El ácido fólico es clave para la salud celular, la prevención de la anemia y el desarrollo fetal. Conoce en qué momento es mejor tomarlo y cómo obtenerlo.
¿Qué es el ácido fólico y para qué sirve?
El ácido fólico, también conocido como vitamina B9, es un nutriente esencial del complejo B que participa en múltiples funciones vitales del organismo. Según la Clínica Mayo, este compuesto es indispensable para la formación del ADN, la producción de glóbulos rojos y blancos, y la regeneración celular.
Además, el ácido fólico contribuye a mantener saludables la piel, el cabello y las uñas, y previene la anemia por deficiencia de folato, una condición común especialmente en mujeres embarazadas o personas con dietas desequilibradas.
Importancia del ácido fólico en el embarazo
Uno de los beneficios más conocidos es su papel en la prevención de defectos congénitos del tubo neural como la espina bífida y la anencefalia. La Secretaría de Salud de México recomienda que todas las mujeres en edad fértil consuman 400 microgramos diarios de ácido fólico, incluso si no están planeando un embarazo, ya que muchas malformaciones ocurren en las primeras semanas de gestación, cuando aún no se sabe que se está embarazada.
“Tomar ácido fólico antes y durante el embarazo reduce el riesgo de anomalías congénitas graves del cerebro y la columna vertebral”, señala el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS).
¿Cuándo se debe tomar ácido fólico?
La cantidad y el momento de tomarlo dependen de la etapa de la vida y de las necesidades individuales. Estas son las recomendaciones generales:
- Mujeres que planean embarazarse: se aconseja iniciar la suplementación al menos 3 meses antes de concebir y continuar durante las primeras 12 semanas de embarazo, con una dosis de 400 microgramos al día.
- Embarazo de alto riesgo (antecedentes familiares o malformaciones previas): el médico puede indicar dosis más altas, de hasta 5 mg al día.
- Tratamiento de anemia por deficiencia de folato: las dosis pueden variar entre 5 y 15 mg diarios, siempre bajo supervisión médica.
- Personas con deficiencia de folato: en casos de mala absorción o dietas deficientes, se puede requerir suplementación continua.
Síntomas de deficiencia de ácido fólico
Una deficiencia de ácido fólico puede afectar la calidad de vida y causar síntomas como:
- Fatiga y debilidad
- Diarrea
- Úlceras bucales
- Cabello canoso prematuro
- Hinchazón de la lengua (glositis)
- Retraso en el crecimiento
- Anemia megaloblástica
¿En qué alimentos se encuentra?
Se encuentra de forma natural en su versión activa, el folato, en muchos alimentos:
- Verduras de hoja verde oscuro (espinaca, acelga, kale)
- Frijoles y legumbres (guisantes, lentejas)
- Frutas como naranja, plátano, melón, limón y fresas
- Frutos secos y semillas
También está presente en alimentos fortificados como cereales, harinas, panes, pastas y arroz. Sin embargo, muchas personas no alcanzan la ingesta diaria recomendada solo con la alimentación, por lo que los suplementos de ácido fólico son una opción efectiva y segura, especialmente en etapas de alta demanda como el embarazo.
Así que ya sabes
Es una vitamina esencial para las personas, pero especialmente crítica en mujeres en edad fértil. Tomarlo en el momento adecuado y en la dosis indicada puede prevenir enfermedades graves y mejorar la salud general.
Consulta siempre a tu médico antes de iniciar cualquier suplementación.