Este padecimiento afecta a cerca del 5 por ciento de niños que van de los 7 a los 9 años, principalmente, en los varones y se piensa que tiene una raíz genética.
Es muy importante brindar una atención temprana que apoye efectivamente sus necesidades, pues de esta manera se podrá estimular de forma adecuada su atención.
“La dislexia infantil afecta a un 5 por ciento de los niños de 7 a 9 años, sobre todo, a los varones y se cree que tiene una base genética.”
La finalidad es adaptar la forma de educarlos y enseñar dependiendo las características especiales que presenten, haciendo posible la creación de aprendizajes.
Recomendaciones o sugerencias para emplear en el hogar frente a la dislexia
- Ejercicios de conciencia fonológica. Es importante estimular la conciencia fonológica. Es decir, ayudarles a que distinguen las sílabas y sus sonidos. En este sentido y desde el hogar se puede estimular al niño realizando rimas con su propio nombre. Por ejemplo, si el niño se llama Tomás, se le puede estimular con la frase “A Tomás le gusta usar antifaz”.
- Realizar ejercicios para la atención, la memoria y el vocabulario. Para ello podemos utilizar todas las situaciones cotidianas. Como entrenamiento, podemos recordarles el nombre de las calles, repitiendo una y otra vez nombres de familiares y amigos, realizando juegos como el puzzle, memo tex, barajas, etc, jugar a observar las diferencias entre 2 imágenes.
- Transmitirles confianza respecto a los profesionales que intervienen. No sólo nosotros como padres debemos confiar en lo que realizan los profesionales durante las sesiones con nuestros hijos, sino que también debemos transmitir este respeto y confianza a los niños con dislexia para que ellos logren una mayor apertura en el consultorio.
- Proporcionales libros. Es vital que el niño con dislexia comprenda la importancia y reciba el entusiasmo de la lectura. Para ello también puede ser de más utilidad los juegos online o algunas lecturas que se sean de su interés.Gracias a estos consejos, puede hacer que su hijo mejore sus habilidades en los estudios y en su vida cotidiana, desarrollándose así su cerebro.
¿Cómo trabajar el lenguaje y escritura con niños que padecen Dislexia?
- Pídele que busque una letra en un texto escrito, cuento, revista, periódico. Puedes hacerlo como un juego, por ejemplo vamos a buscar todas las letras “B” del texto. De este modo el niño, al ver, entrena y estimula la discriminación visual entre la letra escogida y las demás letras.
- Muéstrale palabras parecidas que solo se diferencien en una letra. Pídele que señale la letra en la que se diferencian. (Ejemplo: pato-palo; maleta-maceta; caballo-cabello, etc.)
- Juega a sustituir alguna sílaba de la palabra por otra parecida, para que pueda comprobar la diferencia entre los sonidos. Así estimulamos la discriminación fonética. (por ejemplo la palabra pelota, le pedimos que sustituya la sílaba ta por pa y pronuncie pelopa).
- Contar las sílabas y las letras de las palabras. Así centramos su atención en las letras y en sus sonidos. Al contar las sílabas le estimulamos para que se centre en los sonidos.
- Muéstrale, al niño, sílabas separadas y pídele que una las sílabas formando palabras. De esta manera estimulamos la discriminación auditiva y visual y su capacidad de creación con los caracteres.
- También puedes eliminar una sílaba de la palabra y pídele que busque la sílaba que falta.
- Enséñale una sílaba y pídele que te indique frases que contengan esa sílaba. Por ejemplo la sílaba –bra, puede formar palabras como brazo, culebra, abrazo, etc. De este modo estimula su capacidad de identificar sílabas y formar palabras con ellas.
- Juega a las cadenas de palabras. Se trata de decir una palabra y la otra persona ha de decir una nueva palabra que comience por la última sílaba de aquella palabra. (por ejemplo: maleta-taza-zapato-topo-poco-comida-dado, etcétera). A través de un juego estimulamos su discriminación de manera entretenida.
- Emplea pasatiempos clásicos, como las sopas de letras o los crucigramas. Son una forma entretenida de entrenar la discriminación visual de los caracteres, mientras el niño disfruta de ver la información.
El niño con dislexia es capaz de aprender a leer, pero lo hará de una manera diferente, con un método distinto y un tratamiento especial. Es importante que los padres que tengan un hijo con dislexia se pongan en manos de un profesional para que les pueda orientar de la mejor manera de ayudar a su hijo.
FUENTE: DIFAM, Understood, Dislecan