Deficiencia de hierro: Todo lo que debes saber para evitar la anemia
¿Sabías que una deficiencia de hierro puede provocar fatiga y mareos? Aprende cómo combatir la anemia con una dieta balanceada.
La carencia de vitaminas y minerales en nuestra dieta puede tener consecuencias graves para la salud. Uno de los problemas más comunes derivados de esta falta es la anemia por deficiencia de hierro. En países como México, muchas personas están en riesgo debido a una alimentación inadecuada, lo que genera complicaciones en su bienestar general.
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La anemia ferropénica es una condición que ocurre cuando el cuerpo no tiene suficiente hierro para producir hemoglobina, una proteína en los glóbulos rojos que se encarga de transportar oxígeno a los tejidos. Como resultado, los órganos no reciben el oxígeno necesario para funcionar correctamente, lo que provoca síntomas debilitantes.
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El hierro no solo es esencial para producir hemoglobina, sino que también es vital para otras funciones importantes como el metabolismo energético y el desarrollo del cerebro. Sin niveles adecuados de hierro, el rendimiento físico y mental se ve gravemente afectado.
Entre los alimentos que contienen hierro hemo están el hígado de res, pollo y pescado. Estos alimentos son fundamentales para prevenir y tratar la anemia.
Los alimentos como las espinacas, las lentejas y los frijoles son ricos en hierro no hemo. Sin embargo, para maximizar su absorción, se recomienda consumirlos con alimentos ricos en vitamina C, como los jitomates o los pimientos.
La vitamina C no solo mejora la absorción del hierro no hemo, sino que también ayuda a que el hierro almacenado en el cuerpo esté disponible cuando se necesite. Frutas cítricas como naranjas y guayabas son una excelente fuente de esta vitamina.
Una forma de mejorar la absorción de hierro es combinar alimentos ricos en hierro no hemo con fuentes de vitamina C. Por ejemplo, se puede acompañar un plato de lentejas con jitomates o un batido de fresas después de una comida. Ciertos alimentos y bebidas, como los lácteos, el té negro y el café, pueden interferir con la absorción del hierro, por lo que se recomienda moderar su consumo.
En la infancia y adolescencia, el cuerpo requiere más hierro para apoyar el crecimiento y desarrollo físico y mental. Las mujeres embarazadas necesitan más hierro debido al aumento de volumen de sangre y las necesidades del feto. A medida que envejecemos, la capacidad del cuerpo para absorber nutrientes disminuye, lo que hace que los adultos mayores sean más susceptibles a la anemia.
Los suplementos de hierro pueden ser necesarios cuando la dieta no es suficiente para satisfacer las necesidades del cuerpo, especialmente en casos de anemia severa.
Es importante consultar a un nutricionista o médico para evaluar tus niveles de hierro y recibir recomendaciones personalizadas.
Mantener niveles adecuados de hierro es esencial para nuestra salud general. Una dieta equilibrada, que incluya fuentes tanto de hierro hemo como no hemo, junto con vitamina C, es clave para prevenir la anemia. Si sospechas que puedes tener una deficiencia, es fundamental acudir a un profesional para un diagnóstico adecuado.