Estos pueden ser serios y con frecuencia requieren ayuda profesional y medicamentos. Puede ser muy útil cambiar de alimentación además de pedir apoyo, y no en lugar de éste. Lo que comemos y dejamos de...
Estos pueden ser serios y con frecuencia requieren ayuda profesional y medicamentos. Puede ser muy útil cambiar de alimentación además de pedir apoyo, y no en lugar de éste.
Lo que comemos y dejamos de comer tiene un impacto sobre nuestra salud emocional. Además, la gente que vive con dificultades emocionales a menudo come de forma irregular. Algunos pierden el apetito por completo, mientras que otros siempre tienen hambre, especialmente de alimentos dulces o almidonados.
Problemas emocionales
Consumir los alimentos correctos puede servir para estabilizar el estado de ánimo porque los nutrientes afectan los químicos cerebrales que controlan el mismo; por ejemplo, los carbohidratos pueden tener un efecto relajante.
También es bueno mantener estable los niveles de glucosa. Para ello, no te saltes comidas; mejor come seguido en pequeñas cantidades durante el día. Esto te puede ayudar a estabilizar tu ánimo y tus niveles de energía. Trata de que la comida sea algo positivo para ti.
Combina el triptófano con carbohidratos. Es un activador de serotonina que se encuentra en las aves, la leche, los huevos, y las semillas de calabaza. Ingerir estos alimentos con carbohidratos de bajo índice glucémico (IG), como los granos integrales, sirve para transformar al triptófano en serotonina.
Consume vitaminas B. Se ha comprobado que la vitamina B6 genera alivio a las mujeres que sufren de depresión relacionada con el síndrome premenstrual. Otras investigaciones han descubierto que muchas personas deprimidas tienen una deficiencia de folato y vitamina B12.
Llénate de ácidos grasos omega 3. Los niveles de depresión son más bajos en países en los que la gente come mucho pescado, y más elevados en donde se ingiere menos. Trata de consumir al menos tres porciones a la semana de pescado rico en aceites omega 3. No olvides otras fuentes como las semillas de linaza, la chia y las nueces de Castilla.
Limita tu ingesta de azúcar. Cuando las personas sensibles al azúcar comen muchos dulces, pueden experimentar un aumento de energía, seguido por un rápido descenso de la misma, por lo que sienten debilidad y agitación. Pero está bien comer un cuadrito pequeño de chocolate amargo de vez en cuando. Contiene feniletilamina, que eleva los niveles de endorfinas y actúa como un antidepresivo natural.
Estrés
El estrés emocional es parte de la vida. Nuestros cuerpos tienen reacciones de “lucha” o “huida”, lo que inunda al cuerpo de adrenalina y otras hormonas que lo ponen en estado de alerta. El metabolismo se acelera y la digestión se hace más lenta. Estar en constante estado de tensión afecta el sistema inmunitario, así que tienes mayor propensión a padecer alguna enfermedad, desde un resfriado hasta problemas cardiacos y cáncer.
Los alimentos nutritivos te dan energía y nutrientes para combatir infecciones cuando estás bajo presión:
Consume cinc. Ayuda a mantener fuerte el sistema inmunitario.
No te saltes el desayuno. Manejarás el estrés mucho mejor si tienes suficiente combustible.
Distribuye 4-6 mini comidas equitativamente durante el día. Así el sistema digestivo se esforzará menos y mantendrá estables los niveles de energía.
Come lentamente. Devorar los alimentos puede provocar indigestión y agregar el malestar estomacal a tu lista de preocupaciones.
Bebe té de manzanilla o hierbabuena. Tienen un efecto relajante.
Alimentos que los inhiben los trastornos emocionales:
Aves de corral
Cítricos
Espárragos
Granos enteros
Huevos
Legumbres
Maíz
Nueces de Castilla
Papas
Pasta, pan y cereales integrales
Pescados grasos, como el salmón y las sardinas
Productos lácteos descremados
Semillas de calabaza
Semillas de linaza y chía
Verduras de color verde
Alimentos que debes limitar:
Alcohol
Cafeína
Productos azucarados
Alimentos que debes evitar:
Comida con aditivos (especialmente si padeces sensibilidad a los aditivos)
Alimentos que lo inhiben el estrés:
Aves de corral
Carne magra
Frutos secos
Granos integrales
Huevos
Mariscos
Ostras
Productos lácteos
Tés de manzanilla y de hierbabuena
Alimentos que debes evitar:
Alcohol
Alimentos grasos
Cafeína
Comidas picantes o con especias
¿Por qué se nos antoja el azúcar cuando nos sentimos mal?
Los carbohidratos simples, como la comida azucarada, incrementan los niveles de serotonina, la hormona que nos hace sentir bien. Es por eso que instintivamente buscamos algo dulce cuando nos sentimos mal. Desafortunadamente, esto hace que se eleven nuestros niveles de glucosa en la sangre, para luego caer drásticamente… junto con nuestro ánimo.