Consejos para mantener frescas las verduras de hoja verde
Con algunas reglas simples puedes mantener tus ensaladas frescas y seguras para comer. Solo recuerda usar tus sentidos y, en caso de duda, tíralo o conviértelo en abono.
Todos sabemos que una ensalada fresca y crujiente puede ser un complemento saludable y delicioso para nuestras comidas. Además de que nos aportan vitaminas, minerales y fibra. Pero, ¿qué sucede cuando esas verduras de hoja verde se vuelven viscosos?
Desde la rúcula y la col rizada hasta la lechuga romana y las espinacas, las verduras de hojas verdes tienden a tener la vida útil más corta de todas las verduras.
Las bacterias viven naturalmente en las verduras. Cuando se combinan con el aire y la humedad, estas verduras se descomponen más rápido, lo que provoca decoloración, malos olores y hojas viscosas.
“Hay una ventana muy pequeña entre las verduras de hojas verdes marchitas y podridas, por lo que no vale la pena correr el riesgo”, de acuerdo a Amanda Spina, nutricionista. “Cuanto más cerca esté el producto de pudrirse, más tiempo tendrán las bacterias dañinas para multiplicarse”.
Si bien un trozo perdido de lechuga viscosa probablemente no sea un gran problema para la mayoría de las personas, no debería ser un hábito cotidiano. Esto también se aplica a otras verduras y frutas.
Retira y desecha las hojas viscosas, mohosas o en mal estado tan pronto como las notes. Esto ayudará a reducir la cantidad de humedad y gases producidos.
Si más de unas pocas hojas están viscosas o hay mal olor, desecha todo el paquete, la bolsa o la cabeza. Es mejor estar seguro que enfermo.
“A veces las hojas marchitas se pueden revivir sumergiéndolas en agua helada y secándolas, pero deben usarse inmediatamente”, dijo Spina. “Una vez que las verduras estén viscosas, es mejor convertirlas en abono”.
Pasos que puede seguir para reducir el riesgo de viscosidad y mantener frescas las verduras de hojas verdes por más tiempo de acuerdo a la nutricionista.
Si no vas a consumir las verduras de hoja verde de inmediato, puedes congelarlas. Para congelar verduras de hoja verde, lava, seca y corta las hojas. Luego, colócalas en una bolsa o recipiente hermético y al congelador.
Con información de Banner Health