Cosas que todos quisimos hacer cuando éramos niños
¿Y tú? ¿Qué sueños de la infancia cumpliste o aún te gustaría realizar?
La infancia es un período mágico lleno de sueños, aventuras y anhelos. En esa etapa de la vida, el mundo se presenta como un lienzo en blanco, lleno de posibilidades infinitas por explorar. Hoy, te invitamos a realizar un viaje en el tiempo para recordar 10 cosas que todos quisimos hacer cuando éramos niños.
Un recorrido por esos sueños compartidos que nos unían y que, sin duda, marcaron nuestra forma de ver el mundo.
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¿Quién no soñó con ser Batman, Wonder Woman o el Power Ranger Rojo? o quizás ser un valiente caballero, una poderosa maga o una intrépida exploradora? La imaginación de los niños no tiene límites, y gracias a ella podíamos transformarnos en cualquier personaje que nos inspirara.
Desde las profundidades de un bosque encantado hasta las lejanas galaxias, el universo era un lugar lleno de misterios y aventuras por descubrir. Cada rincón de nuestro entorno se convertía en un portal a un mundo nuevo y emocionante.
Viajar a Narnia a través de un armario, descubrir la isla del Tesoro o vivir aventuras con Indiana Jones eran anhelos comunes.
Soñábamos con volar por los aires, controlar los elementos o leer la mente. La magia nos permitía superar cualquier obstáculo y hacer realidad nuestros deseos más increíbles.
La última muñeca de moda, el carro de control remoto más veloz el peluche más suave o el famosísimo microhornito (ahora como adultos lo hemos sustituido por la freidora de aire) eran objetos de deseo inigualables.
La vida era simple y llena de juegos en el parque, maratones de videojuegos o tardes creando con bloques de construcción. Las vacaciones eran eternas y llenas de aventuras, sin la presión de tareas o exámenes.
Pasteles de cumpleaños, helados en verano y golosinas en el recreo eran placeres que nos hacían salivar.
Ver películas de terror a escondidas o simplemente disfrutar de la noche sin responsabilidades era una gran emoción.
Un dispositivo que nos permitiera volar, una máquina del tiempo para viajar al pasado o una cura para todas las enfermedades… La creatividad de los niños no tenía límites y soñábamos con inventar algo que cambiara el mundo.
Soñábamos con ser los mejores deportistas, los más inteligentes de la clase o los artistas más talentosos. Ya fuera por nuestras habilidades musicales, deportivas o artísticas, todos soñábamos con alcanzar la fama y ser reconocidos por nuestro talento. Imaginábamos multitudes aplaudiendo nuestras hazañas y nuestro nombre en las luces de neón.
Pensábamos que ser mayores nos daría libertad, independencia y la posibilidad de cumplir todos nuestros sueños.
Recuerda que, aunque crezcamos, nunca debemos perder la capacidad de soñar y perseguir nuestros anhelos. ¡El mundo sigue lleno de posibilidades por descubrir!
Bonus: ¿Recuerdas algún otro sueño o anhelo que tenías de niño? ¡Compártelo en los comentarios!