Gajes del oficio: Desventajas de trabajar en un cubículo
Cuando terminé de enseñar una unidad de matemáticas, quise saber si mis alumnos de kínder habían entendido bien los conceptos de...
Desventajas de trabajar en un cubículo
– “Las paredes están tan juntas, que no se puede colgar una hamaca”.
– “Siempre tienes la horrible sensación de que, si oprimes el botón correcto, recibirás un trozo de queso”.
– “Hay 23 cables eléctricos y un solo tomacorriente”.
Tomado de jokeoftheday.com
Cuando terminé de enseñar una unidad de matemáticas, quise saber si mis alumnos de kínder habían entendido bien los conceptos de “docena” y “media docena”. Llevé aparte a una alumna y le dije:
—Si tienes 12 rosquillas, eso se llama una docena, pero si yo me comiera la mitad de las rosquillas, seis exactamente, y a ti te quedaran sólo seis, ¿cómo llamarías a eso?
La niña se llevó las manos a las caderas, se llenó de aire los pulmones, exhaló con fuerza y contestó:
—¡Pues yo llamaría a eso un abuso y una grosería!
Deb Ellis, Canadá
En una ocasión, cuando trabajaba como recepcionista en un hotel, una cliente se inconformó al ver el monto de la factura y exigió hablar con el gerente.
—¿Es correcta esta cuenta? —le dijo, mientras le mostraba la factura por 400 dólares correspondiente a una sola noche de hospedaje.
—Bueno, este hotel cuenta con un spa, dos bares y un centro nocturno —respondió el gerente.
—¡Yo no usé ninguno de esos servicios! —se quejó la mujer.
—Pero pudo haberlo hecho —le replicó el gerente con gesto tranquilo y sin alzar la voz.
Al oír esto, la mujer sacó 200 dólares de su bolso y los colocó sobre el mostrador con resolución.
—En ese caso pagaré sólo la mitad, puesto que usted y yo compartimos la habitación —dijo.
El sorprendido gerente negó con vehemencia la acusación, lo que divirtió mucho a la huésped, quien en tono burlón repuso:
—¡Pero pudo haberlo hecho!
Jill Cohen, Reino Unido
Hace algunos años, cuando vivíamos en Nueva Zelanda, mi papá trabajaba como auxiliar en la comisaría de policía. Su trabajo consistía en dar seguimiento a las multas por infracciones menores que no habían sido pagadas. Generalmente, el procedimiento era enviar una fotocopia de la orden de pago al infractor, indicándole el nuevo plazo y conminándolo a pagar.
Una vez cierto infractor pensó que sería divertido responder a la orden de pago enviando una fotocopia de un billete de 20 dólares. Tras consultar el asunto con el sargento a cargo, mi padre le envío al infractor una nueva orden de pago con la fotocopia de un par de esposas.
Esta vez el sujeto se apresuró a pagar la multa.
Roger Gray, Reino Unido
Tras haber visto la urna que contenía las cenizas de su abuelo recién fallecido, un niño de siete años le preguntó a un empleado de la agencia funeraria donde trabajo:
—Disculpe, señor, ¿podría mostrarme la máquina que achicó tanto a mi abuelo?
Julie Mayich, Canadá
En la peor hora del tráfico, sabes que va a ser un largo camino a casa cuando el GPS de tu auto te pregunta si quieres cambiar a la modalidad de peatón.
Mary-Ellen Fairbairn, Canadá