¿Cómo se originan las dunas?
Para que se formen las dunas se necesitan dos condiciones: abundancia de arena y un viento persistente. Su forma varía mucho, dependiendo de la arena.
Para que se formen las dunas se necesitan dos condiciones: abundancia de arena y un viento persistente. Su forma varía mucho, dependiendo de la naturaleza de la arena, la disposición del suelo y la fuerza del viento.
El tipo más común ?las llamadas dunas transversales? forma largos promontorios perpendiculares al paso de los vientos prevalentes, como las olas en el mar. (Las dunas de la mayor parte de las costas son dunas transversales.) Las dunas seif (de la palabra árabe que significa espada) son por el contrario paralelas a la dirección del viento dominante. Levantados por vientos muy fuertes, estos montículos miden con frecuencia muchos kilómetros de longitud y hasta 90 metros de altura.
Los espacios barridos por el viento que quedan desnudos entre las hileras de dunas seif han sido usados tradicionalmente como caminos por los pueblos nómadas del desierto.
Las dunas llamadas barcanes tienen forma de media luna con los cuernos siguiendo la dirección del viento. Se encuentran donde la arena es relativamente escasa y se desplazan sobre superficies de grava o incluso de roca desnuda a una velocidad que llega a 30 metros al año; por eso figuran entre las dunas más activas.
Algunas dunas son elevaciones montañosas en forma de estrella de hasta 300 metros de altura. Han sido creadas por vientos encontrados que soplan alternativamente desde diversos puntos, por lo que estas dunas tienden a mantenerse donde se formaron.
Si a tres geógrafos se les pidiera que definieran los límites exactos del Ártico, tal vez dieran tres respuestas distintas. Algunos dicen que el Ártico no es más que la región circunscrita por el círculo polar ártico, línea imaginaria de la superficie de la Tierra al norte de la cual el Sol no se pone en el día más largo del año ni asoma por el horizonte durante el más corto.
Otros sitúan el límite en la línea a lo largo de la cual la temperatura media del verano no excede los 10 °C, demarcación que en algunos lugares desciende bastante más al sur del círculo polar ártico. Hay incluso quien sostiene que el Artico se extiende hacia el norte desde la zona donde ya no crecen árboles.
Si bien sus límites son controvertidos, el Ártico en sí es incuestionablemente único. Incluye un mar cubierto de hielo, casi interior; los bordes septentrionales de Eurasia y América del Norte; además de Groenlandia y otras islas. El dato más sobresaliente en esta región es su clima dominado por la larga oscuridad de su invierno y el sol de medianoche de su verano.
De hecho, el breve verano ártico puede ser sorprendentemente benigno en algunas zonas donde la capa de nieve se funde hasta desaparecer y las temperaturas en el mes de julio pueden superar los 10 °C. Pero el invierno es largo y ciertamente frío: las temperaturas de enero alcanzan un promedio de 35 °C en la mayor parte de la zona.