Así es Rodolfo, el reno auténtico
El reno no vuela, pero cuenta con más herramientas de supervivencia que la mayoría de los mamíferos.
Los renos tienen las pezuñas más anchas que cualquier otro cérvido. Los dedos se abren considerablemente y actúan como raquetas de nieve, distribuyendo el peso del animal para que pueda caminar sobre nieve, hielo y terrenos enfangados ¡sin hundirse!
Los renos son los únicos mamíferos que pueden ver la luz ultravioleta.
Esta habilidad —por la cual toda materia que absorbe los rayos ultravioleta se vuelve negra contra la nieve blanca— es esencial para la supervivencia de los renos, ya que les permite ver cosas como la orina (una señal de depredadores o competidores), líquenes (una fuente básica de alimento en el invierno) y el pelaje blanco (lo que facilita mucho avistar a los depredadores, a pesar de que estén camuflados).
Los renos recién nacidos superan en velocidad a un corredor olímpico.
Se ponen de pie y caminan casi de inmediato, y pueden correr ¡a 90 minutos de haber nacido! Al cabo de unas horas siguen a sus madres a través de la tundra, galopando a velocidades de hasta 75 kilómetros por hora.
Al reno se le conoce como Caribú en América del Norte.
Reno y caribú son la misma especie, pero el término reno por lo común se usa para referirse a la subespecie domesticada que vive en Siberia y Escandinavia.
En Noruega, Finlandia, Rusia y Alaska, el invierno trae consigo ¡carreras de renos!
Los jockeys se deslizan sobre la nieve en esquís o en trineos tirados por renos adiestrados, que corren a velocidades de hasta 80 kilómetros por hora.
Su grueso pelaje hace que se sobrecalienten, por lo que jadean como los perros para mantenerse frescos.
Tanto los renos machos como las hembras tienen cuernos. En todas las demás especies de cérvidos, sólo los machos tienen cuernos.
Esto implica que no siempre es fácil determinar el sexo de un reno, excepto cuando llega la muda de cuernos.
Los machos pierden los suyos en el invierno, al final de la temporada de apareamiento; las hembras, en cambio, los conservan hasta la primavera o el verano, tal vez para desenterrar más comida en la nieve y nutrir a sus crías mientras están preñadas.
Ahora Papá Noel te contará algunos datos más de los renos, y también te presentará a los elegidos para jalar su trineo.
¿Te gustaron estos datos sobre los renos? ¿Has visto a un animal de estos?