Existen diversos mitos sobre el temperamento de los gatos que en muchas ocasiones no contemplan cómo es que las experiencias o la cercanía con tu mascota, pudieran propiciar algunas conductas específicas que moldearán su carácter y temperamento el resto de su vida.
Se han realizado diversas investigaciones que hablan de la susceptibilidad emocional de los gatitos durante los primeros 90 días de vida y de la importancia de alimentar su curiosidad con apapachos y muestras de cariño para fortalecer el óptimo desarrollo.
Los expertos recomiendan llevar a cabo las siguientes acciones los primero 90 días de vida para asegurarles una estimulación de las fibras sensitivas, la memoria, y la adaptación al cambio, lo que favorecerá el desarrollo de un temperamento dócil y amigable.
Durante los primeros 3 meses de vida, acarícialo constantemente del lomo a la colita para hiper-sensibilizar las fibras nerviosas y acostumbrar a tu mascota al contacto físico con los extraños.
Propicia ambientes sin hostilidad con ayuda de objetos no movibles para beneficiar su instinto tiempo-espacio y acostumbrarlo paulatinamente al cambio, pues está comprobado que la rutina estricta puede mejorar la seguridad y confianza de los gatos.
Algunos gatos jamás aprenden a ronronear, por eso es recomendable ayudarlos a desarrollar esa virtud con apapachos constantes y actividades que despierten emociones positivas durante el juego dos o más veces al día.
Otro factor esencial es alimentarlo adecuadamente para ayudar a despertar tempranamente sus instintos para que los familiarice con experiencias, y les ayude a tener un óptimo desarrollo físico. Prefiere alimentos desarrollados específicamente para este etapa.
Recuerda que es muy importante brindarles atención y cariño los primeros meses de convivencia para hacer de este mundo un lugar mejor para nuestras mascotas.
Fuente: Whiskas