Al no existir una cura contra la alergia al cacahuate, expertos han diseñado un parche cutáneo que ha dado resultados prometedores en los niños.
Como sabes y sino aquí te decimos, las personas alérgicas al cacahuate pueden experimentar síntomas leves como picazón, enrojecimiento o inflamación de la piel, así como síntomas más graves como dificultad para respirar, hinchazón de los labios, lengua o garganta, náuseas, vómitos, diarrea, mareos o desmayos.
En casos extremos, la alergia al cacahuate puede desencadenar una reacción alérgica grave conocida como anafilaxis, que es potencialmente mortal y requiere atención médica de emergencia.
La alergia al cacahuate es una reacción del sistema inmunológico a las proteínas presentes en el cacahuate. Incluso una pequeña cantidad de cacahuate o trazas de cacahuate en alimentos o productos puede desencadenar una reacción alérgica en las personas sensibles.
Urticaria, conjuntivitis o dificultades respiratorias son también parte de los problemas que se pueden experimentar.
Es por eso que se dice que el horizonte se ve optimista con los resultados del estudio en fase 3 obtenidos por Viaskin, un parche en la piel desarrollado por la empresa biotecnológica francesa DVB Technologies.
Los efectos detectados en fases anteriores ya habían resultado prometedores. Ahora las nuevas pruebas muestran que el tratamiento podría ser efectivo en niños pequeños con alergias al cacahuete potencialmente mortales.
Para el ensayo participaron 362 niños de 1 a 3 años de edad, que fueron asignados aleatoriamente a llevar el parche de cacahuete o uno placebo (inactivo) todos los días durante un año. El 67% de los que recibieron el tratamiento mostraron una reducción significativa de su sensibilidad en comparación con el 33% de los niños del grupo placebo.Pudieron comer el equivalente de uno a 4 cacahuetes sin sufrir una reacción alérgica.
Esto puede parecer escaso, pero en realidad ese nivel de tolerancia es bastante significativo, de acuerdo a los investigadores.
El parche es una forma de inmunoterapia, de manera que actúa exponiendo a los pequeños alérgicos a pequeñas cantidades de proteína de cacahuete a lo largo del tiempo para hacer que el sistema inmunitario la tolere mejor. La ventaja frente a los tratamientos orales, según los creadores, es que al servirse de la piel, un órgano tan extenso, permite reducir mucho más la cantidad de proteína a la que se expone el paciente reduciendo el riesgo de efectos secundarios.
El haber podido comer esa cantidad de cacahuetes sin síntomas significa que el parche podría prevenir una reacción grave en caso de que un niño ingiera accidentalmente una pequeña cantidad, declara al respecto el doctor Alkis Togias, del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas de EEUU.
“Se trata de un estudio positivo”, afirma Togias en un editorial publicado con las conclusiones del trabajo en la revista New England Journal of Medicine.
Con información de Business Insider
