El Linfoma No Hodgkin (LNH) es un tipo de cáncer relacionado con mutaciones en un tipo de glóbulo blanco (linfocito B o célula B) presente en el tejido linfático del sistema inmunológico. Es más frecuente en adultos que en menores, con un incremento gradual de su incidencia a partir de los 50 años.
Si bien el tratamiento del Linfoma No Hodgkin es complejo y varía de acuerdo a la etapa y tipo de linfocito afectado existen diversas opciones de tratamiento, aunque recientemente ha destacado el uso de un anticuerpo monoclonal.
Dicho anticuerpo monoclonal, conocido como rituximab, ya cuenta con un nuevo biocomparable que provoca que las defensas naturales del sistema inmunológico ataquen y destruyan sin distinción –entre normales o malignos– a las células B, pero una vez terminado el tratamiento el organismo producirá nuevos linfocitos B normales.
Este nuevo biocomparable de Sandoz demostró mediante un proceso detallado de comparación y confirmación clínica no tener diferencias clínicas significativas en términos de pureza, seguridad y eficacia del producto con respecto al medicamento biotecnológico de referencia.
Medicamentos de esta índole ayudan a disminuir la carga económica de los tratamientos para enfermedades inmunológicas y oncológicas, lo que brinda la oportunidad para que nuevas alternativas terapéuticas se puedan seguir investigando.
Linfoma No Hodgkin en México
Este tipo de patología maligna ocupa el lugar número 11 dentro de las 20 causas de cáncer más frecuentes. La incidencia en México es de 3 a 7 casos por cada 100 mil habitantes, según el Observatorio Global de Cáncer en México.
La Organización Mundial de la Salud estima que para el 2030 los casos nuevos de cáncer (de todo tipo) en el mundo sobrepasarán los 20,000,000 anualmente.
Sin embargo, esos números podrían reducirse significativamente, ya que se calcula que entre el 30 y el por ciento de los cánceres son prevenibles mediante la adopción de hábitos saludables, vacunación, diagnósticos y tratamientos oportunos.
