¿Lo Sabías?
9 cosas que puedes conocer de un análisis de sangre
Te sorprenderás de todas las condiciones médicas que un doctor puede diagnosticar a partir de una muestra de tu sangre en un análisis.
Te sorprenderás de todas las condiciones médicas que un doctor puede diagnosticar a partir de una muestra de tu sangre en un análisis.
En el análisis de sangre promedio, se extraen de 3 a 10 mililitros (1 a 3 cucharaditas) de sangre del cuerpo a través de una aguja. Eso no es mucho, pero los médicos pueden aprender demasiado de esa pequeña cantidad. Un conteo sanguíneo completo (CBC, por sus siglas en inglés), comúnmente ordenado en un chequeo anual, mide tus glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
Ayuda a evaluar tu salud general y también puede detectar una amplia gama de problemas, desde anemia hasta leucemia. Tu médico también puede verificar más específicamente ciertos virus, hormonas u otras sustancias; los siguientes son algunos de los resultados que quizás no conozcas.
Una prueba de orina puede detectar la hormona del embarazo (hCG) uno o dos días después de que debería haber comenzado su período. “Pero un análisis de sangre puede detectar hCG a un nivel mucho más bajo que un análisis de orina, por lo que lo sabrás unos días antes”, dice Deborah Nunziato-Ghobashy, médica de medicina familiar en Scarsdale Medical Group.
“Hay ciertas cosas que se pueden notar a partir del análisis de sangre de la madre”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy.
“Puede saber la edad de los óvulos de la madre, por ejemplo, lo que te indica si puedes ser un poco más difícil quedar embarazada en ese momento”. No te pierdas estos 9 secretos que tu tipo de sangre revela sobre ti.
Tu fecha de nacimiento indica tu edad cronológica, pero varios factores genéticos y de estilo de vida pueden disminuir o aumentar tu edad biológica: qué edad parece tener tu cuerpo en comparación con otras personas de tu edad.
Una persona de 60 años muy saludable que come una dieta nutritiva, hace ejercicio y no fuma podría tener la edad biológica de una persona de 50 años. “La forma en que aparecen tus células se puede verificar mediante análisis de sangre”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy.
“Y si pareces mayor de lo que realmente eres, es posible que puedas modificarlo a través de tu estilo de vida”.
Un análisis de sangre por sí solo no puede diagnosticar problemas de salud mental, pero en combinación con una evaluación clínica, puede ofrecer pistas.
“Hay neurotransmisores específicos del estado de ánimo, como la serotonina, que se pueden controlar en la sangre”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy. (La serotonina se encuentra en las plaquetas de la sangre y en el tracto digestivo). Las personas con niveles bajos pueden sufrir depresión o ansiedad.
Que una persona padezca la enfermedad de Alzheimer u otra forma de demencia puede depender de numerosos factores de riesgo, pero un análisis de sangre puede revelar la presencia de ciertas sustancias químicas que aumentan el riesgo de una persona. En concreto, una proteína denominada beta amiloide puede detectarse hasta 20 años antes de la aparición de la demencia.
Una prueba positiva no siempre significa que tendrás demencia, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy. “Simplemente significa que estás predispuesto”.
Los médicos pueden usar un examen neurológico, imágenes cerebrales y una observación cercana para determinar si alguien ha sufrido una conmoción cerebral, según la Clínica Mayo. Pero un análisis de sangre puede ayudar.
“Puede mostrar una elevación de los electrolitos séricos, lo que puede ser un indicador”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy.
Después de un entrenamiento agotador, los músculos liberan creatinina, un producto de desecho que los riñones filtran de la sangre. Si los niveles de creatinina aumentan (más de 1.2 para las mujeres y más de 1.4 para los hombres), puede indicar un problema con los riñones, según la Fundación Nacional del Riñón.
Lo mismo ocurre con un nivel elevado de nitrógeno ureico en sangre (BUN) y una tasa de filtración glomerular (GFR) que es demasiado baja. Los tres se pueden medir en un análisis de sangre, que también puede indicarte si la causa es externa (como de deshidratación) o interna (como un cálculo renal).
El análisis de sangre A1C le da al médico una idea de tus niveles promedio diarios de azúcar en la sangre y puede ayudar a diagnosticar diabetes: un nivel entre 4 y 5.6 es normal, 5.7-6.4 indica prediabetes (o un alto riesgo de desarrollar diabetes) y un nivel de 6.5 o superior indica diabetes en toda regla.
Pero lo que es menos conocido es que la misma prueba también puede ser útil una vez que se diagnostica la enfermedad. “Mide el promedio de azúcar en la sangre durante los tres meses anteriores”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy.
“Es un número más confiable que una lectura de azúcar en la sangre en un día determinado, por lo que puedo decir qué tan bien está funcionando tu tratamiento”.
Es importante saber si tienes una deficiencia de vitaminas. Pero una sobredosis de vitaminas, que también se puede detectar con un análisis de sangre, igualmente puede ser peligrosa. “La mayoría de las vitaminas son solubles en agua, lo que significa que pasarán a través de tu sistema si toma demasiadas”, dice la Dra. Nunziato-Ghobashy.
“Pero las vitaminas A, D, E y K son solubles en grasa, por lo que se quedan en tu sistema y puedes sufrir una sobredosis”. Esta condición se llama hipervitaminosis y puede crear problemas que van desde náuseas hasta daño hepático. A continuación, no te pierda estas señales de que tu cuerpo podría estar en problemas.
Tomado de rd.com 9 Things You Didn’t Know You Could Learn from a Single Blood Test
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