Una mascota vive en nuestro corazón, y el duelo por su pérdida es una experiencia triste que tardarás en superar. Te decimos cómo hacerlo más llevadero.
Si ya sabes que la salud de tu mascota se está deteriorando, tal vez te convenga elaborar un plan. Cuando mi perra Seven empezó con más y más problemas físicos, nos mantuvimos en contacto con el veterinario. Llegó un punto en el que los analgésicos dejaron de funcionar y entonces lo supimos: había llegado la hora de decir adiós.
Como el veterinario conocía muy bien nuestra situación, logramos que nos hiciera un espacio en su ocupada agenda de inmediato.
Cuando me di cuenta de que la vida de Seven estaba por terminar, la llevé a su parque favorito, dejé que comiera unas cuantas cucharadas de helado y la mantuve cómoda.
Consiente a tu mascota con las actividades y alimentos que más disfruta. Esto puede ayudarte a cerrar el ciclo.
Sé consciente de que el duelo por la pérdida de una mascota toma tiempo: pueden ser semanas, meses o incluso años. En ocasiones extrañarás el saludo de tu mascota al llegar a casa; otras veces, la angustia de haber olvidado su caminata nocturna te despertará a media noche. Hasta podrías hablar de ella como si aún viviera.
Todos estos pensamientos y conductas son perfectamente normales y cesarán con el tiempo.
Según el sitio web Psych Central, la partida de una mascota amada deja varios vacíos de manera simultánea. Las mascotas ofrecen amor incondicional y suelen ser nuestros amigos, confidentes, compañeros o paños de lágrimas. Permítete experimentar las miles de emociones que sobrevienen con su pérdida. No te juzgues. Si en algún punto te sientes rebasado por el dolor, acude con un tanatólogo.
El dolor y la tristeza son reales y existen personas que pueden brindarte su apoyo en caso de que lo requieras.
Amigos, vecinos, colegas y conocidos tuyos podrían solidarizarse contigo por la muerte de tu animal de compañía. Hablar del dolor con otros puede ayudarte a validar la emoción, lo cual suele ser muy terapéutico.
Al principio puede parecer un acto desleal retirar las pertenencias de tu mascota; no obstante, poner manos a la obra y avanzar poco a poco será de utilidad para ti, para tu familia y para tus otras mascotas durante esta transición de vida. Si aún no estás listo para hacerlo, te sugerimos reunir todos sus juguetes y la correa en un área de tu hogar.
Unas cuantas semanas más tarde, separa lo que pueda reutilizarse o donarse, y deshazte del resto.
Hay muchas cosas que puedes hacer para honrar los momentos felices que pasaste junto a tu mascota. Puedes crear un álbum de recuerdos, plantar un árbol, organizar una ceremonia conmemorativa o hacer un donativo en su nombre a un grupo de rescate animal u otra asociación en pro de los animales.
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