Actividad física, la medicina más barata
Seguro sabes que el sedentarismo es malo, pero te vamos a dar una cifra que dejará muy claro la gravedad de este problema.
Seguro sabes que el sedentarismo es malo, pero te vamos a dar una cifra que dejará muy claro la gravedad de este problema: La inactividad física genera 5 millones de defunciones anuales en el mundo, según cifras de la Organización Mundial de la Salud.
Y si a la inactividad le sumamos sobrepeso y obesidad (SPyO) —el principal factor de riesgo de discapacidad y muerte para los mexicanos— el panorama es desolador.
El SPyO se asocia principalmente con diabetes y enfermedades cardiovasculares, pero también con trastornos óseos y musculares y algunos tipos de cáncer.
Sin embargo, para una persona es 21 veces más barato cambiar de hábitos que tratar una diabetes complicada, informa una investigación del Instituto Mexicano para la Competitividad, A.C. (IMCO) en 2017.
“¿Qué es lo que pasa cuando la gente compra su despensa? ¿Sabe qué es una caloría? ¿Sabes cuántas necesita su cuerpo? La mayoría de la gente no, entonces el problema es que no hay educación para la salud en México. Un niño puede saber cuál es la capital de Argentina, pero desconoce cómo funciona su cuerpo, son las grandes fallas de nuestro sistema” lamentó Rafael Álvarez Cordero, médico cirujano y doctor en Ciencias Médicas de la UNAM.
El especialista destacó que desde los organismos internacionales de salud hasta los gobierno municipales han orquestado campañas a favor de un estilo de vida más saludable, pero a pesar de ello y de que en México existe una emergencia epidemiológica, no ha pasado nada.
El miembro de Quiero saber salud —un grupo de expertos profesionales de la salud comprometidos con el lema de ‘La medicina preventiva es la medicina más barata’— destacó que parte del problema es que el sistema de salud no está ligado al educativo. “Y si a eso le añadimos que los padres de familia no saben de nutrición, la situación se complica”.
Otro problema es la situación cultural. “Aún existe en el imaginario colectivo mitos de que se debe comer todo lo que está en el plato, o que la embarazada debe comer por dos, o que es una falta de educación negarse al segundo plato cuando está uno de visita o que los niños gordos son sanos”.
Gilberto Franco Sánchez, subdirector de medicina del deporte del Instituto de Rehabilitación Luis Guillermo Ibarra, estuvo de acuerdo en el factor cultural como una variable que no ayuda a que los mexicanos conserven un peso saludable.
“Comemos por amor, por odio, por nostalgia, porque nació, porque murió, porque se bautizó, porque se casó, porque se divorció. No hay celebración en la que no haya comida en abundancia”.
Franco Sánchez recordó que los kilos de más están asociados a infinidad de enfermedades. “La obesidad discapacita, nos vuelve dependientes, nos quita calidad de vida, nos deja en la total indefensión. Todos vamos a morir, pero podemos escoger morir sanos o en cachitos”.
El subdirector de medicina del deporte del Instituto de Rehabilitación Luis Guillermo Ibarra consideró urgente que la medición del índice de masa corporal se eleve a rango de signo vital como lo son la frecuencia cardiaca o la presión arterial. “Es de vital importancia que se diagnostique a las personas con sobrepeso”.
Aunque el organismo está diseñado para ganar peso, si la gente comiera menos, con más calidad y se moviera más, las enfermedades irían a la baja.
Así como la falta de vitaminas es una carencia, el sedentarismo también lo es, pero la manera de borrar esa carencia es la manera más sencilla, es la opción más simple y rentable para recobrar la salud: el ejercicio.
“Porque el ejercicio no solo baja de peso, ayuda a las articulaciones, ayuda a que no tengas hígado graso ni arterias tapadas, por mencionar solo unos beneficios” dijo Gilberto Franco Sánchez.
Una persona con prediabetes y obesidad que no cambia de hábitos y presenta complicaciones médicas, puede llegar a gastar, en 30 años, casi dos millones de pesos, lo que llevaría a su familia a la bancarrota.
En cambio una persona con prediabetes y obesidad que cambia su dieta e incluye actividad física gastará poco menos de 93 mil pesos en 30 años después del diagnóstico.
“Cada individuo es dueño de su salud, la salud es un asunto personal, no de las instituciones sanitarias ni de los gobiernos” destacó Rafael Álvarez Cordero. “Debemos asumirnos como dueños de nuestra salud y nuestra enfermedad”.
Gilberto Franco Sánchez, especialista en medicina del deporte, comentó que todo mundo busca la polipastilla que cure diversos males cuando ya existe, está a la mano y es barata: el ejercicio.
El especialista llamó a la población a iniciar de manera progresiva, sobre todo si se tiene obesidad. “De lo que se trata es de disminuir los periodos de inactividad, lo que puede hacerse de manera fácil”.
‘Chochitos’ para iniciar una vida más activa:
Los especialistas destacaron que la cultura del ejercicio es un asunto personal y una responsabilidad intransferible. “Siempre será más económica la prevención que el tratamiento de las enfermedades derivadas de la ignorancia: “Una onza de prevención es más efectiva que una libra de curación”.