Caminar 10,000 pasos al día se ha convertido en un objetivo de acondicionamiento físico popular. Estos son solo algunos de los beneficios para la salud que experimentarás una vez que comiences a moverse más.
Caminar 10,000 pasos al día se ha convertido en un objetivo de acondicionamiento físico popular. Aunque ciertamente no es el final de la actividad física, las investigaciones han demostrado que cuantos más pasos des en un día, mejor.
Tratar de caminar 10,000 pasos al día (o cualquier número que represente un desafío en función de tu nivel de actividad actual) es una excelente manera de motivarte para moverte más e interrumpir el tiempo que pasa sentado.
Como resultado, puede tener un impacto tremendo en casi todas las partes de tu cuerpo.
La actividad física regular ayuda a aumentar la cantidad de sangre oxigenada que se envía a los músculos; cuanto más en forma estés, más fácilmente sucederá y podrás ejercitarte más fuerte.
Moverse todos los días ayuda a fortalecer los pulmones y los músculos circundantes. A medida que aumentas la tasa y el volumen de oxígeno que inhalas, también lo hace la capacidad de tu cuerpo para usarlo de manera eficiente (una medida conocida como su “VO2 máx.”).
Cuanto más en forma estés, mayor será tu VO2 máx.
La actividad física estimula la liberación de hormonas para sentirse bien (como las endorfinas) y también aumenta el flujo sanguíneo al cerebro, lo que resulta en una mejor función cognitiva.
No solo te sientes menos estresado y ansioso cuando te mueves con regularidad, sino que también estás trabajando para mejorar tu creatividad, productividad y concentración.
La actividad física (especialmente los ejercicios con pesas) ejerce una presión adicional sobre los huesos, lo que ayuda a mejorar tu densidad y reduce el riesgo de osteoporosis en el futuro.
Caminar, y mejor aún correr, son buenos lugares para comenzar.
La actividad física diaria provoca pequeños desgarros en los músculos, lo que a su vez conduce a un mayor crecimiento y fuerza muscular.
Cuando estás físicamente activo, tus músculos utilizan más glucosa en el torrente sanguíneo. La actividad también ayuda a que la insulina en tu cuerpo funcione de manera más eficiente.
La actividad física es importante para prevenir y controlar la presión arterial alta. Realizar tus pasos diarios puede ayudar a reducir la rigidez de sus vasos, permitiendo que la sangre fluya con mayor libertad. Si tu presión arterial es alta, evita estos alimentos.
La actividad física ayuda a mejorar tu flexibilidad, lo que a su vez, ayuda a mejorar la postura, reduce el riesgo de lesiones y también disminuye la cantidad de dolores y molestias que sientes durante el día.
La actividad física es una excelente manera de aumentar los niveles de energía y combatir la fatiga, ya que fortalece el corazón y mejora la circulación.
La actividad física desencadena la liberación de neurotransmisores clave como endorfinas, serotonina y dopamina, todos los cuales juegan un papel clave en el control del estado de ánimo.
Tomado de Reader’s Digest 10 Things That Happen to Your Body When You Start Walking 10,000 Steps a Day
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