Cómo dejar de estresarse por pequeños fallos de memoria
Los pequeños fallos de memoria pueden ser normales, pero el estrés que generan no lo es.
Todos hemos experimentado esos “momentos de la tercera edad”: olvidar brevemente el nombre de alguien, no recordar dónde dejamos las llaves o entrar a una habitación sin saber por qué. Aunque estos fallos de memoria pueden ser normales, el estrés que generan puede ser agotador y, paradójicamente, empeorar nuestra claridad mental. ¿Cómo podemos manejar esta situación sin caer en la ansiedad?
[Te puede interesar: Niebla cerebral ¿qué es y 6 posibles causas?]
Según la Dra. Stephanie Buss, neuróloga cognitiva y directora de la Clínica de Trastornos de la Memoria A2Z del Centro Médico Beth Israel Deaconess, afiliado a Harvard, el estrés desvía nuestra atención de las tareas que estamos realizando, lo que dificulta la concentración y hace que los lapsus de memoria sean más notorios.
“Es natural preocuparse por la pérdida de memoria, especialmente si hemos visto a familiares o amigos enfrentar diagnósticos de deterioro cognitivo o demencia”, explica el Dr. Buss. Sin embargo, no todos los olvidos son señal de un problema grave.
Los pequeños lapsus de memoria, como olvidar brevemente un nombre o por qué entramos a una habitación, suelen ser normales con la edad. Sin embargo, hay señales que podrían indicar un problema más serio:
Si experimentas estos síntomas, es importante buscar evaluación médica.
[Quizás te interese: ¿Qué le pasa a tu cerebro cuando te enfermas? La ciencia te lo explica]
“No dude en plantearle sus inquietudes a su médico”, aconseja el Dr. Buss. “Una evaluación rápida de la memoria y una conversación sobre factores de estilo de vida pueden ser suficientes para mejorar su claridad mental”.
Los pequeños fallos de memoria pueden ser normales, pero el estrés que generan no lo es. Adoptar un estilo de vida saludable, mantenerse activo social y mentalmente, y practicar técnicas de relajación son claves para reducir la ansiedad y mantener una mente clara. Si los olvidos persisten o interfieren con tu vida diaria, consulta a un profesional de la salud para obtener orientación personalizada.
Con información de Harvard Health Publishing