo siento, no pude entender eso. ¿Podría repetir su petición?”. ¿Ventaja o desventaja que la inteligencia artificial esté frente a un volante?
Todos hemos oído hablar de incidentes divertidos en los que los niños han usado su amigable Amazon Echo o Google Home para ordenar lo que su corazón deseaba. Otro incidente común y corriente ocurrió en Dallas, cuando un niño de seis años ordenó una casa de muñecas (¡y dos kilos de galletas, como refrigerio!).
Lo que no fue común y corriente fue lo que sucedió unos días después cuando las noticias locales informaron del caprichoso momento.
Cuando el presentador de noticias dijo: “Me encanta que la niña diga: ‘Alexa me pidió una casa de muñecas'”, muchos espectadores (y propietarios de Echo) descubrieron que sus propios dispositivos Echo se habían puesto a pedir casas de muñecas para ellos.
Los medios de comunicación están recurriendo a la inteligencia artificial para crear contenido, incluidos informes meteorológicos y de ganancias trimestrales, así como resúmenes deportivos, cualquier cosa basada en datos que no requiera el toque de un ser humano.
Pero eso no significa que los resultados serán mejores. En 2017, Los Angeles Times publicó una historia sobre un terremoto de 6.8 que sacudió a Santa Bárbara, California. Es de esperar que un terremoto tan grande haya recibido mucha cobertura de prensa. Y lo hizo… en 1925, cuando ocurrió el terremoto.
Resulta que el informe fue producido por un programa de computadora llamado Quakebot, que genera artículos basados en avisos del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS). Cuando un miembro del personal del USGS estaba actualizando los datos históricos, el QuakeBot se confundió un poco.
El reconocimiento facial también puede resultar confuso. Hace dos años, el software de reconocimiento facial de Amazon comparó a 28 miembros del Congreso con fotografías policiales de delincuentes. Ups.
El equipo de fútbol escocés Inverness Caledonian Thistle FC pasó por alto el reconocimiento facial en favor del reconocimiento de balones al reemplazar a sus operadores de cámara humanos con cámaras de seguimiento de balones operadas por IA. Ahora, las cámaras siempre seguirían la acción siguiendo automáticamente la pelota.
Suena genial, excepto que los fanáticos que miraban en casa se perdieron la mayoría de las jugadas de anotación ya que la IA que operaba las cámaras confundían constantemente la cabeza calva del árbitro con el balón de fútbol.
Decenas de espectadores llamaron al equipo para quejarse, uno llegó a sugerir que le proporcionaran al árbitro un peluquín.
Una noche en Hamburgo, Alemania, Amazon Alexa tomó el entretenimiento de la noche en sus propias manos. Aproximadamente a la 1:50 a. m., esta Alexa en particular comenzó a reproducir música a un volumen tan alto que los vecinos se vieron obligados a llamar a la policía.
Llegó la policía y tocaron, pero, por supuesto, no había nadie para abrir la puerta. Entraron y desconectaron el dispositivo. Como regalo de despedida, dejaron una nueva cerradura en la puerta, para que el dueño de la casa la descubriera cuando regresara.
Se vio obligado a dirigirse a la estación de policía para recoger la nueva llave y pagar la considerable factura del cerrajero. Él y su Alexa se han separado desde entonces, después de este “cambio de sentido” en su relación.
¿Qué es lo peor que puede hacer una aspiradora robótica? Deja que Jesse Newton cuente las formas por ti. Newton recurrió a la Web para compartir que su nuevo cachorro había hecho caca en el suelo a la 1:30 de la mañana mientras él y su esposa dormían.
¿Cómo supo la hora exacta? “Nuestro Roomba funciona a la 1:30 a. m. todas las noches”, escribió. “Y encontró la caca. Y así comenzó la cacastrofe. El apocalipsis”.
La aspiradora robot distribuyó la popó del cachorro por toda la casa, decorando las tablas del piso, las patas de los muebles y las alfombras, “lo que resultó en una casa que se parece mucho a una pintura de caca de Jackson Pollock”.
Está bastante claro que los robots no son perfectos. Aún así, no van a ninguna parte. Después de todo, están aquí para servirnos, ¿verdad? Tomemos como ejemplo a Sophia, un robot humanoide social desarrollado por Hanson Robotics.
Tiene el rostro de una mujer atractiva y la capacidad de mantener una conversación, al igual que Siri de Apple, lo que la hace inquietantemente humana.
Cuando el CEO David Hanson y Sophia aparecieron en The Pulse de CNBC, él mismo le preguntó a la IA qué estaba claramente en la mente de muchas personas en ese estudio: “Sophia, ¿quieres destruir a los humanos?” Sin dudarlo, Sophia, con una sonrisa demasiado amplia para nuestro gusto, respondió: “Está bien, destruiré a los humanos”.
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