El agua es un recurso vital para la vida humana y el planeta. Sin embargo, la escasez de agua es un problema cada vez más grave en México, donde el 70% del territorio se encuentra afectado por sequía.
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El nivel de las presas, represas y cuerpos acuíferos que abastecen a nuestro país, cada vez desciende más y más, y llegará a un punto en el que se secarán, de ahí que exista una gran preocupación por llegar al ‘Día Cero’.
¿Qué es el “Día Cero”?
El “Día Cero” se refiere a la situación crítica en la que los suministros de agua de una ciudad o región se agotan. Obligando a las autoridades a cortar el suministro de agua corriente para preservar lo que queda. Esta situación extrema puede tener consecuencias devastadoras para la salud pública, la economía y la vida cotidiana de las personas.
¿Qué factores provocan el “Día Cero”?
Diversos factores contribuyen a la crisis hídrica en México:
- Cambio climático: La disminución de las precipitaciones debido al cambio climático es uno de los principales factores que provocan la escasez de agua.
- Crecimiento de la población: El aumento de la población incrementa la demanda de agua para consumo doméstico, industrial y agrícola.
- Mala gestión del agua: La sobreexplotación de acuíferos, la contaminación del agua y las fugas en los sistemas de distribución son algunos ejemplos.
- Hundimiento del terreno: La extracción excesiva de agua subterránea puede provocar el hundimiento del terreno, lo que reduce la capacidad de almacenamiento de agua y aumenta el riesgo de inundaciones.
¿Qué regiones de México están en mayor riesgo de enfrentar el “Día Cero”?
El investigador Mario Hernández, del Instituto de Geofísica de la UNAM, destaca la diversidad de problemas relacionados con el agua en todo México e identifica tres regiones distintas con diferentes niveles de acceso y calidad: Noreste, Centro y Sureste.
El Sureste goza de una abundancia de agua superficial. Mientras que el Centro y el Noreste dependen considerablemente del agua subterránea debido a la densidad poblacional y la actividad industrial.
También advierte que las regiones noreste de México podrían ser las primeras en enfrentar el Día Cero sin agua, especialmente ciudades como Monterrey, Nuevo León y Tijuana que ha rozado esta situación límite recientemente y que: “Es una ciudad con unos 2 millones de habitantes que utiliza mucha agua subterránea, que es la principal fuente, pues hay pocos escurrimientos” dijo.
El líquido llega a través de un acueducto desde la desembocadura del río Colorado hasta la ciudad. Es agua superficial, pero procede de una cuenca hidrográfica distinta y se transfiere a través de una larga distancia para proporcionar agua limpia.
Ante este escenario, las autoridades pueden verse obligadas a implementar medidas extremas como la restricción severa del uso del agua. Aunque recalca que la dependencia del transporte de agua desde fuentes distantes es una solución de corto plazo no viable, ni es la solución a esta problemática. “Son soluciones políticas de corto plazo”, concluyó.
¿Qué podemos hacer para evitar el “Día Cero”?
La UNAM hace un llamado urgente a tomar medidas concretas para enfrentar la crisis del agua. La inversión en infraestructura, la promoción del uso eficiente y la implementación de políticas sostenibles son acciones cruciales para garantizar el acceso a este recurso vital para las generaciones presentes y futuras.
Con información Gaceta UNAM, El Sol de Hidalgo