¿Cómo combatir la apariencia de “piel de gallina” en brazos y piernas?
Aunque la queratosis pilar no se puede curar ni prevenir pero existen diversos métodos para combatirla y mejorar la apariencia de tu piel.
¿Cansada de la textura áspera y los granitos en tus brazos y piernas? La queratosis pilar, también conocida como “piel de gallina”, es una afección común que afecta a millones de personas. Si bien no tiene cura, existen estrategias para mejorar su apariencia y aliviar los síntomas.
Se caracteriza por pequeñas protuberancias ásperas en la piel, que suelen aparecer en los brazos, piernas, muslos y hasta en las nalgas.
Las protuberancias suelen ser de color carne, pero pueden parecer rojas o rosadas en los tonos de piel más claros y marrones o negras en los más oscuros. Aunque su aspecto puede ser “angustioso”, como señala la dermatóloga Amy Freeman, de Millburn, Nueva Jersey, las protuberancias causadas por la queratosis pilaris son inofensivas y suelen desaparecer por sí solas. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar brotes a lo largo de su vida.
La queratosis pilar se produce cuando la queratina se acumula y obstruye los folículos pilosos, causando pequeñas protuberancias en la piel. Se cree que puede ser causada por una mutación genética que afecta la capacidad de la piel para hidratarse de forma natural, de acuerdo a Shari Lipner, dermatóloga del Weill Cornell Medicine de Nueva York. La mutación puede aumentar la propensión a la sequedad cutánea, lo que empeora la queratosis pilar.
Se calcula que aproximadamente el 40% de los adultos y el 50-80% de los adolescentes padecen queratosis pilaris, aunque los dermatólogos no saben exactamente por qué algunas personas desarrollan esta enfermedad.
También se cree que las personas que padecen eccema, diabetes o tienen parientes cercanos con queratosis pilaris son más propensas a desarrollarla, explicó Lipner. La Academia Americana de Dermatología (AAD) afirma que lo mismo ocurre con las personas asmáticas, alérgicas o con sobrepeso. La dermatóloga Leslie Baumann, de Miami, explica que la sequedad cutánea puede exacerbar la queratosis pilar, lo que significa que podrías experimentar más brotes durante el invierno o si vives en un clima seco.
La prevención de la piel seca es fundamental para controlar la queratosis pilar y mejorar su apariencia. Los productos con emolientes (humectantes) y agentes queratolíticos (como ácido salicílico, ácido láctico o urea) son los más eficaces, según Freeman.
Una opción conveniente es elegir una loción hidratante de venta libre que contenga un agente queratolítico, dijo Lipner.
La AAD también sugiere utilizar productos con otros queratolíticos como el ácido glicólico y el retinol. Freeman afirmó que estos ingredientes ayudan a suavizar los granitos y a disminuir el enrojecimiento. Lipner añadió que serán más eficaces si se aplican justo después de la ducha, cuando la piel aún está húmeda. Esto sella la humedad de la piel.
Lipner sugiere evitar cualquier cosa que pueda irritar la piel, como usar un exfoliante corporal abrasivo o rascarse o hurgarse los granitos. Sin embargo, la AAD dice que puedes usar suavemente una esponja vegetal o una toallita para eliminar las células muertas. También es mejor evitar los productos con fragancias y aceites, que pueden irritar la piel y obstruir aún más los poros, dijo.
De acuerdo con Freeman, en momentos de brote de la condición, se recomienda aplicar una crema hidratante con un agente queratolítico varias veces al día durante unos meses. Una vez que la situación mejore, se puede disminuir la frecuencia a un par de veces por semana. Sin embargo, es importante mantener la piel hidratada diariamente, aunque ya no sea necesario el uso del agente queratolítico una vez que se ha controlado el brote.
Algunos individuos que la padecen de niños pueden descubrir que desaparece cuando se hacen mayores. Sin embargo, también hay quienes la padecen toda la vida. “Aun así, puede haber periodos de la vida en los que la queratosis está tan calmada y las protuberancias son tan pequeñas y tenues que es casi como si no estuviera ahí”, observó Lipner. No obstante, hay ciertas medidas que puedes tomar para minimizar la probabilidad de reagudizaciones, como:
Si tienes síntomas graves de queratosis pilar, como protuberancias muy grandes, enrojecimiento intenso o picazón, es importante que consultes a un médico o dermatólogo. El médico puede ayudarte a determinar si la queratosis pilar es la causa de tus síntomas y recomendarte el tratamiento adecuado. Lipner mencionó que el eccema y la psoriasis pueden parecer similares a la queratosis pilar. Estas afecciones pueden provocar picor, inflamación, agrietamiento de la piel e infecciones, y requieren sus propios tratamientos distintos.
Con información de Infobae y The New York Times