El cáncer es una enfermedad que, lamentablemente, afecta a casi todas las familias de alguna manera. Ya sea que conozcas a alguien que ha recibido tratamiento o estés cuidando a un ser querido en este momento, su impacto es innegable. Si bien no todos los cánceres se pueden prevenir, existen acciones concretas que puedes tomar para reducir significativamente tu riesgo. Las medidas que adoptes no solo te protegerán contra el cáncer, sino que también te ayudarán a sentirte más sano, más fuerte y con un mayor control sobre tu bienestar general.
Aquí te presentamos nueve cosas que puedes hacer hoy mismo para reducir tu riesgo de cáncer y protegerte de otras enfermedades graves como ataques cardíacos, diabetes y accidentes cerebrovasculares, según expertos de Banner Health.
Vive un estilo de vida que ayude a reducir el riesgo de cáncer
- Mantener un peso saludable: Llevar peso extra, especialmente alrededor del abdomen, puede aumentar el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. “Tener un peso corporal elevado se relaciona con un mayor riesgo de varios tipos de cáncer, como el colorrectal, el de útero y el de mama posmenopáusico”, afirma la Dra. Shefali Birdi, especialista en medicina interna del Banner MD Anderson Cancer Center. El exceso de grasa corporal provoca inflamación crónica, que puede afectar el equilibrio hormonal, causar mutaciones en las células y promover el crecimiento tumoral.Para lograrlo:
- Come más frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras como pollo y pescado.
- Controla el tamaño de las porciones y reduce el consumo de bebidas azucaradas.
- Intenta estar activo todos los días.
Incluso una pequeña pérdida de peso puede mejorar tu salud. Si no sabes por dónde empezar, consulta a un profesional de la salud o un nutricionista.
- Mueve tu cuerpo todos los días: La actividad física desempeña un papel importante en la prevención del cáncer. Ayuda a mantener un peso saludable, fortalece el sistema inmunitario y reduce la inflamación. “Los estudios demuestran que hacer ejercicio con regularidad puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, incluidos el de mama, colon, hígado, riñón y endometrio”, señaló el Dr. Birdi.Objetivo:
- 30 minutos de ejercicio moderado (como una caminata rápida) cinco días a la semana.
- O 75 minutos de actividad vigorosa (como trotar o andar en bicicleta) cada semana.
No tiene por qué suceder todo de golpe; incluso las caminatas de 10 minutos suman.
- Come más plantas y menos carne roja y procesada: Lo que comes puede ayudarte a reducir el riesgo de cáncer. Concéntrate en alimentos de origen vegetal, que están repletos de vitaminas, fibra y compuestos naturales que combaten las enfermedades.Llena tu plato con:
- Frutas y verduras (especialmente las coloridas y crucíferas como el brócoli y la col rizada).
- Granos integrales como el arroz integral, la avena y la quinua.
- Frijoles, nueces y semillas.
- Proteínas magras como pescado, pollo u opciones vegetales.
Intenta limitar:
- Carne roja (como ternera, cerdo y cordero).
- Carnes procesadas (como tocino, salchichas y fiambres).
- Alimentos con alto contenido de azúcar añadido o muy procesados.
El Dr. Birdi también sugiere beber té verde: “Algunos estudios han indicado una posible relación entre el té verde y un menor riesgo de ciertos tipos de cáncer debido a sus propiedades antioxidantes y otros compuestos como los polifenoles”.
Tome decisiones inteligentes sobre el tabaco y el alcohol
- Deja de fumar y masticar tabaco: El tabaco es una de las principales causas de cáncer, incluyendo cáncer de pulmón, boca, garganta y vejiga. Además, daña casi todo el cuerpo. La buena noticia es que nunca es tarde para dejar el hábito. “Incluso si ya le han diagnosticado cáncer, dejar de fumar puede ayudar a mejorar los resultados del tratamiento y reducir las complicaciones”, afirmó el Dr. Birdi. “También reduce el riesgo de padecer un segundo cáncer”.El tabaco incluye:
- Cigarrillos y puros.
- Vapes y cigarrillos electrónicos.
- Tabaco de mascar y rapé.
- Limita la cantidad de alcohol que bebes: El alcohol está relacionado con varios tipos de cáncer, entre ellos:
- Cáncer de mama.
- Cáncer de hígado.
- Cáncer de colon y recto.
- Cánceres de esófago y de garganta.
Incluso una pequeña cantidad de alcohol puede aumentar tu riesgo.
Protege tu piel del daño solar
- Prevenir el cáncer de piel con protección diaria: El cáncer de piel es el más común y suele estar relacionado con la exposición al sol. Los rayos UV del sol y las camas solares pueden dañar las células cutáneas y provocar cáncer. “Con el cambio climático, aumenta la exposición a los rayos UV, lo que está vinculado a muchos riesgos diferentes para la salud, incluido el cáncer de piel”, afirmó el Dr. Birdi.Protege tu piel:
- Permanecer en la sombra entre las 10 am y las 4 pm.
- Usa protector solar con FPS 30 o superior todos los días, incluso en días nublados.
- Vuelve a aplicar el protector solar cada dos horas (o después de nadar o sudar).
- Usa un sombrero de ala ancha, gafas de sol y ropa protectora.
- Evita las camas solares por completo.
- Revisa tu piel regularmente para detectar manchas nuevas o cambios. Si tienes un alto riesgo de cáncer de piel, consulta a tu médico o dermatólogo para una revisión cutánea anual.
Mantente actualizado sobre vacunas y exámenes de detección
- Vacúnate: Algunos virus pueden aumentar el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, pero las vacunas pueden ayudar a prevenirlo.Vacunas que te protegen:
- Virus del Papiloma Humano (VPH): Puede prevenir el cáncer de cuello uterino, anal, vaginal, vulvar y algunos cánceres de cabeza y cuello.
- Hepatitis B: Puede reducir el riesgo de cáncer de hígado.
“La vacuna contra el VPH es más eficaz cuando se administra en la infancia o la adolescencia, pero los adultos, especialmente hasta los 45 años, también pueden beneficiarse de ella”, dijo el Dr. Birdi. Habla con tu proveedor sobre estas vacunas.
- No te saltes las pruebas de detección: Las pruebas de detección pueden ayudar a detectar el cáncer en sus etapas iniciales, cuando es más fácil de tratar y los resultados suelen ser mejores. Estas pruebas se basan en la edad, los antecedentes familiares y el riesgo individual.Aquí están los conceptos básicos:
- Cáncer de colon: Comienza las pruebas de detección a los 45 años (colonoscopia cada 10 años o análisis de heces cada uno a tres años).
- Cáncer de mama: Comienza las mamografías anuales a los 40 años.
- Cáncer de cuello uterino:
- Prueba de Papanicolaou cada tres años a partir de los 21 años o prueba de VPH cada cinco años a partir de los 25 años.
- A los 30 años, hazte una prueba de VPH con o sin Papanicolaou cada cinco años (preferible) o una prueba de Papanicolaou cada tres años.
- Cáncer de próstata: Los hombres deben preguntar a su médico sobre la prueba de PSA alrededor de los 45 años.
Las pruebas de detección pueden salvar vidas. No esperes más y programa una cita hoy mismo para hablar con tu proveedor.
Comprende tu riesgo
- Conoce tu historia familiar: ¿Alguien en tu familia tuvo cáncer a temprana edad? Ciertos tipos de cáncer pueden ser hereditarios. Conocer los antecedentes médicos de tu familia puede ayudar a tu médico a recomendarte pruebas de detección o asesoramiento genético.Pregunta por:
- ¿Qué tipo de cáncer tenían los miembros de la familia?
- ¿Qué edad tenían cuando les diagnosticaron?
- Si varias personas de un lado de la familia se vieron afectadas.
Incluso si no puedes cambiar tus genes, conocer tu riesgo puede ayudarte a tomar medidas preventivas antes.
Pequeños cambios, gran impacto
Pequeños cambios en tu estilo de vida, como comer mejor, mantenerte activo y evitar el alcohol y el tabaco, pueden reducir significativamente tu riesgo de cáncer. En Banner MD Anderson Cancer Center, están listos para apoyarte. Ya sea que necesites ayuda para dejar el tabaco, programar una mamografía o una vacuna contra el VPH, su equipo está ahí para ayudarte.
¿Cuál de estos pasos te resulta más fácil incorporar en tu vida diaria? ¿Y cuál crees que será el más desafiante?