Adiós a las manchas: consejos prácticos para dejar todo limpio
Te decimos algunos tips para que puedas eliminar esas manchas difíciles que a veces a parecen, provocadas por vómito, plastilina o algún crayón.
Prueba primero la solución más sencilla y menos dañina para quitar las manchas de la pared; si no funciona, tendrás que recurrir a métodos más rigurosos. Limpia con toallas de papel secas.
El papel puede borrar las marcas si todavía están húmedas o si la superficie de la pared es lisa y sin poros. Si el papel seco no da resultado, humedécelo con alcohol.
¿Aún no salen las marcas? Entonces usa un solvente. Ten cuidado porque estos líquidos son inflamables. Como el solvente puede dañar el acabado de la pared, primero pruébalo en una zona poco visible.
Rocíala con agua fría y sécala. El vómito contiene proteínas, así que no uses agua tibia ni caliente porque fijarías la mancha en las fibras de la alfombra. Si queda algún residuo, humedece la zona con un limpiador enzimático, como el que venden las tiendas de mascotas para quitar olores.
Lava y enjuaga siguiendo las instrucciones del producto.
Consigue un poco de hielo, ponlo dentro de una bolsa de plástico para evitar que gotee y frota la bolsa sobre el chicle hasta que éste se congele y endurezca. Luego quita el chicle endurecido raspándolo con un cuchillo para untar.
Si quedan residuos, elimínalos con un solvente para limpieza en seco (pruébalo antes en una zona poco visible para asegurarte de que no dañe la alfombra).
Si la superficie de la mesa está pintada, frota las marcas con un poco de pasta de dientes (que no sea en gel), usando un cepillo viejo o un trapo seco: si es de madera barnizada o sin acabado, frota las marcas con un trapo con mayonesa.
Deja reposar uno o dos minutos, y luego limpia la mesa con un paño húmedo.
Las manchas de pasto pueden dañar la tela, así que trata de eliminarlas lo antes posible.
Frota la prenda con detergente para ropa; luego, enjuaga con agua caliente. Si esto no elimina las manchas, frótalas con más detergente y lava la prenda, agregando jabón enzimático o un quitamanchas; ambos ayudarán a eliminar las proteínas del pasto. También puedes quitar las manchas de las maneras siguientes:
La manera más eficaz de eliminar las manchas de comida o bebida es tratarlas antes de que se sequen y se fijen en la tela. Prueba esta solución: primero, retira las manchas de la ropa tanto como puedas con una toalla de papel; después, límpialas con toallitas para bebé (son perfectas para eliminar esta clase de manchas).
Primero retira del bolsillo toda la plastilina que puedas; luego, raspa con un cuchillo para untar. Rocía la zona manchada con lubricante en aerosol (como el WD-40) y espera 10 minutos. Vuelve a raspar, rocía la mancha otra vez, espera 10 minutos más y seca con un trapo limpio.
Si aún quedan residuos, moja con alcohol fino una parte del trapo que siga limpia y pásala varias veces sobre la mancha; después, lava la prenda como siempre.
Si tratas de quitar la mancha antes de que la sangre se seque, saldrá fácilmente. Frota la mancha con algún agente enzimático (¡como tu saliva!), enjuaga con agua y verás cómo desaparece.
Tu hijo está jugando en su cuarto con un silencio sospechoso… Resulta que tu aprendiz de artista garabateó la pared con un lápiz. Ve a la cocina por una rebanada de pan fresco. Frota el pan sobre la zona dibujada, y verás que las marcas desaparecen sin arruinar el tapiz.
Fuente: Baking Soda, Banana Peels, Baby Oil and Beyond. © 2008 Reader’s Digest Association, Inc.