En japonés ‘matcha’ significa ‘té en polvo’ y es parte fundamental en la ceremonia de té en esa nación. La cada vez más famosa bebida procede de las mejores hojas de té verde molidas.
Antes de ser cosechadas, las plantas de té son mantenidas bajo sombra. Ese proceso aumenta el nivel de antioxidantes como la L- theatina y la clorofila, los compuestos químicos principales detrás de los beneficios del té matcha.
La L-theatina es un aminoácido que reduce el estrés, relaja y mejora la memoria así como la capacidad de aprendizaje, aumenta el nivel de producción ácido gamma-aminobutírico (GABA) que es un calmante natural y colabora, en mancuerna con la dopamina, en la producción de placer.
Este té tiene múltiples propiedades, respaldas científicamente:
- Fortalece el sistema inmunitario
- Reduce el estrés
- Estimula la mente
- Relaja el cuerpo
- Ayuda en la prevención de cáncer, infecciones y caries
- Mantiene las arterias sanas
- Controla la hipertensión
- Disminuye los niveles de azúcar en sangre
- Controla la diabetes
- Previene la fibrosis hepática
- Mejora el aspecto de la piel y de las uñas
- Beneficia la quema de grasa porque aumenta la termogénesis
- Sacia el hambre
- Apaga la sed de forma natural
Existen múltiples formas de prepararlo, pero María Cervantes, health coach y especialista en salud digestiva, explica una receta fácil y deliciosa:
Matcha Latte (1 taza)
Ingredientes
- 1 o 2 cucharaditas de matcha en polvo
- 1 cucharada de miel de maple
- 1 cucharada de agua caliente
- ¾ de taza de leche de coco sin azúcar
- ¾ de taza de leche de almendras sin azúcar
Preparación
- Mezcla en una taza el matcha, endulzante y el agua caliente con un mezclador especial de matcha o con un globo para que se diluya muy bien. Calienta y espuma la leche e incorpora a la taza.
- También puedes añadirlo a jugo, leche y yogurt y usarlo como ingrediente de platillos o postres.
- Se recomienda consumirlo diariamente y con una porción en la mañana estará perfecto.
¡Aprovecha todas las bondades de este té!