Alergias a fluidos humanos: Impacto en salud física y emocional

¿Es posible ser alérgico al cuerpo de otra persona?

Aunque parezca una escena de ciencia ficción, algunas personas desarrollan reacciones alérgicas graves al sudor, la saliva o el semen de otras personas. Estas respuestas del sistema inmunológico, aunque poco comunes, son reales y pueden tener un profundo impacto en la salud, las relaciones sexuales y la vida emocional de quienes las padecen.

Maura(nombre ficticio), una mujer estadounidense de 43 años, lo sabe bien. Durante años experimentó ardor, hinchazón y enrojecimiento genital después del sexo sin protección. Un día, tras una relación sexual, su lengua se hinchó y casi se asfixia. El diagnóstico fue claro: alergia al semen. Y su caso no es el único.

¿Qué tipo de alergias pueden surgir al contacto con otra persona?

Estas reacciones suelen ser poco conocidas y, por eso, mal diagnosticadas. Pero existen y pueden clasificarse según el fluido que desencadena la reacción:

 Alergia al semen (hipersensibilidad al plasma seminal)

Se han documentado menos de 100 casos clínicos, pero se estima que muchas personas no están diagnosticadas. Esta condición provoca:

• Dolor, ardor y picor genital tras el coito.
• Urticaria o enrojecimiento.
• En casos severos, anafilaxia (reacción alérgica potencialmente mortal).
• Malestar emocional, sobre todo si se desea concebir hijos.

El antígeno prostático específico, una proteína del líquido seminal (no de los espermatozoides), suele ser el causante.

 Alergia a la saliva

Más común en personas con alergias alimentarias. Ejemplos documentados:

• Personas alérgicas a frutos secos que sufren reacciones tras besar a alguien que los comió horas antes, incluso si se lavó los dientes.
• Reacciones a frutas, mariscos o medicamentos presentes en la saliva.

Alergia al sudor (propio o ajeno)

Aunque lo más frecuente es la colinérgica (al sudor propio), algunas personas sensibles a químicos o con trastornos como el síndrome de activación de mastocitos pueden presentar reacciones al contacto con el sudor de otros.

Alergia al flujo cervicovaginal

Una condición aún más rara y poco reconocida, pero documentada. Los síntomas incluyen:

• Picor, enrojecimiento o urticaria tras el contacto con el flujo vaginal.
• Reacciones en la cara después del sexo oral.
• Mayor incomodidad en relaciones nuevas o cuando la exposición es más intensa.

¿Cómo se diagnostican estas alergias?

Por lo general, el diagnóstico se basa en:

• Pruebas de punción cutánea con el fluido sospechoso.
• Análisis de síntomas y antecedentes.
• Evaluación clínica detallada en entornos controlados.

Tratamientos posibles

Aunque no existe una cura definitiva, algunas opciones pueden ayudar:

• Uso de preservativos, cuando se trata del semen.
• Terapias de desensibilización, con microdosis del fluido en ambientes controlados (usado para la alergia al semen).
• Antihistamínicos, en casos leves o con alergias a otros fluidos.
• Evitar el contacto directo, si no hay otra opción.

El impacto emocional (más allá de lo físico)

Estas alergias afectan más que la salud física. Pueden alterar:

• La intimidad sexual, al generar miedo o ansiedad.
• Las relaciones de pareja, cuando hay incomprensión o sentimientos de culpa.
• Las decisiones familiares, como en el caso de Maura, que decidió no tener hijos por miedo a nuevas reacciones graves.

En muchos casos, las parejas afectadas deben redefinir su forma de relacionarse y contar con apoyo médico, psicológico y mucha comunicación.

¿Se pueden evitar?

No necesariamente, ya que muchas de estas condiciones son impredecibles. Sin embargo:

• Es fundamental reconocer los síntomas y no ignorarlos.
• Acudir con un alergólogo o inmunólogo puede marcar la diferencia.
• Hablar del tema sin vergüenza ni estigmas permite buscar soluciones juntos.

Conclusión

Sí, es posible ser alérgico al semen, la saliva o incluso al sudor de otra persona. Aunque raro, este tipo de hipersensibilidades pueden alterar profundamente la vida de quienes las sufren. Identificar los síntomas y buscar atención médica adecuada es clave para vivir con bienestar, salud y relaciones sanas.

Con información de la BBC