Nadie quiere grandes gotas de cera en los oídos, pero piénsalo dos veces antes de cavar con un hisopo de algodón.
Meter un hisopo, o cualquier objeto pequeño, en el oído puede empujar la cera de los oídos de vuelta al canal auditivo. A medida que el canal se llena, podrías experimentar algo de pérdida auditiva, picazón, zumbido e incomodidad en los oídos, dice el neurotólogo Seth R. Schwartz, director médico del Listen for Life Center del Virginia Mason Medical Center en Seattle.
Y esa cera podría estar aumentando más de lo que crees. “Incluso la mitad de la oreja se puede tapar con cera antes de que la gente empiece a darse cuenta”, dice.
¿Por qué tu cuerpo necesita cera?
Tu cuerpo necesita cera para los oídos, así que no hurgues demasiado en ninguno que no haya llegado fuera de su canal auditivo, dice el Dr. Erich Voigt, profesor clínico asociado del departamento de otorrinolaringología del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York.
“El canal auditivo es una especie de cavidad oscura, cálida y húmeda”, dice. “Y cualquier área oscura, cálida y húmeda puede convertirse en una incubadora de gérmenes”. La cera evita que se acumule agua en el oído, manteniendo alejados los gérmenes, el moho y los hongos, dice. Raspar constantemente la cera del oído interno significa eliminar esa protección.
“Pierdes el revestimiento protector”, dice el Dr. Voigt. “La piel puede tener pequeños arañazos, y los gérmenes en lugares oscuros, cálidos y húmedos, comienzan a multiplicarse”. Tendrás un mayor riesgo de contraer una infección del oído externo, una de las infecciones más dolorosas que puedes contraer, dice. Estos son algunas cosas que la cera de tus oídos puede decir sobre tu salud.
Cómo eliminar eficazmente el exceso de cera de los oídos
Si la cera de los oídos te molesta después de eliminar la mayor parte del exterior, una ducha caliente puede ayudar. Resulta ser un lugar ideal para atacar el exceso, según el Dr. Schwartz.
“La cera tiende a licuarse porque absorbe el agua”, explica. “Si te limpias la oreja, es una consistencia blanquecina y suave”. Después de la ducha, limpia la cera de los oídos con una toallita o pañuelo seco, sugiere. Cualquier cosa a la que no puedas llegar fácilmente con el dedo sigue protegiendo tu oído. También puedes usar gotas para los oídos para suavizar la cera.
Consulta a tu médico si limpiar la cera en casa no ayuda, o si crees que se metió un poco dentro la oreja. Un médico puede ayudar a eliminarla o identificar cualquier otra afección. “Algunas personas piensan que tienen cera en los oídos, pero en realidad tienen pérdida auditiva subyacente”, dice el Dr. Schwartz.
Tomado de rd.com What’s the Best Way to Clean Out Earwax—If You Can’t Use Q-Tips?
