La presión sanguínea es la presión o fuerza que la sangre ejerce contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre a través del cuerpo. Hipertensión significa que la presión de las arterias está por encima de lo normal.
Las cifras de la presión arterial se dan con dos números y se expresan en milímetros de mercurio (mmHg) que es una unidad de presión.
El número superior se denomina presión sistólica y el inferior presión arterial diastólica.
- La presión arterial normal es menor a 120/80
- La hipertensión es una presión arterial de 140/90 mmHg o mayor, la mayoría de las veces
- En la etapa 1 la presión sistólica está entre 140-159 mmHg y la presión diastólica de 90 a 99 mmHg
- En la etapa 2 la presión es mayor a 160/100 mmHg
- Si los valores de presión arterial están entre 120/80 y 140/90 se denomina pre-hipertensión.
Los vasos sanguíneos se vuelven más rígidos conforme avanza la edad y en algunos casos cuando esto sucede la presión arterial se eleva.
La hipertensión arterial aumenta la probabilidad de sufrir una embolia cerebral, un infarto en el corazón, desarrollar insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal y muerte temprana.
Causas
Los factores que aumentan la probabilidad de sufrir hipertensión arterial son:
- La obesidad
- La personalidad estresada o ansiosa
- El consumo de más de una copa de alcohol al día en las mujeres o más de dos en los hombres
- Un consumo alto de sal en los alimentos
- La historia de familiares con hipertensión arterial
- El hábito de fumar
Cuando se padece diabetes
En la mayoría de los pacientes no se sabe la causa de la hipertensión y se le conoce como hipertensión arterial primaria o esencial. Por el contrario, en cerca del 5 por ciento de los casos la hipertensión es provocada por otra enfermedad o medicamento y se le denomina hipertensión secundaria.
Las causas más frecuentes de hipertensión secundaria son:
- Insuficiencia renal crónica
- Enfermedades de las glándulas suprarrenales (feocromocitoma o síndrome de Cushing)
- Hiperparatiroidismo
- Estrechamiento de la arteria renal (estenosis de la arteria renal)
- Embarazo (pre-eclampsia)
- Medicamentos: anticonceptivos orales, algunos antigripales y medicamentos para la migraña
Síntomas
En la mayoría de los pacientes no hay síntomas durante largos periodos de tiempo y puede ser detectada de manera incidental.
Debido a que no hay ningún síntoma, las personas pueden desarrollar enfermedades cardiacas y renales sin saber que tienen hipertensión arterial.
En casos en los que la hipertensión provoca dolor de cabeza intenso, acompañado de náuseas o vómito, confusión, alteraciones en la visión o sangrado nasal se le llama hipertensión maligna y es una forma en extremo peligrosa de la enfermedad.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es reducir la presión arterial y con esto disminuir el riesgo de complicaciones.
Un estilo de vida saludable ayuda a controlar la presión arterial aunado a los medicamentos:
- Hacer ejercicio regularmente (30 minutos por día)
- Dejar de fumar
- Reducir el consumo de alcohol
- Reducir la ingesta de sal
- Mantener una alimentación saludable
- Reducir el estrés.
- Mantener un peso corporal adecuado
Las personas con hipertensión arterial deberán tener citas programadas regularmente con el médico cardiólogo. Incluso si no le han diagnosticado hipertensión arterial, es importante realizar una revisión de la presión arterial cada año.
