¿Cuántos océanos existen en la Tierra?
Los océanos ocupan tres cuartas partes del planeta, y contienen el 97% del agua, albergando una gran parte de la biodiversidad de la Tierra.
El gran mar de agua salada que rodea el globo se suele dividir en cuatro entidades: el océano Pacífico, el océano Atlántico, el océano Índico y el océano Artico. Algunos también consideran la existencia de otro océano diferenciado: el Antártico, que rodea la Antártida, obviamente.
Todos los océanos están conectados, y forman una gran masa continua de agua que rodea todos los continentes, cubre el 71% de la superficie de la Tierra y contiene algo más de 1,300 millones de kilómetros cúbicos de agua.
Con una superficie de casi 165 millones de kilómetros cuadrados, el océano Pacífico ocupa mayor extensión que los océanos Atlántico e Índico juntos. (El océano Atlántico cubre 82 millones de kilómetros cuadrados y el Índico, cerca de 72).
En realidad, más de la tercera parte de la superficie terrestre está cubierta por las aguas del Pacífico. En su máxima anchura, inmediatamente por encima del ecuador, abarca 17,700 kilómetros desde el istmo de Panamá hasta la península de Malaca, en Asia, casi al otro lado del globo.
El océano Pacífico es el más profundo también, con 10,924 metros. Le sigue el Atlántico con 9,219 metros y el Índico con 7,455 metros. Los otros son serían el Ártico y el Antártico.
Concretamente, los océanos producen el 50% del oxígeno que se genera en el planeta. Su importancia para el desarrollo de la vida en el planeta es fundamental. Y cabe destacar que los fondos marinos son en la actualidad más desconocidos que el espacio exterior.
Los océanos constituyen la mayor fuente de proteínas del mundo, ya que más de 2,600 millones de personas dependen de ellos como fuente primaria de proteína. Ahora conoce por qué el mar es azul.
Toda el agua del mar está circulando constantemente, desplazándose según un patrón definido de corrientes. El más conocido de estos ríos oceánicos es la corriente del Golfo, que mantiene una anchura mínima de 80 kilómetros.
Se mueve a una velocidad de hasta 6.5 kilómetros por hora; barre las costas de América del Norte, cruza el Atlántico Norte y templa los climas de Europa septentrional. Una corriente parecida de agua cálida, que fluye hacia el norte procedente de los trópicos, la corriente del Pacífico Norte, atempera el clima de la costa occidental de América del Norte.
Los vientos dominantes son la fuerza principal que mantiene en movimiento las corrientes, pero también revisten importancia las diferencias de densidad del agua.
El agua fría es más densa que la caliente, por lo que se sumerge, mientras que la menos densa asciende. Por eso, el agua fría cercana a los polos se hunde y fluye bajo la superficie del océano hacia el ecuador. Allí asciende para ocupar el lugar del agua cálida que las corrientes superficiales desplazan constantemente hacia los polos.
También las islas y costas continentales influyen en las corrientes, cambiando su curso o dividiéndolas en brazos separados. Pero, en general, las corrientes más importantes tienden a describir grandes círculos alrededor de las diversas cuencas oceánicas.
Impulsados por la rotación de la Tierra sobre su eje, los círculos se desplazan en el sentido de las manecillas del reloj en el hemisferio norte, y en sentido contrario en el hemisferio sur.