Cómo esconder los defectos, limpiar el tapiz, cubrir los agujeros
Ubique los montantes de una pared
¿No tiene un localizador de montantes o travesaños para paredes? Utilice una rasuradora eléctrica. Enciéndala y colóquela contra la pared. Muévala lentamente por ella, prestando atención al sonido que hace. C
uando la rasuradora pase por un montante, el sonido será más alto.
Esconda los defectos
Si alguna vez ha usado una máquina de escribir, sabe lo útil que es una botellita de corrector. Quizás ignore que resulta aún más útil para cubrir las manchas e imperfecciones en las paredes blancas y en los techos.
Aplíquelo sobre el defecto, y es todo: habrá desaparecido. Al trabajar con superficies brillantes, cubra el corrector ya seco con una capa de barniz para uñas transparente.
Limpie el pegamento del papel tapiz
Desmontar el papel tapiz viejo puede ser una pesadilla, pero resulta aún peor vérselas frente a frente con el pegamento viejo. Un rodillo de goma o escurridor puede ser de gran ayuda; remójelo en una cubeta de agua muy caliente (agregue 1 taza de vinagre si el pegamento es muy potente).
Aplica la solución con el lado esponjoso, y después dele vuelta y use el hule para desprender el pegamento. Limpie la pasta frecuentemente con un trapo seco.
Cubra los agujeros sin masilla
¿No tiene masilla? Antes de dirigirse a la ferretería, busque en su botiquín, pues con un poco de pasta de dientes blanca puede hacer el arreglo.
También puede rellenar los pequeños huecos con yeso y aplicar una pasta de bicarbonato y pegamento blanco en partes iguales, o mezclar 2 cucharadas de sal y 2 cucharadas de fécula de maíz con agua para preparar una especie de masilla.
Un parche especial
Algunos creen que la falta de montantes dificulta mucho parchar un hoyo de la pared. Pero están equivocados. De hecho, todo lo que se requiere es un par de palos para mezclar pintura (los regalan en algunas ferreterías) y, si se trata de un hoyo pequeño, palitos de paletas.
Pegue los palitos con pegamento al boquete y, cuando estén fijos, añada la masilla o la cinta.
Asegure un tornillo
Una tuerca en la pared puede, con el tiempo, agrandar el hoyo en el que está incrustada. Mejor sea precavido y corte uno o dos hilitos de plástico (los que vienen en las bolsas de pan de caja), en tiras que igualen la longitud del tornillo.
Únalos con los dedos, rellene el hoyo y vuelva a colocar el tornillo. Si el hoyo se ha ampliado significativamente, utilice fibra metálica, pedazos de cartón o una bola de algodón humedecida con pegamento. Espere 24 horas a que el resistol se seque antes de colgar cualquier cosa en el tornillo.
Elimine las manchas del techo
Borre las molestas manchas del techo poniéndose un par de goggles y limpiándolas con un trapeador con esponja y una solución de agua y cloro, en partes iguales. Talle hasta que las manchas desaparezcan.
Arregle las pequeñas cuarteaduras
No repare el techo entero sólo porque hay algunas pequeñas cuarteaduras. Mejor prepare una pasta de bicarbonato de sodio y pegamento en partes iguales