Yo leía la revista Selecciones en la casa de mis abuelos desde que era niña, porque mi abuelo era suscriptor y siempre me ha gustado mucho la lectura. Después, cuando me casé, mi esposo compró una a mi nombre.
Esto fue hace 52 años; llevo 56 de casada. Me gusta la revista Selecciones porque es muy cómoda. Siempre llevo una conmigo para abrirla apenas puedo.
Lo curioso es que, al parecer, me gané el premio por comprar los Libros Condensados. Tengo 75 volúmenes en un librero, pero me dicen que ya superan los 100 tomos, así que los más antiguos deben estar en otro mueble.
Cuando me llamaron para decirme que había ganado el Gran Sorteo, pensé que me estaban bromeando. No lo creí y empecé a hacer preguntas.
Cuando me respondieron con varios de mis datos personales, me preocupé e incluso dije que no tenía correo electrónico (y más porque, por seguridad, no debemos compartir nuestros datos personales).
Me recomendaron que entrara al sitio web de Selecciones para confirmarlo, pero preferí llamar a otro de los teléfonos que aparecían allí para preguntar si acababan de tener un sorteo. Aunque me respondieron con el día y la hora que me habían dicho, nunca me hice ilusiones: lo creería hasta que recibiera el cheque.
Como no terminaba de creer que era la ganadora, aún no tenía planes para el dinero. En el camino a las oficinas de Selecciones pensé que si no era cierto, al menos podríamos aprovechar para comer por la zona. ¡Pero estoy aquí y me siento muy contenta!
Recomiendo a los otros suscriptores que sigan comprando Selecciones. Es una buena revista, y los Libros Condensados lo son más. Si reciben los boletos para ganar un premio, tengan esperanza. ¡Sí es cierto, y sí pueden ganarlo!
Tuve mi primer contacto con la revista Selecciones cuando tenía alrededor de 10 años. Vivía en Chihuahua, y había una tienda de libros de segunda. Yo juntaba los 15 o 20 centavos que necesitaba para comprarla.
Es la única revista que sigo leyendo desde entonces. Si mi memoria no me es infiel, mi primera suscripción fue hace 45 años.
De la revista me gustan mucho las historias y experiencias vividas por algunas personas. También me entretengo bastante con las anécdotas de las secciones de humor.
En términos generales, el contenido de Selecciones es muy variado e interesante, ya sean temas médicos o de opinión pública. La variedad del contenido es lo que la vuelve interesante y disfrutable.
Tuvieron que batallar para localizarme y decirme que había ganado el premio, pues un dígito del número telefónico que tenían registrado no coincidía. Así que contactaron a un conocido de la revista en Mexicali para que lo encontrara, supongo que a través del directorio. Primero se comunicaron con mi hija, porque yo estaba trabajando.
Me causó una inmensa felicidad saber que había ganado el premio. Pienso utilizarlo para apoyar algunas necesidades de mi familia, en especial de mis hijas.
A los demás suscriptores les recomiendo que sigan disfrutando la revista y todas las promociones que se hacen a través de ella. No pierdan la esperanza de ganar. Todos tenemos la posibilidad, aunque ya dependa de la suerte de cada uno. Pero, definitivamente, es cierto que los premios se otorgan: doy fe de ello.
Mis papás siempre fueron lectores asiduos de Selecciones: tenemos toda una biblioteca de la revista. Yo también la leo; los artículos me parecen muy oportunos y variados. Además, es muy versátil para cubrir diferentes gustos.
Mi papá solía participar en el Sorteo todos los años, porque quería que yo me ganara algo. Aunque él falleció el 5 de enero, alcanzó a participar en la edición más reciente.
Cada vez que llegaba la revista se emocionaba, y le encantaba comprar productos. Es más, alguna vez hasta adquirimos unas maletas con ruedas y a él le fascinaba que yo pudiera usarlas. Mi papá se llamaba Salvador López Ruiz, y era profesor de la de la Preparatoria número 6 de la UNAM.
Cuando telefonearon a mi casa de la revista, dijeron que sabían que mi papá había fallecido, pero que existía la posibilidad de que yo fuera la beneficiaria. Por suerte, mis papás siempre fueron muy ordenados y guardaban toda la documentación, así que teníamos todos los papeles necesarios para que me pudieran entregar el premio.
Lo que les digo a otros suscriptores es que no duden de Selecciones. Siempre traten de participar y no pierdan la fe en ganar, porque muchos lo hacen aunque ya pasen de cierta edad. Mi papá luchó mucho para que esto ocurriera. Ahora puedo imaginarlo chocando su mano conmigo mientras me dice “¡Lo hicimos!”.
La primera suscripción a Selecciones que llegó a casa fue de mi papá. Luego, mi esposo compró una y cuando falleció la puse a mi nombre. Nunca la hemos cancelado porque siempre ha sido parte de mi vida.
Me gustan todos los contenidos: me interesan los artículos serios y me divierten las secciones de humor. Prefiero Selecciones porque hay revistas que, cuando las ves, realmente no tienen nada positivo: sólo chismes sobre moda y de quién se casó con quién, cosas que la verdad no son importantes.
No sólo he comprado la revista, también compro los Libros Condensados y muchos libros sobre cocina, para tejer y hasta para cuidar el jardín. Me he ganado varios de los regalos que ofrecen, pero nunca nada de este tamaño.
Cuando me llamaron para avisarme que había ganado el premio, creí que me estaban toman-do el pelo. Hay mucha gente en Chihuahua que te llama para molestarte, bromearte, ver qué te puede sacar, o incluso para asustarte. Lo creí hasta que me dieron los números premiados y vi que coincidían con los que yo tenía.
Mi premio, ya en el banco, lo usaré para lo que se necesite. Soy una persona de la tercera edad, y en esta etapa es muy difícil tener ingresos adicionales. Aunque sigo trabajando todos los días, decidí ahorrar el dinero. Así podré solventar mis gastos.
Mi esposo fue el primero en suscribirse a Selecciones cuando todavía vivíamos en Ensenada. Tengo una colección de Libros Condensados que él compró.
Cuando falleció, hace 20 años, yo seguí suscrita. No he dejado de comprar sus productos, incluyendo un juego de collar con aretes.
La revista Selecciones me entretiene mucho. Tiene artículos muy interesantes, y la edición del mes de junio de 2017 me gustó bastante porque incluye recomendaciones sobre la presión arterial, muy útiles para las personas mayores como yo.
Yo tenía un mes fuera de la Ciudad de México cuando me llamaron para avisarme que había ganado este premio. Estaba en Irapuato con una de mis hijas. Mi otra hija recibió la llamada y me habló para que volviera.
Mi hija, en Irapuato, no podía traerme, así que fueron por mí. Y aquí estoy, emocionada. No tengo planes para el dinero; empezaré usándolo para pagar cuentas. Como dice el
refrán, Dios aprieta, pero ahora veo que no ahorca.
A los lectores de Selecciones les recomiendo que tengan la confianza de saber que están leyendo una revista completa, con muchas secciones diferentes. Nos hace reír, y la sección “Enriquece tu vocabulario” nos recuerda que podemos decir una misma palabra de distintas formas. ¡Además, la suscripción está a muy buen precio!
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