Cuando llegan las bajas temperaturas en México, no solo sacamos cobijas y chamarras: también regresan los remedios caseros que han acompañado a las familias por generaciones. Entre ellos, los tés mexicanos para aliviar la garganta son un básico de temporada. Su combinación de calor, hidratación y plantas medicinales ayuda a desinflamar, suavizar la irritación y facilitar la respiración.
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La herbolaria tradicional —como la bugambilia, el jengibre, la canela y la manzanilla— ha sido utilizada por sus propiedades antiinflamatorias, expectorantes y calmantes.
Aquí te compartimos tres recetas sencillas y efectivas para reconfortar la garganta durante el invierno.
1. Té de bugambilia con limón y miel
Ideal para: aliviar irritación y aflojar flemas.
Ingredientes:
- 1 puñado pequeño de flores de bugambilia (lavadas)
- 1 taza de agua
- 1 cucharada de miel
- Jugo de medio limón
Preparación:
- Hierve el agua y agrega las flores de bugambilia.
- Deja infusionar entre 5 y 7 minutos.
- Cuela la preparación.
- Añade la miel y el jugo de limón.
Tómalo caliente para maximizar su efecto calmante y expectorante.
2. Té de jengibre fresco con canela
Ideal para: desinflamar la garganta y dar sensación de calor inmediato.
Ingredientes:
- 3 rodajas de jengibre fresco
- 1 raja de canela
- 1 taza de agua
- 1 cucharadita de miel (opcional)
Preparación:
- Coloca el jengibre y la canela en el agua y calienta hasta que hierva.
- Reduce el fuego y deja reposar 8 minutos.
- Endulza con miel si lo deseas.
Es uno de los tés más usados en temporada de frío gracias a su acción antiinflamatoria y reconfortante.
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3. Té de manzanilla con eucalipto
Ideal para: suavizar la garganta y facilitar la respiración.
Ingredientes:
- 1 sobre o 1 cucharada de manzanilla
- 2 hojas pequeñas de eucalipto
- 1 taza de agua
- 1 toque de miel
Preparación:
- Hierve el agua con las hojas de eucalipto durante 2 minutos.
- Apaga el fuego, agrega la manzanilla y tapa por 5 minutos.
- Cuela la mezcla.
- Endulza con un toque de miel.
Es perfecto para noches frías en las que la garganta se siente reseca, irritada o congestionada.
Con información de El Economista
