“La piel de los párpados es la más delgada y delicada del cuerpo, y es la primera que revela la edad”, dice la doctora Debra Jaliman, profesora asistente de dermatología en la Escuela Icahn de Medicina en Monte Sinaí.
Así que, aunque te impresione la variedad disponible de cremas para los ojos, vale la pena revisarlas. La doctora Jaliman sugiere que, para garantizar su efectividad, busques cremas para ojos que incluyan péptidos y antioxidantes en su lista de ingredientes.
Quizá has escuchado que la posición en la que duermes puede causar líneas de expresión en tu rostro. Algunas investigaciones señalan que no es verdad: un estudio de la Universidad de Michigan descubrió que la posición en la que dormimos no causa la formación de arrugas.
¿Pero qué sí puede influir en su aparición? El material sobre el cual duermes. Con la seda, tu rostro se deslizará sobre la almohada en lugar de apretarse, dice la doctora Jaliman. Te sentirás más cómoda y evitarás la aparición de líneas de expresión.
Una dieta basada en pan blanco no ayuda a la piel. Por eso, la doctora Jaliman se asegura de que su alimentación esté llena de colores y vegetales de colores brillantes. “Son ricos en antioxidantes, que brindan brillo a la piel”, afirma.
En específico, los estudios sugieren que los pigmentos llamados carotenoides (hallados en alimentos como zanahorias, jitomates, espinacas y otras verduras de hoja verde) están relacionados con ese saludable resplandor.
Tu celular tiene más gérmenes que un inodoro. En una pequeña muestra de 51 teléfonos, investigadores de la Universidad de Oregon detectaron 7,000 tipos diferentes de bacterias. Así que imita a tu dermatólogo y aleja tu teléfono de tu rostro.
Algunas de las bacterias en la superficie de tu equipo pueden provocarte barritos, dice la doctora Jaliman (recuerda limpiar tu celular ocasionalmente).
En noviembre pasado, la FDA propuso que el azúcar agregada (esto es, la que se añade a los alimentos procesados) no debe exceder el 10 por ciento de tu ingesta total diaria de calorías. Y los nutriólogos no son los únicos que sugieren recortar lo dulce; desde hace tiempo, los dermatólogos han conocido los efectos negativos del azúcar.
Las moléculas de azúcar pueden volver rígido al colágeno, la proteína que ayuda a mantener saludable a tu piel, y con ello causar arrugas, explica la doctora Jaliman.
Todos hemos escuchado que el protector solar es esencial para evitar que la piel envejezca. Lo que muchas personas desconocen es que el protector solar debe ser lo primero que se aplique al rostro, no lo último. De acuerdo con el doctor Neal Schultz, “la razón es que la FDA prueba los protectores solares aplicándolos directamente sobre la piel. Si quieres la protección total, aplícalo primero.
Además, cuando yo paso tiempo en exteriores, sigo la regla de la sombra: si mi sombra es más corta que yo, sé que el sol está en su intensidad máxima, y que aunque traiga protector solar (que aplico a diario) necesito limitar mi exposición al sol”.
Desde hace tiempo, se ha relacionado a alguien con mejillas “tan rojas como un jitomate” con una excelente salud. Existe una buena razón: los jitomates contienen una alta dosis de beneficios nutricionales.
El doctor John Layke, cirujano plástico y cosmético, afirma que el consumo de jitomate ayuda a reducir las manchas de la edad, dar brillo a la piel y a reducir las decoloraciones gracias a sus altos niveles de licopeno, un poderoso antioxidante.
Desvelarnos o dormir de más suele quitarnos la energía para realizar una rutina completa de cuidado de la piel. Sin embargo, la doctora Lorretta Ciraldo insiste en la necesidad de mantener las rutinas de mañana y noche en cualquier circunstancia.
“Es como aplicar una sola dosis de un producto que requiere dos: solo obtendríamos la mitad de lo que necesitamos. Si alguien necesita una inyección de antibióticos pero descarto el resto del medicamento, no solo estoy perdiendo el tiempo sino que estoy reduciendo la eficacia del tratamiento. Saltarnos una de las dos rutinas tiene el mismo efecto”.
Hay personas que realizan rutinas complejas para obtener una piel perfecta, pero en este caso los clichés son ciertos: menos es más. De acuerdo con el doctor Tyler, “entre menos ingredientes contenga un producto cosmético, mejor. Prefiero aquellos que no tengan muchos aditivos como colorantes o fragancias.
Por la noche, lavo mi rostro con agua para retirar la suciedad y la contaminación, aplico un exfoliante ligero y la humecto con crema (de preferencia que venga en un tubo, no con un aplicador de bomba) antes de dormir”.
A diferencia de los maquillajes tradicionales, las colecciones basadas en minerales suelen estar libres de conservantes y químicos. Como no suelen tener parabenos, colorantes ni fragancias, son una buena opción para las mujeres que tengan problemas de la piel como eczema o rosácea pero que no deseen renunciar al maquillaje.
La doctora Janet Prystowsky afirma: “como base, aplico un protector solar mineral con color. Busco ingredientes activos como óxido de zinc y bióxido de titanio. También me gusta el protector solar mineral porque se absorbe bien y no mancha mi ropa”.
Recurre a vitaminas, minerales, hierbas y enzimas, esos suplementos ricos en nutrientes que pueden revitalizar tu piel desde el interior. No importa si prefieres tabletas, cápsulas, polvos o barras energéticas: vale la pena incluirlos en tu alimentación, sobre todo si no puedes cocinar un menú variado.
Robin Evans, dermatólogo e instructor clínico en el Colegio de Medicina Albert Einstein, dice: “tomo aceite de pescado cada mañana, que me da 1,500 mg de DHA; aceite de linaza para hidratar mi piel, y semillas de linaza por sus beneficios anti-inflamatorios. Todos me ayudan a prevenir la aparición de señales de la edad, a humectar mi piel y a mantenerla con buena salud general.”
Esto decepcionará a quienes disfrutan tomar baños con agua muy caliente: hacerlo daña la piel. El agua caliente elimina la mayoría de los aceites naturales y lleva la circulación sanguínea hacia tu piel, creando reacciones inflamatorias que pueden provocar ronchas y lastimar a quienes ya tienen piel seca o eczema.
De acuerdo con la doctora Marina Peredo, dermatóloga de las celebridades, “durante el verano suelo bañarme con agua fría. Después de una prolongada exposición al sol, un baño con agua caliente puede secar la piel, causando más daño. El exceso de sudor también te deja más susceptible al acné. Bajar la temperatura del agua te refrescará y te ayudará a mantener tu piel saludable durante el verano.”
Los retinoides están muy subestimados en la rutina estándar de cuidado de la piel, pero casi todos los dermatólogos son devotos a ellos. Innumerables estudios demuestran su capacidad para impulsar la regeneración celular, formar colágeno, reducir la producción de pigmentos, tratar el acné y prevenir el cáncer de piel. La doctora Joyce Park recomienda “un retinoide tópico como tretinoina, un derivado de la vitamina A que trata el acné, aclara las manchas oscuras, ayuda a formar más colágeno y previene el envejecimiento de la piel.
Después de lavarme la cara y secarla con pequeños golpecitos, distribuyo una cantidad mínima de retinoides por todo mi rostro. Tengo piel muy sensible y algunos de los efectos secundarios incluyen irritación, enrojecimiento y una ligera descamación, así que trato de aplicar el retinoide cada dos o tres noches”.
La exfoliación no solo elimina las células muertas para lucir una complexión más radiante; también retira el exceso de aceite y limpia los poros bloqueados que se traducen en acné. De acuerdo con la doctora Shereene Idriss, “¡la exfoliación es esencial! Hazla de dos a tres veces por semana, y evita usar exfoliantes ásperos que podrían irritar tu piel e incluso dejarle cicatrices.
Trata de elegir exfoliantes químicos suaves, como un limpiador con ácido láctico o, mi favorito, ácido glicólico. Renuevan tu piel con regularidad, evitan la aparición de las líneas de expresión y ayudan a reducir la apariencia de los poros”.
Tu piel, al igual que tu interior, requiere un equilibrio de nutrientes benéficos. Considera a los antioxidantes como la alimentación de tu piel: no solo combaten el envejecimiento, sino que limitan la producción de radicales libres.
La doctora Melissa Kanchanapoomi Levin, dermatóloga, dice: “los radicales libres se crean cuando la piel se expone a radiación ultravioleta, radiación infrarroja, contaminación y estresores ambientales. Los antioxidantes reducen el estrés oxidativo al neutralizar los radicales libres. Al agregar un antioxidante, incrementas tu protección solar y te defiendes contra otros estresores”.
Uno de los mayores dilemas es elegir entre jabón de barra y jabón líquido. Aunque las barras tienen mala reputación, cualquier producto que entre sus ingredientes incluya agua (como el jabón líquido) requiere un conservante, que es rico en químicos y surfactantes que pueden resecar la piel. El jabón en barra está hecho con hidróxido de sodio, así que su fórmula consiste exclusivamente en moléculas de jabón y glicerina humectante.
El doctor Terrence Keany, dermatólogo, explica: “las barras de jabón tienen mala reputación y hay muchos mitos sobre ellas. Se cree que acumulan suciedad y bacterias, pero no existen estudios serios que lo demuestren. Recomiendo las barras que incluyan tecnología humectante”.
Una regla general es visitar al dermatólogo al menos una vez al año. Sin embargo, ésta es una de las citas menos populares a pesar de las crecientes estadísticas de cáncer de piel. La dermatóloga Brooke Bair nos comparte: “visito al dermatólogo una vez al año.
Tengo un historial familiar de melanoma, crecí cerca de la playa y me bronceaba mucho cuando estuve en la universidad. Ahora sabemos más sobre los peligros de la radiación UV y cómo podemos protegernos del cáncer de piel, incluyendo el mortal melanoma”.
FUENTE: Reader’s Digest
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