En el pasillo de limpieza del supermercado, la elección parece interminable: detergente líquido, en polvo o cápsulas. Cada opción tiene ventajas y desventajas, y la decisión final depende tanto de tu presupuesto como de tus hábitos de lavado.
Para aclarar el panorama, consultamos a Melissa Dilkes Pateras, autora y experta en lavandería, y a Mary Gagliardi, científica de Clorox, quienes explican qué aporta cada tipo de detergente y cómo aprovecharlo al máximo.
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Detergente en polvo: económico y duradero
El detergente en polvo es la opción más accesible y la que mejor funciona en cargas muy sucias, como uniformes o ropa de trabajo. Su pH más alto lo hace ideal contra manchas difíciles como barro o pasto.
Ventajas:
Más económico por carga que el líquido o cápsulas.
Envase reciclable y menor impacto ambiental.
Mayor vida útil que otras presentaciones.
Desventajas:
Puede dejar residuos si se usa con agua fría.
Requiere un paso extra para pretratar manchas (hacer pasta o disolverlo).
Debe almacenarse en un lugar seco para evitar grumos.
Consejo de expertos: usa agua tibia o caliente para asegurar su disolución. Si necesitas lavar con agua fría, disuélvelo previamente en agua caliente antes de añadirlo a la lavadora.
Detergente líquido: versátil y eficaz en agua fría
El detergente líquido es el más práctico cuando se lava con agua fría, pues se disuelve fácilmente sin dejar residuos. Además, permite pretratar manchas de grasa o aceite aplicándolo directamente sobre la prenda.
Ventajas:
Funciona en cualquier temperatura de agua.
Ideal para lavar ropa delicada o a mano.
Excelente para pretratar manchas.
Desventajas:
Envase de plástico poco ecológico.
Puede ser pesado y derramarse con facilidad.
Si no se mide bien, se gasta más detergente del necesario.
Consejo de expertos: mide siempre con la tapa dosificadora. En lavadoras de alta eficiencia, usa menos cantidad, ya que estas necesitan menos agua.
Cápsulas de detergente: cómodas, pero costosas
Las cápsulas de detergente son la opción más práctica: ya vienen premedidas, no generan desorden y ocupan poco espacio. Sin embargo, son también la presentación más cara y requieren precaución si hay niños en casa, ya que su apariencia colorida puede confundirse con dulces.
Ventajas:
Sin necesidad de medir ni cargar envases pesados.
Fáciles de transportar, ideales para lavanderías compartidas.
Larga vida útil y cero derrames.
Desventajas:
Precio más alto por carga.
No sirven para pretratar manchas directamente.
Riesgo de intoxicación en niños o mascotas.
Consejo de expertos: coloca siempre la cápsula en el fondo del tambor antes de la ropa para asegurar su correcta disolución. Guárdalas fuera del alcance de niños y mascotas.
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Preguntas frecuentes
¿Qué es mejor: detergente líquido o en polvo?
Depende del tipo de mancha y del agua. El polvo es más efectivo contra manchas difíciles en agua caliente; el líquido funciona mejor en agua fría y para grasas.
¿Se pueden mezclar detergente en polvo y líquido?
No. Los expertos desaconsejan mezclar presentaciones, ya que pueden neutralizarse y disminuir su eficacia.
¿Qué opción es más ecológica?
El detergente en polvo: genera menos residuos plásticos y suele venir en empaques reciclables.
¿El exceso de detergente daña la lavadora?
Sí. Usar más de lo necesario puede dejar residuos que afecten la máquina. Respeta siempre las dosis recomendadas.
No existe un “mejor” detergente universal.
El polvo es económico y fuerte contra suciedad difícil.
El líquido es versátil y práctico en agua fría.
Las cápsulas destacan por su comodidad, aunque son más caras y requieren cuidado extra en el hogar.
La clave está en elegir el detergente que se ajuste a tus necesidades, presupuesto y estilo de vida.
Tomado de RD.com Liquid vs. Powder Detergent vs. Pods: Which Is Best?