Día Mundial del Agua y la crisis que nos acecha
Solo con un cambio radical en la forma en que gestionamos este recurso vital podremos evitar un futuro marcado por la escasez y los conflictos.
En el Día Mundial del Agua, nos enfrentamos a una realidad alarmante: el agua, recurso vital para la vida, está empezando a escasear a nivel global, y México no escapa a esta problemática.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha declarado una “sequía severa” en la capital del país, y se ha pronosticado un “día cero” para la Ciudad de México, que podría quedarse sin agua el 26 de junio de 2024. Aunque algunos expertos consideran el término “día cero” como una herramienta irresponsable de campañas electorales, la situación es preocupante.
A pesar de los esfuerzos realizados desde la iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas en 1992 para concientizar sobre la importancia del agua, las medidas tomadas no han sido suficientes y las mejoras son prácticamente inexistentes. ¿Cómo hemos llegado a este punto?
El cambio climático es uno de los principales factores que afecta la disponibilidad del agua. El aumento de las temperaturas y la alteración de los patrones climáticos impactan directamente en la distribución y acceso al agua.
Además, la contaminación proveniente de vertidos industriales, agrícolas y domésticos ha deteriorado la calidad de las fuentes de agua dulce, haciendo que muchas de ellas sean inaptas para el consumo humano.
La sobreexplotación de los recursos hídricos y la deforestación también contribuyen a esta crisis, al igual que la desigualdad en el acceso al agua, dejando a millones de personas sin la posibilidad de satisfacer sus necesidades básicas.
Sobreexplotación de acuíferos: El Valle de México, donde se asienta la Ciudad de México, extrae agua del subsuelo a un ritmo insostenible.
Deforestación: La tala de bosques reduce la capacidad de retención de agua del suelo.
FugaS de agua: Las redes de distribución de agua potable en México presentan una fuga considerable. Falta de infraestructura: No se ha invertido lo suficiente en la construcción de infraestructura para el almacenamiento y tratamiento del agua.
Cultura del desperdicio: No valoramos el agua como un recurso finito y la consumimos de forma irresponsable. Un comunicado de la compañía Selectra, indicó que tomando en cuenta las actividades que suele realizar una persona en la vida diaria, se estima que una persona puede consumir en México 125 litros de agua al día, un promedio que supera el consumo recomendado que es de 90 litros diarios por persona.
Ante esta situación, es crucial tomar medidas urgentes para evitar un futuro sin agua.
Es imperativo que tomemos acción de manera inmediata y coordinada para preservar este recurso vital para la vida en nuestro planeta. El futuro de la humanidad depende de nuestra capacidad para enfrentar esta crisis hídrica con determinación y responsabilidad.
Con información de Forbes , UAS, CONAGUA