¿Alergia al polvo? Estrategias para deshacerte del polvo en casa
Más del 90 por ciento del polvo doméstico proviene de pequeñas escamas de piel y fibras de tela apenas visibles que flotan con una mínima corriente de aire.
Aquí te mostramos cómo eliminar el polvo que se deposita en todas las superficies de tu casa, tanto como sea posible.
Los armarios son un refugio de polvo, lleno de diminutas fibras de ropa, toallas y ropa de cama. Y cada vez que abres la puerta, provocas una tormenta de polvo invisible. No puedes evitar que la ropa suelte fibras, pero puede hacer que los armarios sean más fáciles de mantener limpios, lo que reducirá enormemente el polvo.
¿Cómo deshacerte del polvo de tu armario? Coloca los artículos en cajas o bolsas en los estantes, preferiblemente en recipientes de plástico transparente; bloquean las fibras, evitan el polvo y te permiten ver lo que hay dentro. Además, cuando desempolvas, son fáciles de sacar de los estantes y limpiarlos. Mantén los abrigos en bolsas de ropa.
Y finalmente, mantén limpios los pisos de tu armario. Si el piso está desordenado, lo más probable es que simplemente lo evites mientras pasa la aspiradora y comenzarán a acumularse conejitos de polvo. Así es como tu casa podría estar enfermando.
Tu cómoda cama es un gran distribuidor de polvo, y ese polvo puede multiplicarse como conejos si no te mantienes en él. Esto se debe a que la ropa de cama acumula escamas de piel, arroja sus propias fibras y lanza una nube de polvo cada vez que se da la vuelta.
Para minimizar las consecuencias, lava las sábanas y fundas de almohada semanalmente. Los artículos que no se pueden lavar a máquina no necesitan viajes semanales a la tintorería; simplemente saca las mantas y colchas afuera y sacúdelas.
Puedes sacudir un poco el polvo de las almohadas, pero para una limpieza a fondo, lávalas o límpialas en seco.
La clave es capturar el polvo, no solo esparcirlo. El problema es que eso es exactamente lo que hacen los plumeros y los trapos secos. Una mejor opción: trapos húmedos o paños desechables, que atraen y retienen el polvo con una carga electrostática.
Los paños que atraen el polvo con aceites o ceras también funcionan bien, pero pueden dejar residuos en los muebles. Usa accesorios para aspiradoras solo en superficies difíciles de quitar el polvo con un paño, como superficies rugosas y carpintería intrincada, porque la corriente de escape de una aspiradora puede provocar una tormenta de polvo.
La succión por sí sola no es suficiente para sacar mucho polvo de una alfombra. Para obtener buenos resultados, necesitas una aspiradora con un potente agitador (el cepillo que barre la alfombra).
Cuando se trata de pisos de madera, baldosas o vinilo, tu mejor opción es una aspiradora de recipiente sin agitador (o con un agitador que se pueda apagar). Así es como podrías limpiar demasiado tu casa.
Las alfombras son un gran depósito de polvo ya que todas sus fibras absorben el polvo como una esponja gigante y pueden enviarlo por el aire cada vez que das un paso.
Pasar la aspiradora al menos una vez a la semana, a veces más para las personas alérgicas, puede ayudar, pero sacar las alfombras al aire libre para dar una buena paliza es una necesidad que se pasa por alto. Colócalas sobre una cerca o cuerda para tender la ropa y golpéelos con una escoba o una raqueta de tenis. Dale el mismo trato a tus cojines.
La tela de tapicería no solo arroja sus propias fibras, sino que también absorbe el polvo que se deposita sobre ella, por lo que levanta bocanadas de polvo cada vez que te sientas. Bate los cojines en el patio trasero o utiliza fundas y dales una buena sacudida. Si deseas eliminar el polvo de la tapicería, compra muebles revestidos de cuero o vinilo.
Tomado de thehealthy.com Dust Allergy? 7 Smart Strategies to Get Rid of the Dust in Your House