Avengers Infinity War, se vale llorar
La pantalla se fue a negros y apareció la leyenda: Thanos regresará. No pude pararme de la butaca, mi cerebro no podía procesar lo que acababa de pasar, me di cuenta que dejé de...
00- Esta nota contiene spoilers –
La pantalla se fue a negros y apareció la leyenda: Thanos regresará. No pude pararme de la butaca, mi cerebro no podía procesar lo que acababa de pasar, me di cuenta que dejé de respirar por un momento y traté de nivelarme.
¡Que maravilla que una película pueda hacerte sentir tantas emociones juntas!
Tuve que verla una segunda vez (porque me gusta lastimarme, me gusta darle latigazos a mi corazón) y esta vez pude ver las cosas desde un punto de vista más frío, sin el corazón en la mano, tranquila, como Dr. Strange después de saber cómo las cosas van a fluir.
Lo primero que hay que tener en mente al entrar a ver esta película es que es el inicio del fin de la primera etapa de Marvel; que probablemente los héroes que nos han acompañado por 10 años no van a salir bien librados de esta justa, y que es la bienvenida a nuevas caras que estarán con nosotros en esta segunda etapa.
Por otro lado, les recomiendo llegar a la sala antes de lo que dice la cartelera, por que desde el primer segundo comienza la acción, justo en donde nos quedamos, a bordo de una nave con lo que queda de Asgard.
Los hermanos Russo han hecho lo que pocos directores, juntar a más de 20 de los mejores actores de Hollywood de nuestros tiempos y conseguir un equilibrio en la pantalla para que todos tengan un protagonismo homogéneo, cada uno de los personajes juega el papel que le corresponde, sin mas ni menos.
Ninguno lucha por ser el principal, están mezclados homogéneamente de tal manera que en cada uno de los actos de la historia se siente un equilibrio de interacción que jamás se había visto.
Para lograr esto, los directores tomaron la mejor decisión, invitar a directores de películas individuales y escucharlos, aprender del personaje de la voz de quien lo puso en la pantalla.
Gracias a la participación de Scott Derrickson, tenemos un Steven Strange tan atinado, frio y calculador, y por supuesto no podíamos dejar afuera el eje fundamental de la película: James Gunn era la pieza clave para lograr desenmarañar el misterio familiar entre Thanos y Gamora.
Ya sabíamos que había una relación muy tortuosa entre las hermanas y su padre, pero jamás pensamos verlo como una figura paternal, entender el conflicto social que vive el universo como plano secundario ante el descubrimiento de quien sería la clave para llevar a cabo su terrible plan.
El Universo Cinematográfico de Marvel se ha tomado su tiempo al construir cada uno de los personajes que vamos a ver en pantalla, llevamos 10 años conociendo uno a uno, su contexto, su carácter, su evolución dentro de si mismos y la consecuencia de los cambios que ha sufrido su entorno y ellos mismos.
Las cicatrices de las batallas los han llevado hasta el lugar en el que están, es por esto que 14 súper héroes compartiendo cuadro no se siente excesivo, no necesitan contar sus historias desde el principio, las conocemos perfectamente, el espacio del personaje principal queda libre para el villano que hemos visto por parte, en parpadeos, escondido detrás de cada película, esperando su momento triunfal, el hilo narrativo de esta tragedia es Thanos y su historia, su pasado y sus razones para traer equilibrio al universo.
El guión está extremadamente bien pensado no hay necesidad de volver al inicio de cada historia, asume que sabemos en donde estamos parados, la construcción de personajes no es necesaria, estos héroes son parte de nuestra vida, el eje narrativo se centra en presentar al anti héroe, un buen villano digno de este despliegue.
En la película no hay un cuadro que no estuviera pensado al 100%, no existe un segundo desperdiciado.
Te mantiene con el corazón en la mano, pero te permite respirar por momentos, con risas que te parten en dos, pero que denotan nervios al mismo tiempo, paso a paso vas dándote cuenta, que Thanos es prácticamente invencible, y cada segundo que pasa, es terreno perdido.
Cada pérdida es aterradora, te va hundiendo en la butaca, la desesperación de no poder ayudarlos, de verlos comenzar a perder, sus caras te lo dicen, van a pelear hasta el último aliento, van a destruir lo más sagrado incluyendo su propio corazón para salvar al universo, pero quizás, ni siquiera eso les sea suficiente.
El final es terrible, comienzas a darte cuenta, que esos personajes te han acompañado a lo largo de tu vida, y es donde el corazón comienza a latir más lento, mas acongojado, esto tiene que terminar en algún momento y las cosas no pintan bien.
Nada nunca me hubiera preparado para lo que pasó, que valor de los escritores y del director a lastimarnos en lo más profundo del corazón, y cerrar con una esperanza que abre una nueva puerta, NO SE VAYAN HASTA QUE TERMINE EL ROLLER DE CRÉDITOS y prepárense mentalmente para sentir muchísima angustia y salir con ella del cine.
A los que ya la vimos, no nos queda más que esperar a mayo del 2019 para saber el destino de los que están y de los que no sabemos a donde se fueron.