Por su vulnerabilidad física, económica y social, las personas con discapacidad representan uno de los sectores más vulnerables al contagio de Coronavirus, por lo cual requieren de atenciones especiales para sobrellevar la pandemia.
“Más del 75 por ciento trabaja en la economía informal y depende de sus ingresos diarios para poder vivir. Muchos no pueden guardar la cuarentena y muchos otros ni siquiera tienen empleo. Es muy importante que, si conocemos a alguien que padece alguna discapacidad, le brindemos nuestro apoyo” puntualiza Mónica Guadalajara, directora de marketing para América Latina de Ottobock, empresa alemana que brinda soluciones de movilidad para este sector.
Y es que la vulnerabilidad de las personas con discapacidad va más allá de la salud: también pertenecen a un grupo poco privilegiado en materia laboral, social y económica.
Según el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social, el 54 por ciento de los mexicanos que sufre alguna discapacidad motriz o intelectual se encuentra en condiciones de pobreza.
La Fundación Paralife estima que el 70 por ciento de esta población no logra conseguir un empleo fijo. Y si esto no fuera poco, el Instituto Nacional de Geografía y Estadística los considera como el grupo social más discriminado del país.
En su informe ‘Es mejor hacerse invisible. Violencia familiar contra las personas con discapacidad en México”, la organización Human Rights Watch advirtió hace unas semanas que este sector es más vulnerable a sufrir violencia doméstica o abandono durante el encierro, ya que muchas de estas personas dependen de familiares, amigos o conocidos para satisfacer sus necesidades básicas, como la vivienda, la alimentación y la higiene.
Ante esta situación, la Secretaría de Bienestar presentó esta semana un Decálogo para el Apoyo y Cuidado para las Personas con Discapacidad, con el fin de eliminar las brechas de desigualdad durante esta pandemia de Covid-19.
- Mantener comunicación constante con el paciente
- Preguntarle diariamente si requiere de algún apoyo para realizar sus actividades
- Realizar actividades recreativas en familia
- Si un vecino vive solo y padece alguna discapacidad, proporcionarle tu número telefónico para que te incluya en su red de apoyo ante cualquier emergencia
- Apoyarlo a realizar las tareas fuera de casa, como comprar la despensa, medicamentos o realizar trámites bancarios o retiros de efectivo en cajeros automáticos
- Conocer a detalle su estado de salud, sus tratamientos médicos y sus procesos de rehabilitación
- Apoyarlo en el quehacer del hogar y mantener limpios sus dispositivos de movilidad (sillas de ruedas, muletas, prótesis, ortesis, andaderas, bastones)
- Apoyarlo en el cuidado de su alimentación, pues muchas personas con discapacidad padecen inmunodeficiencia
- Realizar los ajustes necesarios en su hogar para mejorar su movilidad (colocación de barandales o dejarles cerca artículos de primera necesidad)
- Darle trato preferencial en establecimientos comerciales u oficinas de gobierno
