Cuatro cosas que tus piernas te dirían que estás haciendo mal
Uno de los problemas más comunes y que podrías atender con su cuidado a tiempo son las várices. Esas venas inflamadas que aparecen de manera silenciosa en tus piernas.
Uno de los problemas más comunes y que podrías atender con su cuidado a tiempo son las várices. Esas venas inflamadas que aparecen de manera silenciosa en tus piernas y que muy pocas veces puedes detectar por síntomas previos. Si tus piernas hablaran, te dirían que lo estas haciendo muy mal.
Sin duda, para toda mujer después de los 25 años los cambios en el cuerpo empiezan a ser cada vez más visibles, por ello, es importante que tengas una rutina de belleza integral; desde lo que comes, tu rutina de ejercicio y tus multivitamínicos favoritos, todo será clave en este proceso y hará que los cambios sean más paulatinos.
Bajar de peso no debe ser tu único objetivo a la hora de hacer deporte, el movimiento y la generación de tono muscular son agentes básicos para la circulación de tu sangre. Recuerda, entre mejor circulación, piernas más bonitas y sin arañitas que duelan.
Estar en forma nunca va a pasar de moda, es algo que debes tomar en serio tanto para tu salud, como para tu bienestar emocional y físico. Busca la manera de equilibrar tu dieta con alimentos frescos y en dosis moderadas, además de sesiones de ejercicio más de 3 veces a la semana.
Así mantendrás un peso alineado a tu complexión y liberarás a las venas de tus piernas de mucha presión y de sangre acumulada.
Este es un tip que has escuchado hasta el cansancio, pero no tiene nada de falso. Evita permanecer parada o sentada durante periodos de tiempo muy largos, mejor, intercala estiramientos o micro caminatas que hagan que tus piernas respiren. No importa tu estilo de vida, ¡no hay pretexto!
Tu mamá, abuelas y tías son un background genético que debes conocer a la perfección en cuestión de varices. Si ellas fueron propensas a desarrollarlas, ¡atención! porque muy posiblemente te verás en esa situación en un futuro. Habla con ellas y pídeles consejos en el tema, pero sobre todo pon en práctica los puntos anteriores.
Sigue estos mandamientos en el cuidado de tus piernas y en un futuro cercano estarás feliz de haberle hecho caso a la sabiduría de tu cuerpo, en especial a la de tus piernas.
Existen soluciones prácticas que pueden cambiar el futuro de tus piernas, pero algo es seguro, para aumentar el efecto positivo y su pleno descanso, prueba tomar pastillas para las várices. Es algo totalmente normal, no causan efectos secundarios y son una dosis de fuerza y vitalidad para esta parte de tu cuerpo. Debes saber que las deportistas de alto rendimiento y también las amateurs, también son propensas a desarrollar várices, nadie está exento.
¡Nunca es tarde para cambiar hábitos, que las várices no sean parte de tu vida!
Fuente: Venastat de Armstrong Laboratorios de México.