Además de Annabelle, estos son otros objetos del Museo de los Warren
La tercera entrega de la saga Annabelle promete aportar un toque siniestro a la universo de “The Conjuring (‘El conjuro’ o ‘El Expediente Warren’)”.
Por fin ha llegado la tercera entrega de la saga Annabelle que, bajo el nombre “Annabelle comes home (‘Anabbelle 3: viene a casa’)”, promete aportar un toque siniestro a la universo de “The Conjuring (‘El conjuro’ o ‘El Expediente Warren’)”.
Las cintas de Anabbelle se basan en la historia real de uno de los sucesos atendidos por el matrimonio conformado por Ed y Lorraine Warren, investigadores de fenómenos paranormales. Sin embargo, este es solo uno de los más de 4,000 casos sobrenaturales a los que se enfrentó la pareja estadounidense, razón por la que ha inspirado varias películas de terror.
Después de las experiencias de su carrera como parapsicólogos, el matrimonio Warren decidió crear su famoso Museo del Ocultismo Warren en Monroe, Connecticut, el cual alberga un amplio inventario de objetos relacionados con cada uno de sus casos.
Aquí te dejamos una lista de los artículos que acompañan a la popular muñeca Anabbelle en el mueso de los Warren:
Perteneció a una casa con actividad paranormal, cuya construcción se realizó sobre un cementerio en Estados Unidos. Se afirma que ese espejo albergó los espíritus de Sara Woodruff y sus hijos, quienes habían sido envenenados.
Perteneció a un niño de nombre Robert Eugene Otto en Key West, Florida. Se dice que el muñeco tenía vida propia, pues hablaba con el infante y causaba daño tanto a él como a su familia.
De hecho, una vez que Robert murió, el muñeco se quedó guardado en el sótano de la casa y fue hallado por una niña que se había mudado a la casa. Ella aseguró que el juguete intentó matarla. La intervención de los Warren impidió que su maldad continuara.
Anna Baker, una joven adinerada, se enamoró profundamente de un minero, así que planeó su boda y se hizo del vestido de novia que usaría; sin embargo, su padre le impidió seguir con su enamorado.
Se dice que tras su muerte en 1914, se podía ver cómo el vestido que aún conservaba se movía completamente solo, haciendo pensar que el alma de Anna era quien estaba en él.
Existen dos versiones acerca de lo sucedido con el caso de Bathsheba Sherman. Por un lado, Lorraine Warren sintió su presencia en la casa donde había habitado Sherman a principios del siglo XIX.
Después de las investigaciones y de varios episodios de clarividencia de Lorraine, los Warren afirmaron que Sherman había asesinado a un niño en ofrenda a entidades demoniacas, y que antes de que ella se ahorcara, maldijo a todo aquel que habitara la casa.
La otra versión apunta a que efectivamente había sido juzgada por la misteriosa muerte de un niño que estaba a su cuidado. A pesar de que no hubo datos para demostrar que Sherman tenía prácticas satánicas, cuatro de sus hijos murieron antes de cumplir los cuatro años.
Sherman habría muerto a causa de una “extraña forma de parálisis” que se comparó con el haberse convertido en piedra”.
Pertenecía a un hombre que coleccionaba este tipo de instrumentos, sin embargo, al poco tiempo de adquirirlo se dio cuenta de que este se tocaba solo a altas horas de la noche, razón por la que contactó a la pareja Warren, quienes finalmente se quedaron con él, y dicen que aún se puede escuchar su sonido durante las madrugadas.