¿Sientes que la grasa abdominal se resiste a desaparecer? No te preocupes en absoluto. La ciencia ha demostrado de manera concluyente que la combinación de dieta y ejercicio es la clave para combatirla. Y en este caso particular, los ejercicios japoneses pueden convertirse en tus mejores aliados en esta lucha.
Estos ejercicios, muchos de los cuales se derivan de las artes marciales tradicionales y prácticas de fitness, no solo apuntan directamente a la grasa abdominal, sino que también ofrecen beneficios adicionales, como el aumento de la flexibilidad, la resistencia y el bienestar mental.
Por lo tanto, te animo a que incorpores estos 5 ejercicios japoneses a tu rutina diaria y digas adiós de una vez por todas a esa grasa abdominal obstinada:
Este ejercicio, lento y suave, combina la respiración controlada con el movimiento consciente, lo que resulta en una efectiva tonificación de los músculos oblicuos y en un aspecto más plano del abdomen.
Para realizarlo, simplemente párate con los pies separados a la altura de los hombros y gira lentamente el torso de lado a lado, controlando el movimiento con los músculos centrales. Repite este ejercicio de 10 a 15 veces por lado.
El Kendo, un arte marcial tradicional japonés que utiliza espadas de bambú en combates, no solo es un entrenamiento de cuerpo completo, sino que también contribuye significativamente a la quema de grasa abdominal y al desarrollo muscular.
Sin embargo, es crucial que consultes a un experto en fitness o salud antes de comenzar con esta práctica.
Este ejercicio, fundamental en las artes marciales japonesas, no solo mejora la postura, sino que también aumenta la capacidad pulmonar y tonifica los abdominales.
Para realizarlo, simplemente acuéstate en el suelo y observa cómo sube y baja tu pecho/estómago al respirar. Intenta respirar más profundamente y aumenta gradualmente el tiempo y el número de respiraciones.
La gimnasia o calistenia japonesa, conocida como Taiso, ofrece una amplia gama de beneficios, incluida la quema de grasa abdominal, la promoción del bienestar general y la reducción del estrés.
Este ejercicio incluye estiramientos dinámicos, ejercicios de peso corporal como sentadillas, estocadas, flexiones, entre otros, y un enfriamiento con estiramientos.
Este sencillo ejercicio no solo reduce hasta 5 cm de cintura, sino que también mejora la postura y reduce el dolor de espalda. Simplemente acuéstate boca arriba con una toalla en la parte baja de la espalda y mantén la postura durante 5 minutos, luego suelta gradualmente.
Con información de GQ
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